19ª Semana del Cine Japonés de Las Palmas de Gran Canaria: Naruse / Hayashi – Nubes Flotantes

La 19ª Semana de cine japonés de Las Palmas de Gran Canaria lleva el título de ‘Naruse / Hayashi – Nubes Flotantes’. 

Al mismo tiempo que Kurosawa y Mizoguchi lograban triunfar en Occidente modelando a través de sus ficciones de época el imaginario de la llamada Edad de Oro del cine japonés, el todavía “desconocido” Mikio Naruse afrontó desde la reserva y la simplicidad propias del género melodramático el que sería uno de los proyectos más fructíferos de su carrera: la adaptación póstuma de seis de las principales obras de la novelista Fumiko Hayashi, excepcional cronista de la feminidad japonesa de posguerra doblemente sometida por las heridas de la bomba atómica y las normas sociales impuestas a las mujeres niponas desde el fin de la era Meiji. Nubes flotantes se erigiría en pieza angular de este encuentro entre dos de las figuras más influyentes de la narratividad japonesa del siglo XX, cuyo diálogo dotaría al género popular del shomin-geki de una densidad temporal tan inédita como imprescindible para el devenir posterior del cine moderno.

Programa:

Lunes 26 de julio

19:30 h.

EL ALMUERZO
«Meshi». Japón, 1951. B/N. V.O.S.E. 97’.
Dirección: Mikio Naruse.
+Info e inscripción: aquí

Martes 27 de julio

19:30 h.

EL RELÁMPAGO
«Inazuma». Japón, 1952. B/N. V.O.S.E. 87’.
Dirección: Mikio Naruse.
+Info e inscripción: aquí

Miércoles 28 de julio

19:30 h. 

LA ESPOSA
«Tsuma». Japón, 1953. B/N. V.O.S.E. 89’.
Dirección: Mikio Naruse.
+Info e inscripción: aquí

Jueves 29 de julio

18:30 h. Conferencia: ‘Contra el tiempo: la persistencia de la memoria en Nubes flotantes’ por Aythami Ramos, arquitecto, historiador y crítico de cine.

19:30 h. 

CRISANTEMOS TARDÍOS
«Bangiku». Japón, 1954. B/N. V.O.S.E. 101’.
Dirección: Mikio Naruse.
+Info e inscripción: aquí

Viernes 30 de julio

19:30 h. 

DIARIO DE UNA VAGABUNDA
«Hourou-ki». Japón, 1962. B/N. V.O.S.E. 124’.
Dirección: Mikio Naruse.
+Info e inscripción: aquí

Programa completo: [pdf]

Presentaciones a cargo de Aythami Ramos.

Aforo limitado. Entrada gratuita con inscripción.

Organiza: Asociación de cine Vértigo
Colabora: Casa de Colón. Cabildo de Gran Canaria
Patrocina: Fundación Japón

 

Terence Davies y Lucile Hadzihalilovic competirán en la Sección Oficial del Festival de San Sebastián

La cuarta película de Inés Barrionuevo y los debuts de Alina Grigore, Zhang Ji y Tea Lindeburg también se disputarán la Concha de Oro y el resto de premios oficiales de la 69 edición.

Cineastas consagrados como Laurent Cantet, Terence Davies, Lucile Hadzihalilovic, Claudia Llosa y Claire Simon competirán en la Sección Oficial del Festival de San Sebastián. En la 69 edición, que tendrá lugar del 17 al 25 de septiembre de 2021, Inés Barrionuevo mostrará su cuarto largometraje y también presentarán sus primeras películas Alina Grigore, Zhang Ji y Tea Lindeburg.

Su debut, Ressources humaines / Human Resouces (Recursos humanos, 1999) brindó a Laurent Cantet el Premio New Directors del Festival, en cuya sección Perlak ha participado varias veces: con L’emploi du temps / Time Out (El empleo del tiempo, 2001), Vers le sud / Heading South (Hacia el sur, 2005), Entre les murs / The Class (La clase, 2008), que fue Palma de Oro en Cannes, y Retour à Ithaque / Return to Ithaca (Regreso a Ítaca, 2014). Tras concursar en la Sección Oficial con Foxfire (2012), que obtuvo la Concha de Plata a la Mejor actriz (Katie Coseni), el cineasta galo regresará con Arthur Rambo, en la que Rabah Naït Oufella da vida a un escritor de éxito que deberá lidiar con los mensajes de odio que publicó en el pasado en las redes sociales.

Terence Davies, a quien el Festival dedicó una retrospectiva en 2008, pugnará por tercera vez por la Concha de Oro tras haberlo hecho con The Deep Blue Sea (2011) y Sunset Song (2015). Regresará con Benediction, un biopic en el que Jack Lowden y Peter Capaldi encarnan en distintos momentos de su vida a Siegfried Sassoon, un soldado y poeta antibelicista que sobrevivió a la I Guerra Mundial. La filmografía del realizador británico incluye títulos tan relevantes como Distant Voices, Still Lives (Voces distantes, 1988), que ganó el Leopardo de Oro en Locarno; The Long Day Closes (El largo día acaba, 1992), que compitió en Cannes; House of Mirth (La casa de la alegría, 2000) y Of Time and the City (2008). Con A Quiet Passion (Historia de una pasión, 2016) fue seleccionado en Zabaltegi-Tabakalera.

Lucile Hadzihalilovic, que logró el Premio New Directors con su debut, Innocence, (2004) y después fue jurado de esa sección, también mostró en San Sebastián su mediometraje La bouche de Jean-Pierre (Zabaltegi, 1996) y el corto De natura (Zabaltegi-Tabakalera, 2018). Con Evolution (2015), su segundo largometraje, obtuvo el Premio Especial del Jurado en la Sección Oficial, a la que este año regresa con Earwig. Se trata de la adaptación de una novela de Brian Catling que narra la historia de Albert, un hombre encargado de cuidar de Mia, una niña con dientes de hielo.

Claudia Llosa, ganadora del Oso de Oro en el Festival de Berlín con La teta asustada / The Milk of Sorrow (2009), la primera película peruana nominada al Oscar en la categoría de habla no inglesa, competirá por primera vez en la Sección Oficial con Distancia de rescate / Fever Dream, en cuyo reparto figuran María Valverde, Dolores Fonzi, Germán Palacios y Guillermo Pfening. Tras tu experiencia como jurado en San Sebastián en 2010, ahora la cineasta peruana, también directora de Madeinusa (2006) y No llores vuela (2014), vuelve para presentar un relato vertiginoso e hipnótico sobre los miedos y el poder del amor materno coescrito con Samanta Schweblin, autora de la novela homónima.

Habituada a trabajar indistintamente en proyectos de ficción y de no-ficción, Claire Simon mostrará su nuevo trabajo, Vous ne désirez que moi / I Want to Talk about Duras, una aproximación a la entrevista que la periodista Michèle Manceaux mantuvo con Yann Andrea, amante de la escritora Marguerite Duras en sus últimos años. Será también la primera participación en la Sección Oficial de la cineasta francesa nacida en Reino Unido, autora de obras como Coûte que coûte  / At all costs (1996), Récréations (1998), Mimi (2003), Les Bureaux de Dieu (Las oficinas de Dios, 2008), Gare du Nord (2013) y Le Concours / The Competition (2017).

Por su parte, Inés Barrionuevo participará en la competición con su cuarto largometraje, Camila saldrá esta noche, cuya joven protagonista se enfrenta a los cambios provocados por una mudanza a Buenos Aires y por su ingreso en una escuela privada tradicional. Tras debutar con Atlantida (2014), que tuvo su estreno en la sección Generation de la Berlinale, la cineasta argentina ha dirigido Julia y el zorro (New Directors, 2018) y Las motitos (2020).

TRES DEBUTANTES

La competición oficial permitirá conocer también a cineastas debutantes como la actriz y guionista rumana Alina Grigore, que concursará en la Sección Oficial con Crai nou / Blue Moon, un drama sobre una joven mujer que vive en el entorno opresivo de una familia disfuncional que se opone a sus deseos. Además de haber dirigido varios cortometrajes, Grigore coprotagonizó Ilegitim / Illegitimate y coescribió su guión junto al director Adrian Sitaru, que con este filme participó en la sección Forum de la Berlinale.

También presentará su ópera prima Zhang Ji, que hasta ahora ha trabajado como director de fotografía en títulos como Ba bai bang / Letters from Death Row (Kevin Feng Ke, New Directors, 2008). En su estreno como realizador, presentará Ping Yuan Shang De Mo Xi / Fire on the Plain, un thriller ambientado en la ciudad china de Fentun, donde un joven oficial de policía reabre una investigación sobre unos misteriosos crímenes ocurridos hace ocho años. El productor ejecutivo del filme es Diao Yinan, director de títulos como Bai ri yan huo / Black Coal, Thin Ice (Perlak, 2014) o Nan Fang Che Zhan De Ju Hui / The Wild Goose Lake (El lago del ganso salvaje, Zabaltegi-Tabakalera, 2019).

Por su parte, el primer largometraje de Tea Lindeburg, Du som er i himlen / As in Heaven, está inspirado en el clásico literario danés publicado en 1912 por Marie Bregendahl. La acción transcurre a finales del siglo XIX en una granja donde los miembros de una familia numerosa aguardan al noveno hijo mientras la hermana mayor se prepara para marcharse a estudiar. Con experiencia en el medio televisivo, Lindeburg ha dirigido varios episodios de series de televisión de Dinamarca y es también la creadora de la producción danesa de Netflix Equinox, basada en su propio podcast, Equinox 1985.

AVANCE SECCIÓN OFICIAL

Arthur Rambo

Laurent Cantet (Francia)

Intérpretes: Rabah Nait Oufella, Antoine Reinartz, Sofian Khammes

«Soy astuto e inteligente. Sé de poesía y de política. Pasé de los estratos sociales más bajos a ocupar una posición destacada como provocador autor parisino. He publicado una novela, pero también escribo mensajes de 140 caracteres en las redes sociales. Y cuando lo hago, doy en el blanco. ¡Por eso todos quieren que desaparezca!»

Benediction

Terence Davies (Reino Unido)

Intérpretes: Jack Lowden, Simon Russell Beale, Peter Capaldi, Jeremy Irvine, Kate Phillips, Gemma Jones

Siegfried Sassoon fue un hombre complejo que sobrevivió a los horrores de combatir en la I Guerra Mundial y fue condecorado por su valentía, pero a su regreso se convirtió en un firme crítico de la continuación de la guerra por parte de su gobierno. Su poesía se inspiró en sus experiencias en el frente occidental y terminó siendo uno de los principales poetas de guerra de la época. Idolatrado por aristócratas y estrellas del mundo literario y escénico londinense, mantuvo relaciones con varios hombres mientras intentaba aceptar su homosexualidad. Al mismo tiempo, roto por el horror de la guerra, hizo de su viaje vital una búsqueda de la salvación, tratando de hallarla en la conformidad del matrimonio y la religión. Su historia es la de un hombre atribulado en un mundo fracturado que busca la paz y la aceptación de sí mismo, algo tan vigente entonces como en el mundo actual.

Camila saldrá esta noche / Camila comes out tonight

Inés Barrionuevo (Argentina)

Intérpretes: Nina Dziembrowski, Maite Valero, Diego Sánchez, Adriana Ferrer

Camila se ve obligada a mudarse a Buenos Aires cuando su abuela enferma gravemente. Deja atrás a sus amigos y una escuela secundaria pública liberal por una institución privada tradicional. El temperamento feroz pero prematuro de Camila se pone a prueba. 

Crai Nou / Blue Moon

Alina Grigore (Rumania)

Intérpretes: Ioana Chitu, Mircea Postelnicu, Mircea Silaghi, Vlad Ivanov

La película sigue la evolución psicológica de una joven hacia su proceso de deshumanización. Intenta luchar para conseguir una educación superior y escapar de la violencia de su disfuncional familia. Una ambigua experiencia sexual con un artista será el acicate que le lleve a enfrentarse a la violencia en su familia…

Distancia de rescate / Fever Dream

Claudia Llosa (EEUU – Chile – España)

Intérpretes: Maria Valverde, Dolores Fonzi, Guillermo Pfening, Germán Palacios, Emilio Vodanovich

Una mujer agoniza lejos de casa. Un niño la acompaña a su lado. Ella no es su madre, él no es su hijo. Juntos cuentan una historia inquietante de almas rotas, peligros invisibles y el poder del amor de una madre por su hijo. Basada en la aclamada novela homónima de Samanta Schweblin.

Du som er i himlen / As in heaven

Tea Lindeburg (Dinamarca)

Intérpretes: Flora Ofelia, Thure Lindhardt, Stine Fischer Christensen

Un día, a finales del siglo XIX, la vida de Lise, de 14 años, cambia para siempre. Es la mayor de sus hermanos, la primera de su familia en ir a la escuela y está llena de esperanza y confianza en la vida. Pero cuando su madre se pone de parto, pronto algo parece ir mal. A medida que cae la noche y el parto avanza, Lise comienza a comprender que el día que comenzó siendo una niña podría terminar con ella convertida en la mujer de la casa.

Earwig

Lucile Hadzihalilovic (Reino Unido – Francia – Bélgica)

Intérpretes: Paul Hilton, Romola Garai, Alex Lawther

En algún lugar de Europa, a mediados del siglo XX. Albert se ocupa de cuidar de Mia, una niña con dientes de hielo. Mia nunca sale de su apartamento, donde las contraventanas están siempre cerradas. El teléfono suena con frecuencia y el Maestro pregunta si Mia está bien. Hasta que un día Albert recibe instrucciones para preparar a la niña y salir…

PING YUAN SHANG DE MO XI / Fire on the plain

ZHANG Ji (China)

Intérpretes: Fei Li, Shu Zhuang, Dongxin Fu, Shoulian Li, Bufan Jiang, Tianbo Sun, Dezeng Zhuang

China, 1997. Una serie de asesinatos golpea la ciudad de Fentun. Los crímenes cesan misteriosamente sin que las autoridades hayan podido encontrar al autor. Ocho años después, un joven policía cercano a una de las víctimas, decide reabrir la investigación.

Vous ne désirez que moi / I want to talk about Duras

Claire Simon (Francia)

Intérpretes: Swann Arlaud, Emmanuelle Devos

Un hombre que mantiene una apasionada relación con una célebre escritora 30 años mayor que él necesita hablar. Está fascinado por ella y, sin embargo, siente que no puede seguir adelante. En un intento de poner en palabras la intensidad de su amor, se abre y lo describe con gran claridad. 

 

 

Programación online de la 11ª edición del Atlàntida Mallorca Film Festival

Del 26 de julio al 26 de agosto en Filmin los suscriptores de la plataforma podrán disfrutar sin coste adicional de más de 100 títulos en el marco del festival, 56 de ellos de estreno exclusivo, incluída la programación de la edición presencial en Palma del Atlàntida Mallorca Film Fest (a excepción de 6 títulos exclusivos del festival presencial: El Ventre del Mar, El Jefe Político, Annette, Doctor Portuondo, Laurent Garnier: Off the record y Death of a Ladies’ Man).

A continuación 15 títulos imprescindibles del festival recomendado desde Filmin que solo se podrán ver en su edición online.

– Bajo los cielos del Líbano, de Chloé Mazlo. La directora franco-líbana, especializada en animación, nos brinda una ópera prima con ecos de Wes Anderson y Marjane Satrapi con decorados artesanales y rodada en Super 8 por la directora de fotografía Hélène Louvart (“Lazzaro Feliz”). Alba Rohrwacher y Wajdi Mouawad protagonizan este drama de época ambientado en la primera guerra del Líbano.

– Louloute, de Hubert Viel. Laure Calamy, última ganadora del Premio César a Mejor Actriz, protagoniza este hermosa historia familiar que nos transporta a la Normandía ganadera de los años 80, cuando los animales no eran aún industria.

– Confía en mí, de Emil Trier. Este thriller documental descubre la increíble historia de Waleed Ahmed, “el Mark Zuckerberg de Noruega”, quien afirma haber inventado el cargador solar y tener los derechos de los conciertos de Justin Bieber en Escandinavia. Acabó siendo arrestado por el FBI y sentenciado a 11 años de prisión.

– Temporada de caza, de Sabine Boss. Desde Suiza nos llega este meticuloso y sofisticado thriller que se basa en el escándalo de emisiones contaminantes de Volkswagen, conocido como «dieselgate», de 2015.

– Max Richter’s Sleep, de Natalie Johns. Un documental seleccionado en Sundance que nos sumerge en la realización de Sleep, un experimento musical de 8 horas compuesto por el músico Max Richter, que explora el espacio entre la vigilia y el sueño, entre la conciencia y el subconsciente.

– Havel, de Slávek Horák. Biopic que se centra en los años de juventud y en la transformación del dramaturgo Václav Havel, figura clave en la caída del régimen checoslovaco a finales de la década de los años 80 y que posteriormente acabaría llegando a la presidencia de la República Checa cuando ésta fue establecida en 1993.

– An Impossible Project, de Jens Meurer. Fascinante e inspirador documental sobre la venganza de lo analógico a manos de un excéntrico científico austríaco, quien salvó la última fábrica de Polaroid del mundo.

– Loca por la vida, de Ann Sirot y Raphaël Balboni. Este personal y singular debut trata de comprender el extraño mundo donde vivimos y refleja las dificultades de la convivencia familiar cuando uno de los miembros enferma de demencia senil. Por dramático que parezca, los realizadores belgas logran aproximarse a este crudo terreno desde el registro de la comedia e incluso el musical, logrando un feel good de lo más agradable y sorprendente.

– El hijo del tendero, el alcalde, el pueblo y el resto del mundo, de Claire Simon. Una de las documentalistas europeas más relevantes firma este conmovedor documental sobre la aventura de crear una plataforma VOD en Lussas, un apartado pueblo del interior de Francia, y las reflexiones que suscita alrededor del séptimo arte entre viñedos y cerezos.

– The Village Detective: A Song Cycle, de Bill Morrison. El responsable de la aclamada “Dawson City: Frozen Time» (2015) regresa con este apasionante documental que desentraña desde las profundidades del Atlántico una película que se creía perdida pero que apareció en la red de un pescador islandés: «The Village Detective», dirigida en 1969 por Ivan Lukinskij. Este film sigue la figura del actor ruso Mikhail Zharov.

– In the mirror, de Laila Pakalnina. Rodada enteramente en formato selfie y en blanco y negro, la directora letona Laila Pakalniņa reinterpreta la fábula de Blancanieves y los siete enanitos en un universo obsesionado con el CrossFit.

– The year before the war, de Davis Simanis Jr.. Una tragicomedia extravagante y bizarra ambientada en la Europa de 1913, recreando los días previos a la Primera Guerra Mundial, rica en sorpresas y libremente inspirada en el primer cine mudo. Con una marcada estética expresionista, el público podrá elegir verla en su original blanco y negro o en color.

– Reindeerspotting, de Joonas Neuvonen. Primera parte de «Lost Boys», también enmarcada en el Atlàntida Mallorca Film Fest 2021. Titulada en referencia a la inolvidable película de Danny Boyle. Es un documental atrevido e irreverente sobre un grupo de junkies, filmado por uno de ellos, cuya salida en Finlandia dio lugar a una polémica sin precedentes que acabó siendo proyectada en el MOMA de Nueva York.

– La Treintena, de Mireia Noguera y Marta Vives. Una serie escrita, producida y ejecutada en pleno confinamiento sobre cuatro amigas que se enfrentan al abismo de la vida adulta. Cuenta con los rostros de Silvia Abril, David Solans, Samanta Vilar y La Terremoto de Alcorcón, entre otros.

– An Ordinary Country, de Tomasz Wolski. Conversaciones controladas, grabaciones con cámaras ocultas, interrogatorios vejatorios, documentos de reclutamiento y videotutoriales para formar policías: todos estos materiales están presentes en este brutal y terrorífico documental que expone el control que poseía la Polonia comunista sobre sus ciudadanos.

Para consultar toda la programación online: https://atlantidafilmfest.com/es/online

*Fuente Filmin.

Sitges 2021 enseña sus colmillos y revela las primeras novedades

Films de directores consagrados como Sion Sono o Ben Wheatley, y directoras debutantes como Prano Bailey-Bond o Carlson Young, entre las primeras confirmaciones

La bestia se despierta. El 54º Sitges – Festival Internacional de Cinema Fantàstic de Catalunya, que se celebrará del 7 al 17 de octubre, desata su naturaleza salvaje y anuncia los primeros nombres de su programación. Una edición que mostrará el abanico más amplio de tendencias dentro del cine de género, a través de la variedad de estilos y miradas que conviven en el panorama actual.

La imagen de Sitges 2021, basada en el concepto de hombre lobo, protagonista de esta edición, ha sido creada por la agencia China Madrid. Sus autores explican que “ha sido muy interesante trabajar con un imaginario tan potente como el del leitmotiv de este año, pero intentando transcender la pura iconografía de la bestia, que ya es algo casi pop, y buscando sugerir una conversación mucho más amplia. ¿Tenemos todos un poco de lobo, de bestia interior? ¿Dos caras? ¿Cómo gestionamos nuestras dualidades? Por eso nos pareció que el naipe podría ser un objeto muy atractivo para reflejar esto. Subvertir una de estas figuras y mostrar que todos tenemos un derecho y un revés. Trabajar con Carmen García Huerta, creadora de algunas de las imágenes más poderosas de los últimos años, ha sido todo un placer, y ha llevado la idea a un uni verso ilustrado lleno de matices y sutilidades. Y encontrando aquí una curiosa simbiosis entre lo brutal y lo delicado”.

Avance de programación

La sorprendente colaboración entre el cineasta japonés Sion Sono y Nicolas Cage se materializa en Prisoners of the Ghostland, un film de acción y terror sobrenatural. Cage encarna a un ladrón de bancos que, enfundado en un traje programado para autodestruirse en cinco días, buscará a una desaparecida Sofia Boutella.

El británico Ben Wheatley (Kill ListTuristasHigh-Rise) presentará la experiencia sensorial y oscura de In the Earth, ambientada en un mundo que busca la cura de un virus letal a través de experimentos realizados en el bosque. También se podrá ver Son, del irlandés Ivan Kavanagh, un drama de terror sobre el coraje de una madre que tendrá que decidir hasta dónde está dispuesta a llegar para proteger su hijo de fuerzas malignas. El noir cantonés Limbo, de Soi Cheang, estará también en Sitges 2021 con un drama policíaco con asesino en serie del prolífico director de Hong Kong.

De Japón llega la comedia de ciencia ficción Beyond the Infinite Two Minutes, dirigida por Junta Yamaguchi, en la cual el propietario de un café descubre que su televisión muestra imágenes del futuro, pero solo con una antelación de dos minutos. Sound of Violence, con su retahíla de asesinatos explícitos, estará también en el Festival; un film de Alex Noyer, visceral y sinestésico.

Llanto maldito, del director colombiano Andrés Beltrán, es la obra seleccionada para representar a Sitges en el Blood Window Showcase del Marché du Film de Cannes 2021. Horror puro en la historia de un matrimonio en crisis que vivirá experiencias paranormales.

En cuanto a los documentales, se verá A Glitch in the Matrix de Rodney Ascher, un trabajo de cariz científico y metafísico que se pregunta en un viaje sugerente si el ser humano vive dentro de una simulación.

Seven Chances, la sección del Festival programada en colaboración con la ACCEC (Asociación Catalana de la Crítica y la Escritura Cinematográfica) avanza una de sus propuestas: The Amusement Park (1973). La película perdida de George A. Romero, redescubierta y restaurada en 4K por su viuda, es una angustiosa pesadilla sobre la vejez y el maltrato a la gente mayor.

WomanInFan

A pesar de que la presencia de la mujer creadora dentro de la industria del fantástico es cada vez más notoria y brillante, las estadísticas las sitúan en clara desventaja. A título de ejemplo, en la sección oficial a competición de Sitges en los últimos diez años solo un 6% de los largometrajes han sido dirigidos por mujeres (cifra que sube hasta el 10% en codirección).

WomanInFan nace con la voluntad de ayudar a mejorar esta realidad en tres líneas de trabajo principales:

  1. Arrojando luz en la memoria histórica de todas aquellas mujeres que han contribuido de una manera u otra a la historia del cine fantástico. En este sentido, se inicia la creación de un fondo documental en línea de memorabilia.
  2. Sensibilizando el talento femenino respecto al fantástico como un lenguaje más. En este sentido, se concederán tres becas, gracias al apoyo de Vertix, para tres cineastas sin bagaje en el fantástico pero con una inicial trayectoria cinematográfica destacada.
  3. Promoviendo la visibilización de la mujer cineasta en el cine de género para que la industria audiovisual del país confíe este tipo de proyectos a futuras productoras, directoras y guionistas. El Festival de Sitges amplía pues sus funciones para producir un cortometraje anual escrito y dirigido por mujeres dentro de una convocatoria abierta.

Dentro de la programación de Sitges 2021 no faltarán las últimas novedades del fantástico dirigido por mujeres, que se podrán ver en diferentes secciones del certamen. Habrá títulos como Censor, de la británica Prano Bailey-Bond. Terror ochentero en el cual una censora de películas interpretada por Niamh Algar (Without NameRaised by Wolves) decide investigar la desaparición de su hermana.

The Blazing World, de la debutante norteamericana Carlson Young, propone una aventura épica a los rincones más oscuros de la imaginación, con un reparto integrado por Dermot Mulroney o el veterano Udo Kier. La canadiense Amelia Moses da la vuelta al mito del hombre lobo en Bloodthirsty, una historia de terror con una joven cantante de instintos salvajes.

El divertido documental Alien On Stage, de Lucy Harvey y Danielle Kummer, sigue a un grupo de conductores de autobús e integrantes de una compañía de teatro amateur de Dorset (Reino Unido) en su objetivo de crear una obra única: una adaptación del film Aliens.

Sitges Classics: hombres lobo y recuperaciones de cine español

El mito del hombre lobo impregna el cartel de Sitges 2021 y motiva la retrospectiva “La bestia interior”, con algunos de los mejores títulos del subgénero producidos durante un periodo de cuatro décadas.

El clásico El hombre lobo (The Wolf Man), de George Waggner (1941) con Claude Rains, abre esta retrospectiva que continúa con cintas como El bosque del lobo (Pedro Olea, 1970), Nazareno Cruz y el lobo (Leonardo Favio, 1975), El retorno del hombre lobo (Paul Naschy, 1981), Aullidos (The Howling) (Joe Dante, 1981) y Un hombre lobo americano en Londres [4K] (An American Werewolf in London) (John Landis, 1981).

Sitges Classics recuperará dos cintas españolas. La primera es El extraño viaje, de Fernando Fernán Gómez, una obra de culto escrita a partir de un argumento de Luis García Berlanga en la cual la monotonía de un pequeño pueblo solo se rompe los sábados, cuando llega un grupo musical de Madrid a amenizar la vida de sus habitantes.

La segunda propuesta es la proyección remasterizada en 4K de El día de la bestia, de Álex de la Iglesia, uno de los grandes hitos del fantástico estatal contemporáneo.

Historias para no dormir

Cincuenta años después de su estreno, Historias para no dormir vuelve con una combinación de lo mejor del género de suspense con el poder y talento del cine moderno. Rodrigo Cortés, Rodrigo Sorogoyen, Paco Plaza y Paula Ortiz han realizado cuatro relatos autoconclusivos que se estrenarán en primicia en Sitges 2021 y que harán disfrutar a los nuevos espectadores de versiones actualizadas de las mejores historias de Chicho Ibáñez Serrador. Se trata de una producción de VIS y las productoras Prointel e Isla Audiovisual para Amazon Prime Video y RTVE que recupera el formato de suspense que revolucionó el panorama audiovisual de los años 60.

La Broma, con guion y dirección de Rodrigo Cortés, es una reelaboración libre de la historia original de Ibáñez Serrador que reúne a Eduard Fernández, Nathalie Poza y Raúl Arévalo en un triángulo de personajes poco edificantes dispuestos a traicionarse entre sí cuando su interés personal así lo aconseje.

Rodrigo Sorogoyen es el encargado de dirigir El Doble, un perturbador relato cuyo guion coescribió con Daniel Remón y que está protagonizado por David Verdaguer y Vicky Luengo. La historia traslada a los espectadores a un futuro no muy lejano, en un mundo cada vez más deshumanizado, en el cual la inteligencia artificial y las máquinas ocupan un enorme y creciente espacio en las relaciones humanas.

Paco Plaza dirige Freddy, el nuevo relato de suspense cuyo guion ha escrito junto con Beto Marini y que cuenta con la participación de Miki Esparbé, Adriana Torrebejano y Carlos Santos. Este episodio se ubica en el rodaje de la serie original cuarenta años atrás, donde el ventrílocuo protagonista establece una inquietante relación con su muñeco.

Dirigido por Paula Ortiz, con guion de Manuel Jabois y Rodrigo Cortés, y con la participación como protagonistas de Dani Rovira e Inma Cuesta, El Asfalto combina el suspense con el surrealismo de una forma tan rompedora y diferente como en su momento lo hizo el original.

Fantastic 7

El Sitges – Festival Internacional de Cinema Fantàstic de Catalunya, junto con el partenariado del Marché du Film – Festival de Cannes y el responsable de relaciones internacionales de la INCAA Bernardo Bergeret, presentan la tercera edición del Fantastic 7, un programa que avanza las próximas producciones dentro de la industria del género mundial, favoreciendo la conexión de estos títulos con representantes de la distribución y la producción internacional.

La iniciativa exhibe siete propuestas presentadas por siete festivales de todo el planeta, que tienen en el género fantástico uno de los rasgos de identidad dentro de su programación. Además de Sitges, los otros certámenes que forman parte del evento son: el Toronto International Film Festival, el South by Southwest, el New Zealand International Film Festival, el Guadalajara International Film Festival, el Cairo International Film Festival y el Bucheon International Film Festival (BIFAN).

Fantastic 7 tiene la voluntad de poner en común proyectos en diferentes fases de producción o finalizados con inversores de todo el mundo, con el objetivo de favorecer su comercialización final. Este año, la madrina del acto será la directora Mary Harron, directora de la cinta de culto American Psycho, y figura capital dentro del género fantástico. La incorporación de Harron responde también a la misión de visibilización del papel de la mujer cineasta en el cine fantástico a través del programa WomanInFan.

El acto, apadrinado por Harron, se celebrará el próximo domingo 11 de julio dentro del marco del Marche du Film – Festival de Cannes, en formato en línea y presencial simultáneamente. El proyecto elegido por Sitges es La pasajera, de Raúl Cerezo y Fernando González Gómez.

Con la incorporación del Festival Internacional de Nueva Zelanda, el Fantastic 7 logra la primera muestra mundial del cine de género fantástico de todos los continentes.

SGAE Nova Autoria

Los Premios SGAE Nova Autoria que organizan la SGAE y la Fundación SGAE, a través del Consejo Territorial de la SGAE en Catalunya, celebraron sus 20 años dentro del Festival de Sitges. Después de la parada por la pandemia del año 2020, los trabajos audiovisuales finalistas que presentan las escuelas de cine de Catalunya llegan a la 21ª edición y se volverán a proyectar en el certamen.

Los galardones de la Fundación SGAE tienen la voluntad de descubrir, promover y ayudar a difundir las producciones audiovisuales que elaboran los alumnos de las universidades y las escuelas de cine de Catalunya. De hecho, muchos autores y muchas autoras que han participado, hoy son reconocidos y reconocidas profesionales del sector audiovisual.

Mar Coll, directora y guionista; Carmen Fernández Villalba, guionista, directora, escritora y periodista, y Alfred Tapscott, compositor de bandas sonoras para cine, televisión y publicidad, son los miembros del jurado de los Premios SGAE Nova Autoria 2021 que se entregarán en las categorías de mejor dirección, mejor guion y mejor música original.

Carnet Jove

Un año más la Agència Catalana de la Joventut a través del Carnet Jove y el equipo de dirección de Sitges 2021 – Festival Internacional de Cinema Fantàstic de Catalunya, selecciona a cinco jóvenes que formarán parte del XVII Jurado Carnet Jove de Sitges, un jurado oficial del Festival que otorgará el premio Jurado Carnet Jove a la mejor película de la Sección Oficial Fantástico, el premio Anima’t al Mejor Largo de Animación y el premio Anima’t al Mejor Corto de Animación. El objetivo de esta colaboración es la de profesionalizar la crítica cinematográfica, dando la oportunidad a cinco jóvenes interesados en el mundo del cine de formar parte de uno de los jurados oficiales del Festival de Sitges.

La convocatoria está abierta y se puede presentar candidatura hasta el 8 de julio a través de la web: carnetjove.cat/connectat.

Libro y vinilo 

Las publicaciones de Sitges crecen y, en esta 54ª edición, el Festival propone una sinergia entre cine y música a través de un libro y un vinilo.

El objetivo del libro Tres piezas para el asesino, publicado por Hermenaute, es analizar cronológicamente la relación entre jazz, rock y electrónica en el cine criminal y de terror en la segunda mitad del siglo XX.

El disco doble vinilo Kong’n’roll, publicado por Family Spree, es un homenaje al Festival y al libro, en el cual 28 bandas de la escena rock estatal versionan temas incluidos en los films reseñados en el libro.

Premio Minotauro

Como cada año, Ediciones Minotauro será la editorial oficial del Festival. Durante el acontecimiento audiovisual, siempre dispuesto a vincularse con el mundo de la literatura, se presentará en exclusiva la próxima obra ganadora del Premio Minotauro, galardón que distingue de entre todos los proyectes participantes la mejor novela de ciencia ficción, fantasía y terror en español.

 

Sigourney Weaver protagoniza el cartel oficial de la 69 edición del Festival de San Sebastián

La imagen es obra de la donostiarra Eva Villar, que ha partido de una fotografía de Matthew Brookes. Desde este año los premios de interpretación serán de género neutro sin distinción entre hombres y mujeres.

La actriz Sigourney Weaver será la protagonista del cartel oficial de la 69 edición del Festival de San Sebastián, que se celebrará del 17 al 25 de septiembre. La imagen muestra una fotografía en blanco y negro de la actriz estadounidense adornada con brochazos coloristas que remiten a los carteles de las otras secciones, también diseñados por Eva Villar Estudio.

En 2018, el Festival emprendió una nueva línea gráfica en su cartelería que combina fotografía e ilustración y está presidido por importantes figuras de la cinematografía internacional. Tras los protagonizados por Isabelle Huppert, Penélope Cruz y Willem Dafoe, en 2021 será Sigourney Weaver quien preste su rostro a la 69 edición en un diseño de la donostiarra Eva Villar creado a partir de una fotografía de Matthew Brookes.

La primera visita de Weaver a San Sebastián coincidió con su debut en el cine en Alien (Alien, el octavo pasajero, 1979), la película que la catapultó a la fama gracias al inolvidable personaje de la teniente Ripley. Después, la actriz ha visitado la ciudad dos veces más para presentar, también en la Sección Oficial y ya convertida en estrella internacional, A Map of The World (Mi mapa del mundo, 1999) y A Monster Calls (Un monstruo viene a verme, 2016). En esta última ocasión, Sigourney Weaver recibió el Premio Donostia en reconocimiento a toda su carrera.

Nominada al Oscar tres veces y ganadora de dos Globos de Oro, la intérprete ha participado en sagas como Alien o Ghostbusters (Los cazafantasmas) y en películas como Gorillas in Mist (Gorilas en la niebla, 1988), Working Girl (Armas de mujer, 1988), Death and the Maiden (La muerte y la doncella, 1994), The Village (El bosque, 2004, Velódromo) y Rampart (Sección Oficial, 2011). Entre los cineastas con quienes ha trabajado destacan Ridley Scott, Peter Weir, James Cameron, Mike Nichols, Roman Polanski, Ang Lee y David Fincher.

El Festival tiene el placer y el honor de anunciar que la imagen de su 69 edición será la de Sigourney Weaver, una actriz excepcional y muy querida por el público que ha brillado en todos los registros con personajes que son parte del imaginario cinematográfico universal”, afirma el director del Festival de San Sebastián, José Luis Rebordinos, quien hoy ha presentado en Tabakalera el acto acompañado por Joxean Fernández, miembro del comité de Dirección del certamen.

«El valor de la presencia humana y la cultura»

En palabras de la diseñadora Eva Villar, en la confección de los carteles de esta edición ha sido determinante el contexto de la actual pandemia, que les ha hecho “poner el foco en la importancia de los valores reales, en el valor de la presencia humana y la cultura en la vida de la ciudadanía”. “Hemos convertido estos carteles en un espacio donde convergen la comunicación y el arte. Como estudio, si el proyecto lo permite, nos gusta forzar el proceso creativo, ir más allá, formando equipos con artistas”, añade Villar, quien ha realizado sus diseños en colaboración con Juan Ugalde. Este artista bilbaíno, que vive a caballo entre Madrid y Berlín, es un pintor figurativo de tendencia pop cuya obra se caracteriza por la fusión entre pintura y fotografía.

Eva Villar ha trabajado como directora de arte para firmas como Gucci Group, Stella McCartney, Marks & Spencer, Swatch Group o Loewe, y también dirige el espacio de creación de RQER en San Sebastián (www.rqer.es).

 

Premios de interpretación

A partir de esta edición, el Festival de San Sebastián no hará una distinción de género en los premios de interpretación. La Concha de Plata al mejor actor y a la mejor actriz serán reemplazadas por la Concha de Plata a la mejor interpretación protagonista y a la mejor interpretación de reparto. “El cambio obedece a la convicción de que el género, una construcción social y política, deja para nosotros de ser un criterio de distinción en la actuación. El criterio para el Jurado será el de distinguir entre malas o buenas actuaciones, sumándonos así al camino iniciado ya por nuestras amigas y amigos del Festival de Berlín. Son momentos de cambio y de toma de decisiones. Seguimos con atención los debates que en estos momentos se producen en el interior del movimiento feminista sobre este y otros temas. No tenemos certezas, pero sí voluntad de seguir evolucionando y ayudando a construir una sociedad más justa e igualitaria”, explica el director del Festival, José Luis Rebordinos. Esta modificación del reglamento permite acoger otras identidades que no se adscriben a los géneros masculino o femenino y reconoce, además, el trabajo de las denominadas interpretaciones de reparto, que no suelen ser galardonadas en los festivales de cine. Estos premios podrán concederse ex aequo. 

La evolución de la pandemia determinará la forma final de la presente edición, que seguirá marcada por las restricciones sanitarias, aunque el Festival confía en estar más cerca de un año previo a la crisis del coronavirus. Por segundo año consecutivo, el Velódromo no podrá ser utilizado como sala gigante de cine ni habrá fiestas de inauguración y clausura, pero sí se recuperará tanto la retrospectiva ‘Flores en el infierno. La edad de oro del cine coreano’, con un número menor de títulos al inicialmente previsto, como la sección Klasikoak. Además, Nest, la competición internacional de cortometrajes de estudiantes de cine, celebrará sus veinte años de existencia con un programa especial de actividades.

Confiamos en ampliar el número de proyecciones y la capacidad de aforo de las salas respecto al pasado año, y también queremos recuperar el glamour en la alfombra roja. En definitiva, nos gustaría que el de este año fuera un festival que devolviera la ilusión a la ciudad tras más de un año de gran incertidumbre y sufrimiento para muchas personas”, concluye José Luis Rebordinos.

 

La 69 edición del Festival de San Sebastián dedicarán una retrospectiva a la era dorada del cine coreano

El ciclo ‘Flores en el infierno. La edad de oro del cine coreano’ incluye diez títulos producidos en los años 50 y 60.
El Festival de San Sebastián y Filmoteca Española organizan, en colaboración con Filmoteca Vasca y el Centro Cultural Coreano en España, la retrospectiva Flores en el infierno. La edad de oro del cine coreano, que en 2020 tuvo que suspenderse por la pandemia. El ciclo, que incluirá diez títulos de los años 50 y 60, se completará con un libro monográfico editado por el Festival, Filmoteca Española y el Centro Cultural Coreano.
Aunque el cine de Corea del Sur se ha convertido en una presencia constante en festivales internacionales y en un referente del cine contemporáneo, la historia de esta cinematografía sigue siendo bastante desconocida para el público occidental y nuestro conocimiento de ella suele reducirse a los títulos producidos a partir de la década de los 90.
Este ciclo se centra en la llamada era dorada del cine surcoreano, cuando, pese a la precaria situación económica en que se encontraba el país tras la guerra de Corea y el control de la dictadura militar de Park Chung-hee, se desarrolló una industria cinematográfica capaz de satisfacer la demanda de un cine popular para el gran público y de consolidar las carreras de directores de diferentes estilos e inquietudes: algunos de ellos mostraban una imagen de sociedad moderna en desarrollo, mientras que otros denunciaban las duras condiciones de vida de la época.
La selección incluye diez títulos producidos en las décadas de los 50 y 60 e intenta reivindicar a un grupo de cineastas que pueden considerarse como los más destacados representantes de ese cine clásico surcoreano y trazar un panorama de los géneros más habituales en ese período, algunos de ellos inspirados en el cine americano y trasplantados a la realidad local, otros puramente autóctonos.
Entre las películas que conforman el ciclo se encuentran algunas de las más emblemáticas de la época: Hanyeo / The Housemaid (1960) de Kim Ki-young, considerada una de las obras maestras de la historia del cine surcoreano; crónicas duras y realistas de la vida en la Corea del Sur de posguerra como Ji-okhwa / The Flower in Hell (1958) y Obaltan / Aimless Bullet (1961); o clásicos del melodrama como Gwiro / Homebound (1967), Angae / Mist (1967) y Hyu-il / A Day Off (1968).
También está presente el film noir con Geom-eun meori / Black Hair (1964), el thriller con Ma-ui gyedan / The Devil’s Stairway (1964) o el cine juvenil representado por Maenbal-ui cheongchun / The Barefooted Young (1964). Dumangang-a jal itgeora / Farewell Duman River (1962), por su parte, es una muestra de un género típicamente local como es el western manchú, cintas de aventuras ambientadas en Manchuria e inspiradas en el western americano.
Después de su proyección en el Festival de San Sebastián, la retrospectiva podrá verse en el cine Doré de Filmoteca Española durante los meses de octubre y noviembre.
FESTIVAL CULTURAL COREANO EN SAN SEBASTIÁN
Además, entre los días 10 y 30 de septiembre San Sebastián acogerá el Festival Cultural Coreano, que permitirá disfrutar de espectáculos, conciertos, exposiciones, cuentacuentos y jornadas gastronómicas. Esta iniciativa del Centro Cultural Coreano en España organizada en colaboración con el Ayuntamiento de San Sebastián persigue dar a conocer la cultura del país asiático y se celebra en distintas ciudades de España desde 2018. Durante su celebración en varias localizaciones de San Sebastián, el festival logrará que la cultura coreana esté más presente que nunca en la ciudad.

Películas

Ji-okhwa / The Flower in Hell

Shin Sang-ok (Corea del Sur) – 1958

Intérpretes: Kim Hak, Choi Eun-hee, Jo Hae-won, Kang Sun-hee

Young-shik y su banda viven en un campamento militar norteamericano y se dedican a robar mercancías del almacén para venderlas en el mercado negro. Su hermano menor, Dong-shik, llega a Seúl con la intención de convencerle de que regrese a su pueblo natal, pero acaba por instalarse también en el campamento. Young-shik intenta que Dong-shik vuelva al pueblo antes que él y le pide a su novia Sonia que se case con él tras el atraco que está preparando. Pero Sonia ha puesto los ojos en Dong-shik, al que seduce mientras Young-shik y su banda perpetran el robo.

Hanyeo / The Housemaid

Kim Ki-young (Corea del Sur) – 1960

Intérpretes: Kim Jin -kyu, Ju Jeung-nyeo, Lee Eun-sim, Um Aing-ran, Go Seon-ae

Un profesor de música ha trabajado duramente, junto con su mujer, para poder comprar una casa de dos plantas. Cuando la esposa, que es costurera, cae enferma por el excesivo esfuerzo realizado para pagar la casa, contratan a una empleada del hogar. Poco después de quedar embarazada, cuando la esposa sale de viaje a visitar a su familia, la criada seduce al profesor y se queda embarazada. La esposa convence a la criada de que se tire por la escalera para provocarse un aborto, y la criada, tras haber perdido a su bebé, comienza a volverse más violenta.

Obaltan / Aimless Bullet

Yu Hyun-mok (Corea del Sur) – 1961

Intérpretes: Kim Jin -kyu, Choi Moo-ryong, Moon Jung-suk, Seo Ae-ja

La familia Song vive en un barrio de chabolas. Cheol-ho, que mantiene a su mujer embarazada y a su hijo, a su hermano pequeño mutilado de guerra, a sus dos hermanas menores y a su madre postrada en la cama, sufre un persistente dolor de muelas. La familia intenta hacer frente a la dura realidad como puede hasta que la tragedia les golpea.

Dumangang-a jal itgeora / Farewell Duman River

Im Kwon-taek (Corea del Sur) – 1962

Intérpretes: Kim Seok-hun, Hwang Hae, Moon Jung-suk, Um Aing-ran, Jang Dong-hee

Estudiantes universitarios patrióticos, encabezados por su profesor y acompañados por amigos británicos, dejan a sus familias y acuden a Manchuria a luchar por la libertad de su país contra los invasores japoneses.

Geom-eun meori / Black Hair

Lee Man-hee (Corea del Sur) – 1964

Intérpretes: Moon Jeong-suk, Lee Dae-yub, Jang Dong-hee, Kim Wun-ha, Chae Rang

Yeon-sil, casada con el jefe de una banda, es acusada de adulterio, aunque en realidad ha sido violada por un miembro de la organización adicto al opio. Como consecuencia, la desfiguran y apartan de su marido, siguiendo las normas de la organización, y a partir de entonces, se ve obligada a convivir con el adicto al opio y a trabajar como prostituta para mantener a ambos hombres.

Maenbal-ui cheongchun / The Barefooted Young

Kim Kee-duk (Corea del Sur) – 1964

Jo Doo-soo, miembro de una banda callejera, ayuda un día a Joanna, un estudiante universitaria, cuando unos delincuentes tratan de robarle el bolso. Joanna es hija de un diplomático y pertenece a la clase alta, mientras que Jo Doo-soo pasa su tiempo haciendo trabajos para la banda. Atraídos por sus vidas opuestas, Doo-soo y Joanna se enamoran rápidamente. Joanna es una devota cristiana y está convencida de que si Doo-soo cambia la vida que lleva, será una persona totalmente nueva.

 

Ma-ui gyedan / The Devil’s Stairway

Lee Man-hee (Corea del Sur) – 1964

Intérpretes: Kim Jin-kyu, Moon Jung-suk, Bang Seong-ja, Jeong Ae-ran, Choi Nam-hyun

El doctor Hyeon, un prestigioso cirujano, mantiene un romance con Jin-suk, una enfermera de su mismo hospital. Sin embargo, decide casarse con la hija del director del hospital para poder llegar a sucederle, por lo que se ve enfrentado a un gran dilema cuando Jin-suk le revela que está embarazada. En medio de una discusión entre ambos, ella cae por una escalera y se rompe una pierna. Él le inyecta un sedante para inducirle el coma y posteriormente la ahoga en un estanque del patio trasero del hospital. En cuanto se casa con la hija del director del hospital, el espectro de Jin-suk comienza a acecharlo.

Angae / Mist

Kim Soo-yong (Corea del Sur) – 1967

Intérpretes: Shin Seong-il, Yoon Jeong-hee, Kim Jeong-chol, Lee Nak-hoon

Yoon Gi-jun se ha casado con la hija del presidente de un laboratorio farmacéutico y, gracias a ello, ha accedido a un puesto ejecutivo, pero la vida en la empresa le aburre. Su mujer le sugiere tomarse un descanso y visitar su pueblo natal, Mujin, mientras prepara una junta de accionistas en la que será nombrado director general. Al llegar a Mujin, Yoon Gi-jun rememora su pasado como desertor y enfermo pulmonar. Comienza un romance con Ha In-suk, a quien conoce por azar en la casa del jefe de la oficina de impuestos.

Gwiro / Homebound

Lee Man-hee (Corea del Sur) – 1967

Intérpretes: Kim Jin-kyu, Moon Jung-suk, Kim Jeong-cheol

Choi Dong-woo resulta herido en la guerra de Corea y queda parapléjico. Publica una novela por entregas en el periódico sobre su relación matrimonial. Viéndole abatido por no haber estado a la altura como marido durante catorce años, Ji-yeon, su mujer, le recalca que fue ella quien eligió casarse con él, pero eso no alivia su sensación de inutilidad. Ji-yeon acude con frecuencia a la redacción de un periódico de Seúl para entregar los manuscritos de su marido, y allí recibe las insinuaciones de un joven reportero llamado Kang. Un día, tras perder el tren, Ji-yeon se encuentra con Kang y es sorprendida casualmente por la hermana menor de Dong-woo, que se lo cuenta a su hermano. Éste, sin embargo, no tiene el valor de romper con su mujer y se limita a cambiar el comportamiento de la heroína de su novela, mientras Kang le propone a Ji-yeon emprender una nueva vida con él.

Hyu-il / A Day Off

Lee Man-hee (Corea del Sur) – 1968

Intérpretes: Shin Seong-il, Ji Yun-seong, Kim Sun-cheol, Kim Seong-ok

Ji-yeon y Heo-wook son pareja. Ella está embarazada y los médicos le recomiendan abortar porque está enferma. Para pagar la intervención, Heo-wook roba dinero a un amigo. Mientras ella está en el hospital, él deambula desesperado por las calles de Seúl.

 

 

 

El Festival de San Sebastián y Tabakalera analizan la influencia de las nuevas tecnologías en el sector audiovisual

El miércoles 16 y el jueves 17 de junio se celebrarán las jornadas ‘2deo, Zinemaldia & Technology’, un espacio de encuentro para cineastas, tecnólogos y profesionales de la industria cinematográfica. Los profesionales conocerán los nuevos avances tecnológicos que se están incorporando al cine y distintas herramientas como ‘blockchain’, la inteligencia artificial, la ciberseguridad o el uso de los drones.

2deo, el laboratorio audiovisual de Tabakalera-Centro Internacional de Cultura Contemporánea, propone, en colaboración con el Festival de San Sebastián, una serie de mesas redondas y ponencias que, bajo el título 2deo, Zinemaldia & Technology, invitan a la reflexión en torno a la influencia de las nuevas tecnologías en el cine y cómo éste ha sabido sacarle partido en una constante reinvención de los procesos de creación, producción y exhibición audiovisual.

Durante los días 16 y 17 de junio, la sala Z acogerá unas jornadas dirigidas a tecnólogos, cineastas y profesionales de la industria cinematográfica. Asimismo, el encuentro reunirá a los agentes públicos y privados que están haciendo posible la integración de la tecnología en el sector.

Zinemaldia & Technology es una actividad del Festival de San Sebastián dirigida a los profesionales de la industria cuyo objetivo es estrechar lazos entre los sectores tecnológico y audiovisual. La iniciativa, que incluye una clase magistral y el concurso de proyectos empresariales Zinemaldia Startup Challenge, celebrará su cuarta entrega durante la 69 edición, pero por primera vez, en 2021 no limitará su actividad a septiembre y en colaboración con el laboratorio audiovisual 2deo realizará estas jornadas dentro de la estrategia del Festival como certamen de todo el año (Z365). 2deo, el laboratorio audiovisual de Tabakalera, es un proyecto impulsado por la Diputación de Gipuzkoa, en el marco de Etorkizuna Eraikiz.

Programa

La tarde del 16 de junio las jornadas comenzarán con la conversación entre Maria Penilla Azcuenaga, ingeniera superior de Telecomunicaciones, especialista en ciberseguridad, y directora técnica de la Fundación ZIUR, e Iñaki Regidor Mendiolea, director de sistemas del Grupo de Comunicación de Euskal Irrati Telebista y miembro de la comisión estratégica TIC del Gobierno Vasco, que analizarán La ciberseguridad en el ámbito audiovisual – Cómo nos puede ayudar la tecnología para trabajar y consumir contenidos de forma segura.

Le seguirá la charla Inteligencia Artificial: el ingrediente secreto entre Sami Arpa, científico de computación, director de cine y fundador de Largo, y Xabi Uribe-Etxebarria, fundador de Sherpa y otras empresas de innovación e inteligencia artificial. Ambos plantearán cuestiones como la influencia y beneficios del uso de la inteligencia artificial en varios sectores y en el audiovisual en particular.

El primer día de las jornadas se cerrará con la charla Arte y ciencia detrás del proceso de impresión 3D y animación facial en el estudio ganador del Oscar LAIKA que ofrecerán Brian McLean y Benoit Dubuc, miembros del galardonado estudio de animación LAIKA (Mr. Link, El origen perdido, Kubo y las dos cuerdas mágicas, Los Boxtrolls, El alucinante mundo de Norman, Los mundos de Coraline), que ha revolucionado el proceso de animación stop motion al unir técnicas audiovisuales con las últimas tecnologías para ofrecer películas realmente asombrosas.

El jueves 17 de junio, la segunda jornada comenzará con Irina Albita, cofundadora de la empresa FilmChain (equipo ganador del Zinemaldia Startup Challenge de 2020) y Oscar Lage, responsable de ciberseguridad y blockchain de la empresa TECNALIA, que en la conversación Blockchain: un aliado para conseguir la transparencia analizarán la importancia de la transparencia y la trazabilidad en las transferencias de datos y cómo esta tecnología favorece estos procesos.

Les tomarán el relevo Antton Peña, fundador de la empresa Flock, y Tom Wandsworth, director de Bad Wolf Horizon, que con Drones: cómo la tecnología innovadora está llevando la narración a nuevas alturas nos guiarán a través de las últimas tecnologías de imágenes aéreas y el efecto que están teniendo en la narración cinematográfica. Durante esta sesión, explorarán los tipos de drones disponibles actualmente en el mercado, las diferentes perspectivas que cada tipo puede ofrecer y qué tipos usar cuándo.

En la charla VR in filmmaking: explorando nuevas formas audiovisuales, el director, diseñador, artista visual y multidisciplinar Martin Allais y Mikel Zorrilla, director de Digital Media en el centro tecnológico de Investigación aplicada Vicomtech, tomarán como punto de partida el cortometraje Battlescar: Punk Was Invented By Girls que desde su estreno ha pasado por más de 30 festivales en todo el mundo y ha ganado más de ocho premios como mejor experiencia VR Narrativo.

Bajo el título El futuro del cine, Pedro Escalona, copropietario de la empresa Trigital, especializada en soluciones de flujo de trabajo para la industria de los medios y el entretenimiento, moderará una mesa redonda en la que intervendrán ponentes de gran prestigio: Jordi Bares, postproductor de muchos de los anuncios de televisión más relevantes de los últimos 20 años para marcas como Adidas, Heineken, Sony, Honda y muchas otras; Pepe Abellán, profesional con más de dos décadas de experiencia en la postproducción en España, y Javier Urosas que durante diez años ha trabajado en Tele 5, pasando por todos los procesos de postproducción (edición, montaje y composición) y también ha realizado numerosos trabajos de VFX en series como La casa de papel, Toy Boy, El embarcadero o Sky rojo.

Programa completo:

16 de junio

  • 16:00 Bienvenida
  • 16:15 La ciberseguridad en el ámbito audiovisual – Cómo nos puede ayudar la tecnología para trabajar y consumir contenidos de forma segura. Maria Penilla Azcuenaga e Iñaki Regidor Mendiolea
  • 17:00 Inteligencia Artificial: el ingrediente secreto. Sami Arpa y Xabi Uribe-Etxebarria
  • 17:45 Descanso
  • 18:00 Arte y ciencia detrás del proceso de impresión 3D y animación facial en el estudio ganador del Oscar LAIKA. Brian McLean y Benoit Dubuc

17 de junio

  • 16:00 Blockchain: un aliado para conseguir la transparencia. Irina Albita y Oscar Lage
  • 16:45 Drones: cómo la tecnología innovadora está llevando la narración a nuevas alturas. Antton Peña y Tom Wandsworth
  • 17:30 Descanso
  • 17:45 VR in filmmaking: explorando nuevas formas audiovisuales. Mikel Zorrilla y Martin Allais.
  • 18:30 Future of filmmaking. Pedro Escalona, Pepe Abellán, Jordi Bares y Javier Urosas.

Información práctica:
Las jornadas se podrán seguir de manera presencial en la Sala Z, en la primera planta de Tabakalera, previa inscripción y por streaming en las páginas web de Tabakalera y del Festival de cine de San Sebastián.

 

El Korea Fest BCN proyectará quince películas en su primera edición

La muestra de cine, dividida en tres secciones: Indies de Seúl, Panorama Korea y Sesiones Especiales, tendrá lugar del 7 al 11 de julio en los Boliche Cinemes.

El drama intimista Moving On que pudo verse en el pasado Festival de Cine de San Sebastián, heredero del cine de Hirokazu Koreeda, formará parte de la sección ‘Indies de Seúl’. Por su parte, la cinta Kim Ji-young, Born 1982, adaptación del besteller editado por Alfaguara ‘Kim Ji-young, nacida en 1982’ y galardonada con 8 premios internacionales, inaugurará la sección ‘Panorama Korea’. Como colofón, el thriller será uno de los géneros más representados en las Sesiones Especiales, con la presencia de títulos como Libéranos del mal (Deliver Us From Evil) o Dark Figure of Crime.

Organizado por CineAsia y Boliche Cinemes, con la colaboración del Centro Cultural Coreano de Madrid, el Consulado de Corea en Barcelona y el Seoul Independent Film Festival (SIFF), el Korea Fest BCN, que tendrá lugar entre los días 7 a 11 de julio, ha dividido su programación en tres secciones (excluidas la gala de inauguración y la de clausura): ‘Indies de Seúl’, ‘Panorama Korea’ y ‘Sesiones Especiales’ (thriller y acción). A continuación, desvelamos siete de los títulos que podrán verse.

‘Indies de Seúl’: cine independiente con el sello del SIFF

Gracias a la colaboración con el Festival de Cine Independiente de Seúl, el Korean Fest BCN ofrecerá en su programación cinco títulos, muestra del mejor cine independiente que se está realizando en Corea. Somewhere in Between abrirá la sección el jueves 8 de julio. Un film sobre segundas oportunidades en la que un joven que regresa a su pueblo, tras suspender los exámenes para funcionario en Seúl, descubrirá que a veces las recompensas aparecen donde menos se las espera.

Avalada por numerosos galardones, entre los que destaca el Premio Bright Future a la mejor película en el Festival de Cine de Róterdam, Moving On es una película claramente inspirada en el universo del japonés Hirokazu Koreeda. El espectador asiste al día a día familiar donde aparentemente no sucede nada, pero bajo esa superficie unos niños descubrirán el significado de las relaciones familiares durante un verano… con sus luces y sus sombras.

‘Panorama Korea’: la autoría y el género se dan la mano en esta sección de la muestra

La novela que sacudió a la sociedad coreana por su denuncia sobre la situación de la mujer, editada en nuestro país por la editorial Alfaguara, Kim Ji-young, nacida en 1982 ha sido adaptada en Corea a la gran pantalla manteniendo su espíritu crítico, reuniendo a dos de los protagonistas de Train to Busan. Una película que, debido a su temática, contará con un cinefórum posterior a su proyección (una de las actividades paralelas que se desarrollarán a lo largo de los cinco días de duración de la muestra).

Con la presencia de la extraordinaria actriz coreana Moon So-ri (Oasis), Juror 8 narra la historia del primer jurado popular de Corea del Sur en clave de comedia, y que toma como referencia a Doce hombres sin piedad de Sidney Lumet añadiendo el infalible toque coreano. Una película basada en un hecho real, algo común en numerosas producciones coreanas.

Las Sesiones Especiales no van a dar tregua al espectador.

El thriller es uno de los géneros por excelencia del cine coreano. Cada año la industria cinematográfica da luz verde a diferentes proyectos que triunfan en la taquilla y se exportan a otros países. ¿Qué harías para atrapar a un asesino en serie que conoce la ley y sus ventajas? Un veterano detective pondrá en juego su vida para acusar a un joven detenido y evitar que salga de la cárcel en una lucha contra reloj. Esta es la premisa que presenta Dark Figure of Crime, con un duelo actoral entre Kim Yoon-seok (The Chaser) y el Ju Ji-hoon (The Spy Gone North).

Uno de los thrillers más brutales producidos en Corea en el año 2020, distribuido para el estado español por YouPlanet, es Libéranos del mal (Deliver Us From Evil). Dirigida por Hong Won-chan (Office) y protagonizada por dos de las estrellas del star-system de la industria coreana, Hwang Jung-Min (Por encima de la ley) y Lee Jung-Jae (Asesinos), la película propone un juego del gato y el ratón que alcanza cotas inimaginables. Un asesino a sueldo que quiere retirarse. Un mafioso, apodado ‘el carnicero’ que quiere vengar a su hermano. Y una niña secuestrada en Tailandia. Un thriller para disfrutar en pantalla grande.

Y otro género que no puede faltar en la industria coreana es el de la acción, el de las luchas de sus épicos y particulares wuxias. El guardián del acero (The Swordsman), que distribuye en España la compañía Cinemaran, es una película para disfrutar y trasladarse a otro tiempo. Durante la época Chosun un soldado se convertirá en la espada del Rey. Con el tiempo, éste tendrá que volver para hacer frente al poder de las fuerzas chinas. La espectacularidad de las coreografías en un wuxia de redención al que acompañará su elemento dramático.

Como se adelantó en la primera nota de prensa el Korea Fest BCN, ofrecerá precios populares y abonos para diferentes sesiones. Las entradas se pondrán a la venta de manera online próximamente en la web del Boliche Cinemes, además de poder adquirirlas en la taquilla del cine. Una fecha que se anunciará en la próxima nota de prensa.

El Korea Film BCN cumplirá con las medidas sanitarias y de seguridad, así como con el aforo que marquen las autoridades sanitarias en el momento de celebración de la muestra.

 

El cartel de la Semana de Terror 2021 homenajea a La cabina de Antonio Mercero

El actor Carlos Areces protagoniza este año el cartel oficial de la 32ª Semana de Cine Fantástico y de Terror de San Sebastián, que tendrá lugar entre el 29 de octubre y el 5 de noviembre. El póster homenajea el legendario mediometraje La cabina, escrito por José Luis Garci y dirigido por el cineasta de Lasarte Antonio Mercero en 1972.

Carlos Areces se pone en la piel de José Luis López Vázquez, protagonista de la película, cuya imagen atrapado en la cabina es sin duda una de las más icónicas y recordadas de la historia del fantástico español.

La cabina, producido por TVE, se emitió por primera vez el 13 de diciembre de 1972, causando gran impacto en el público de la época. Se convirtió en un gran éxito internacional, siendo proyectado en las televisiones de todo el mundo y obteniendo innumerables premios.

La fotografía ha sido realizada por Alberto Morago, que también se ha encargado del making of.

El diseño del cartel ha sido obra, como los últimos años, del estudio Ytantos.

CARLOS ARECES

Actor, músico y dibujante, Carlos Areces se ha convertido en los últimos años en uno de los intérpretes de referencia del cine y la televisión españolas, así como en uno de los más versátiles. Tras su paso por el programa de culto de TVE «La hora chanante» (2002-2006), comienza su carrera en el cine con películas como Spanish Movie (Javier Ruiz Caldera, 2009) o Balada triste de trompeta (Álex de la Iglesia, 2010).

En la última década ha trabajado con algunos de los directores del cine español más destacados en películas como El gran Vázquez (Óscar Aibar, 2010), Lobos de Arga (Juan Martínez Moreno, 2012), Los amantes pasajeros (Pedro Almodóvar, 2013), Torrente 5: Operación Eurovegas (Santiago Segura, 2014), Mi gran noche (Álex de la Iglesia, 2015), Negociador (Borja Cobeaga, 2015), La reina de España (Fernando Trueba, 2016), Tiempo después (José Luis Cuerda, 2018), El inconveniente (Bernabé Rico, 2020) u Orígenes secretos (David Galán, 2020).

También ha proseguido su trabajo en la pequeña pantalla en diversas series: «Muchachada Nui» (2007-2010), «Museo Coconut» (2010-2014), «Plutón BRB Nero» (2008-2009) o «El pueblo» (2019-), entre otras.

Ha publicado sus dibujos e historias en publicaciones como El Jueves y sigue con su carrera musical junto a Aníbal Gómez en el dúo Ojete Calor.

 

TerrorMolins celebra sus 40 ediciones revisitando en contexto social que le dió origen

40 ediciones y 48 años. El Festival de Cine de Terror de Molins de Rei gusta de lo inusual y en esto de cumplir ediciones y años no iba a ser menos. Una suerte de disonancia cognitiva, debida a un largo parón en la década de los noventa, que convierte lo que por actualidad bien podría ser la crisis de los cuarenta en una celebración de casi medio siglo de existencia. Por eso mira a sus inicios, a ese 1973 que dio pie a la maratón de cine de terror más antigua del estado, embrión del festival que hoy disfrutamos. Una iniciativa cultural rompedora en esos tiempos, en los que la efervescencia social se abría camino por las grietas de un régimen y una casta a la que le quedaban cuatro telediarios… O eso nos contaron entonces.
La contracultura. En general, todo movimiento sociológico organizado y visible dentro de una sociedad, cuyas acciones y valores contrastan con los de la norma establecida. O lo que es lo mismo: una ofensiva contra la cultura oficial; una «cultura en contra» que nace al margen, en el underground. Un término que define también un momento histórico, comprendido en el estado español más o menos entre 1968 y 1978, aunque sus ramificaciones llegasen hasta los primeros ochenta. Una época y unos movimientos, también una actitud podría decirse, que encontraron y encontrarán siempre en el cine de terror un género en donde poder ir un paso más allá, con el que romper las barreras de lo que se puede mostrar y explicar.
Terrormolins rendirá este año un homenaje a esa época de exploración y búsqueda de nuevos aires. De romper con lo impuesto, transgrediendo lo oficial para crear en los márgenes. De generar espacios de encuentro desde una óptica asociativa y comunitaria. A esa sociedad que empujaba hacia la modernidad. A ese renovado cine de terror que plasmaba como nunca antes injusticias y deficiencias, también miedos y ansiedades, de un mundo que gritaba y sigue gritando. Pasado y presente se dan cita, en pié y con la cámara en alto.

El foco Zinemaldia + Plus programa las películas «Le redoutable» y «Les sorcières de l’Orient»

Los títulos elegidos por Vincent Maraval y Vanja Kaludjercic se proyectarán respectivamente el 14 de mayo y el 11 de junio en la pantalla compartida de Tabakalera.

El Festival de San Sebastián ofrecerá dos nuevas proyecciones dentro del foco Zinemaldia + Plus, Le redoutable (Mal genio, 2017), de Michel Hazanavicius, y Les sorcières de l’Orient (2021), de Julien Faraut. Estos títulos han sido respectivamente elegidos por el productor y distribuidor de la compañía Wild Bunch, Vincent Maraval, y por la directora artística del Festival de Rotterdam, Vanja Kaludjercic. Ambos han tenido carta blanca para programar estas películas en la pantalla compartida de Tabakalera dentro de Zinemaldia + Plus.

Este foco mensual que anteriormente ha estado centrado en programas como Ikusmira Berriak, Nest o en el trabajo previo de cineastas que han pasado por San Sebastián (Primeros Pasos) ha invitado en mayo y junio a dos personalidades destacadas de la industria del cine, a quienes se ha dado libertad para programar sendas películas.

El viernes 14 de mayo Vincent Maraval acudirá a Donostia para presentar Le redoutable, un largometraje de Michel Hazanavicius (The Artist, 2011, Perlak) en el que Louis Garrel encarna al cineasta Jean-Luc Godard y Stacy Martin, a su mujer Anne Wiazemsky. El filme, que concursó en el Festival de Cannes en 2017 y también cuenta con Bérénice Bejo en el reparto, narra la crisis que Godard vivió tras estrenar su película La chinoise a finales de los años 60.

Por su parte, Vanja Kaludjercic intervendrá de manera telemática en la sesión del 11 de junio para introducir Les sorcières de l’Orient, un filme de Julien Faraut que en febrero compitió en el Festival de Rotterdam. La directora artística del certamen ha elegido este documental sobre el equipo japonés de voleibol femenino que ganó el Oro en los Juegos Olímpicos de 1964. El filme cuenta con los testimonios de las exdeportistas, hoy septuagenarias, y mezcla imágenes de archivo con fragmentos de anime.

Zinemaldia 365 (Z365)

Desde 2020, el Festival de San Sebastián realiza una firme apuesta por ir más allá de los nueve días del certamen de septiembre y configurarse como festival de todo el año. Bajo la denominación Zinemaldia 365 (Z365), este concepto incluye, entre otras actividades, el programa de residencias Ikusmira Berriak, la participación en Elías Querejeta Zine Eskola (EQZE), el proyecto Zinemaldia 70: todas las historias posibles y la programación en la pantalla compartida de Tabakalera.

En ese sentido, el Festival se ha unido a otras instituciones de la ciudad que también programan en el cine de Tabakalera y, una vez al mes, protagoniza el foco Zinemaldia + Plus. Este espacio permite seleccionar títulos que tienen difícil encaje en el diseño del festival de septiembre, al tiempo que ofrece la posibilidad de detenerse en formatos, temáticas y propuestas diferentes.

Así, las sesiones de Zinemaldia + Plus ofrecen una perspectiva general de la idea de festival de todo el año. Desde su inicio en octubre, el foco ha mostrado un largometraje enmarcado en el programa público del proyecto de archivo Zinemaldia 70 y los primeros cortometrajes de directoras que después han concursado e incluso ganado en distintas secciones del Festival. También se han exhibido los cortos de participantes de Nest y los de los actuales residentes de Ikusmira Berriak.

Los largometrajes elegidos por Maraval y Kaludjercic son reflejo de las colaboraciones que el Festival de San Sebastián mantiene con organizaciones de la industria y con otros festivales de cine.

PROGRAMA – Viernes 14 de mayo a las 19:00 h. – Cine (Tabakalera)

Le Redoutable / Redoubtable (Mal genio (Le Redoutable)

Michel Hazanavicius (Francia)

París 1967. Durante el rodaje de su nueva película, el director francés Jean-Luc Godard se enamora de la actriz Anne Wiazemsky, 20 años más joven que él. Un año después, tras casarse con Anne y haber encontrado aparentemente la estabilidad, Godard se ve sumido en una crisis existencial debido a la negativa acogida de la película y a los conflictos sociales que se están desarrollando en París.

PROGRAMA – Viernes 11 de junio a las 19:00 h. – Cine (Tabakalera)

Les sorcières de l’Orient / The Witches of the Orient

Julien Faraut (Francia)

Viaje para conocer a las antiguas jugadoras de la selección femenina de voleibol de Japón. Actualmente septuagenarias, en su día eran conocidas como las Brujas de Oriente por sus aparentes poderes sobrenaturales sobre la cancha. Desde la fundación del equipo por parte de un grupo de trabajadoras de una fábrica textil a finales de los años 50, hasta su triunfo en los Juegos Olímpicos de 1964 en Tokio, sus recuerdos y la verdadera magia de antaño burbujean en un cóctel apasionante en el que la realidad y la fábula vuelan de la mano.

 

Nueva edición de Pantalla Sitges

El Sitges-Festival Internacional de Cinema Fantàstic de Catalunya y el FIC-CAT han renovado su acuerdo de colaboración, hecho que permite al festival rodense dar visibilidad al cine fantástico realizado en nuestro país.

El espacio Pantalla Sitges estará presente en el FIC-CAT, por sexto año consecutivo, apadrinado por el Festival de Sitges. La película elegida para la edición de este año es La vampira de Barcelona, de Lluís Danés, ganadora del Grand Premio del Público en la última edición del Festival de Sitges, y que se podrá ver en el Pabellón polideportivo de Roda de Berà el sábado 12 de junio a las ocho de la tarde.

Como cada año, la entrada será gratuita y, Àngel Sala, director del Festival de Sitges, estará presente en Roda de Berà para presentar la sección y seguir de cerca el desarrollo del FIC-CAT. Sala es conocedor del Festival, puesto que ha formado parte del Jurado y ha estado presente en varias ediciones.

La vampira de Barcelona, que se proyectará fuera de competición, es una coproducción de Brutal Media, Filmax y TV3, y está interpretada por Nora Navas, Roger Casamajor, Bruna Cusí, Nuria Primo, Sergi López, Francesc Orella, Mario Gas, Francesca Piñón o Pablo Derqui, entre otros.

Inspirada en la historia de Enriqueta Martí, conocida como “la vampira del Raval”, la película fue la gran triunfadora de los últimos Premios Gaudí, en qué consiguió cinco galardones: Mejor Película, Mejor Dirección Artística, Maquillaje y Peluquería, Vestuario y Efectos Visuales.

Johnny Depp e Isabelle Huppert entre las destacadas figuras que visitarán el BCN Film Fest

Johnny Depp, Isabelle Huppert, Fernando Trueba, Javier Cámara, Fernando Colomo, Clara Lago, Toni Acosta, Karra Elejalde, Kiyoshi Kurosawa, Nicolas Winding Refn, Carmen Chaplin, Marta Buchaca, Quim Ávila o David Selvas participarán en la 5ª edición del festival.

El Festival Internacional de Cine de Barcelona-Sant Jordi (BCN FILM FEST), contará con destacadas visitas presenciales, tanto de talento nacional como internacional, entre los que destacan las de Johnny Depp y Andrew Levitas (“El fotógrafo de Minamata”); Isabelle Huppert y Jean-Paul Salomé (“Mamá María”), Fernando Trueba y Javier Cámara (“El olvido que seremos”); Carmen Chaplin (“El Chico”- Coloquio Chaplin); Steven Bernstein (“Last Call”); Mariana Barassi y Clara Lago (“Crónica de una tormenta”), o el equipo de “Poliamor para principiantes”, formado por Fernando Colomo, Karra Elejalde, Toni Acosta y Quim Àvila.

Los directores Kiyoshi Kurosawa (“La mujer del espía”), Massoud Bakhshi (“Yalda, la noche del perdón”) y Philippe FalardeauSueños de una escritora en Nueva York«), participarán de forma telemática, así como Nicolas Winding Refn (“Valhalla Rising”), que finalmente no podrá viajar a Barcelona por motivos de la pandemia pero mantendrá las actividades previstas de forma virtual.

 

Una joven prometedora’ inaugurará el BCN Film Fest 2021

La coproducción catalana “Solo una vez” se incorpora a la Sección Oficial, adaptación de Marta Buchaca de su obra teatral, con Ariadna Gil, Álex García y Silvia Alonso.

Una de las sorpresas de la temporada, “Una joven prometedora” (Promising Young Woman), dirigida por Emerald Fennell (ópera prima) y con 5 nominaciones a los Oscar incluyendo Mejor Película, será la encargada de inaugurar el BCN FILM FEST 2021, que celebrará su quinta edición del 15 al 23 de abril. La película se estrenará en cines, tras su paso por el Festival, el próximo 16 de abril. Protagonizada por Carey Mulligan (“An Education”, “Drive”, “Shame”), el film ofrece una nueva y deliciosa visión de la venganza. Mulligan interpreta a una joven con una astucia sin límites que vive una doble vida nocturna. Un encuentro le dará la oportunidad de corregir el suceso que descarriló su futuro.

«Entre rosas” (Le fine fleur), de Pierre Pinaud, una historia sobre una cultivadora de rosas al borde de la quiebra, clausurará el certamen precisamente el dia de la rosa, Sant Jordi. Catherine Frot (Mejor Actriz en los Premios César del 2016 por “Madame Marguerite”) interpreta a Eve, una mujer que había creado les rosas más famosas del mundo pero ahora está amargada y al borde de la quiebra. Su asistente tiene una idea brillante y loca que podría cambiar sus vidas para siempre.

 

Isona Passola recibirá el Premio de Honor del BCN Film Fest 2021

Isona Passola, productora, directora y Presidenta de la Acadèmia del Cinema Català, recibirá el Premio de Honor del BCN FILM FEST el próximo 15 de abril durante la ceremonia de inauguración del certamen.

Isona Passola, productora, directora y Presidenta de la Acadèmia del Cinema Català, recibirá el Premio de Honor del BCN FILM FEST el próximo 15 de abril durante la ceremonia de inauguración del certamen.  Passola recibirá el galardón en reconocimiento al trabajo al frente de la Acadèmia los últimos ocho años, y como productora de películas como “Pa Negre” o “Incerta Glòria”.

Nacida en Barcelona en 1953, Passola es la fundadora de Massa d’Or Produccions, con la que ha producido films como “Pa Negre” (9 premios Goya, 13 premios Gaudí), “Incerta Glòria” (8 premios Gaudí), “De nens”, “El pianista” o “El Mar”, y documentales que también ha dirigido como “Cataluña-Espanya” o “L’endemà”.

Passola también es la primera mujer presidenta del Ateneu Barcelonès,  forma parte del Consell Nacional de la Cultura i les Arts (CoNCA), y es profesora en la Facultad de Comunicación Blanquerna de la Universidad Ramon Llull.

 

 

Elías Querejeta, Filmoteca Vasca y el Festival de San Sebastián publican ZINE: cuadernos de investigación cinematográfica

Esta publicación online de carácter bianual explorará las conexiones de la cultura cinematográfica con otras disciplinas científicas y humanísticas, con una atención particular por el cine vasco.
En el primer número se analiza la obra cinematográfica de Nestor Basterretxea desde el punto de vista del constructivismo y se presenta la obra de María Jesús ‘Tatus’ Fombellida.

ZINE: cuadernos de investigación cinematográfica es una publicación académica editada por Elías Querejeta Zine Eskola, Filmoteca Vasca y el Festival de San Sebastián. El propósito de ZINE es publicar investigaciones originales que contribuyan al conocimiento especializado en el campo de los estudios cinematográficos desde una perspectiva interdisciplinar.

Aunque da cabida a todo tipo de contribuciones relevantes para el campo, ZINE se fija como objetivo principal el apoyo y edición de trabajos que propongan nuevas miradas sobre la cultura y el patrimonio cinematográfico y audiovisual vasco, ya sea mediante el análisis y puesta en valor de casos de estudio que han quedado fuera de los relatos canónicos, la revisión crítica de figuras consolidadas o la puesta en práctica de metodologías innovadoras que hayan tenido menor desarrollo en la tradición académica local. En suma, ZINE se plantea como un espacio que propone ampliar no sólo las fronteras de los estudios sobre cine vasco sino, también, de los estudios cinematográficos desde el País Vasco.

La distribución de ZINE será íntegramente online. La publicación, de carácter bianual, estará alojada y disponible para descarga libre en español, euskera e inglés o francés en las páginas web de las tres instituciones involucradas en el proyecto.

En opinión de Harkaitz Millán, diputado de cultura de la Diputación Foral de Gipuzkoa, «la creación de una línea de publicaciones destinada a promover la investigación es consecuente con los objetivos del centro y con su actividad investigadora». El diputado también destaca la importancia de poner el foco en el análisis y estudio del cine vasco, y la divulgación del trabajo realizado por investigadoras e investigadores locales. Para Filmoteca Vasca participar en el desarrollo de esta publicación es natural dada la vocación investigadora y de preservación del patrimonio audiovisual vasco, dos líneas de trabajo y objetivos que se complementan con el carácter divulgativo de una parte importante de las actividades que lleva a cabo el centro. Por su parte, la participación del Festival en la publicación forma parte de su configuración como festival de todo el año, como certamen que se piensa a sí mismo y que quiere fomentar el estudio y la investigación sobre cuestiones relacionadas con el cine.

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Un primer número dedicado al cine vasco

Cada número de ZINE constará de dos secciones principales: por un lado, un estudio monográfico a cargo de especialistas sujeto a revisión externa por pares; por otro, ZINE acogerá también materiales vinculados a proyectos y acciones de investigación impulsados por el Departamento de Investigación de Elías Querejeta Zine Eskola en una sección que explora formatos híbridos entre la investigación académica y la creación. Por ello, ZINE se plantea, también, como un punto de encuentro entre la comunidad académica internacional y las iniciativas de investigación desarrolladas en la escuela.

En este primer número de la colección, Elixabete Ansa, profesora Asociada y Directora de Asuntos Académicos del Instituto de Estética de la Pontificia Universidad Católica de Chile, propone un estudio de la relación entre el cine y la fábrica, a través de una propuesta de lectura del cine vasco desde una perspectiva “constructiva”. El punto de partida del artículo de Ansa lo marca la película Operación H (1963) de Néstor Basterretxea y la necesidad de problematizar las formas en que se ha pensado la comunidad en el cine vasco.

Por otra parte, y como resultado del proyecto de investigación de EQZE Artesanos del cine: investigación sobre el cine amateur vasco, ZINE acoge un dossier dedicado a la serie documental Gure Herria filmada por la cineasta amateur María Jesús ‘Tatus’ Fombellida entre 1975 y 1985. Este apartado cuenta con las firmas de Enrique Fibla, investigador del CCCB y EQZE; Benoît Turquety, profesor de la Universidad de Laussanne experto en cine amateur, y de la artista Sahatsa Jauregi, que reflexionan desde sus respectivas disciplinas sobre el lugar que ocupan estas películas en el mapa de las prácticas culturales. Este dossier se acompaña de la publicación en la web de EQZE de nuevas versiones digitales de nueve películas de la serie Gure Herria de Fombellida.


Call for papers

ZINE es un proyecto abierto a las contribuciones de investigadoras e investigadores. Las propuestas de contribución de ZINE serán preseleccionadas por el Comité Editorial y también estarán sujetas a revisión externa por pares. Pueden hacerse llegar propuestas a la dirección zine@zine-eskola.eus. Cada propuesta debe constar de un resumen de entre 250 y 500 palabras y de un CV completo del/la autor/a. Las instrucciones para los autores y autoras están disponibles en la web de EQZE.

 

Avance de programación del D’A 2021

En un año que ha sido muy complicado para la cultura y que en el mundo del cine ha afectado desde las salas de cine a los circuitos de distribución, pasando por los grandes festivales y la propia producción cinematográfica, el cine independiente no ha perdido su oportunidad de brillar mostrando una gran variedad de registros, temáticas, voces e inquietudes que se mostrara en la selección que presentará el D’A 2021. Así en esta edición del D’A Film Festival Barcelona se podrán ver películas de grandes maestros del cine volviendo a sus esencias como El teléfono del viento, el retorno de Nobuhiro Suwa a Japón para retratar la frágil recuperación emocional diez años después del tsunami, Siberia de Abel Ferrara, sexta película del neoyorquino protagonizada por Williem Dafoe, prácticamente convertido en alter ego del director en su eterna pulsión entre sexo y muerto, o Rizi / Days del gran director asiático Tsai Ming-liang en una maravilla que ganó el premio Teddy a la última Berlinale.

En el D’A 2021 también se verán obras de directoras como Josephine Becker (Madeline’s Madeline), que con una corta filmografía se ha convertido en uno de los nombres más prometedores del cine actual y de quien presentamos Shirley, protagonizada por Elizabeth Moss y que ganó el premio Especial del Jurado a Sundance, o la sensación del cine español independiente Karen de María Pérez Sanz con Christina Rosenvinge en el papel de la escritora Karen Blixen. También se  podrán ver dos películas de gran impacto como Berlin Alexanderplatz de Burhan Qurbani, director alemán de origen afgano, que se enfrenta al clásico de Alfred Döblin, ya adaptado por R.M. Fassbinder, actualizándolo al Berlín actual, y Las cosas que decimos, las cosas que hacemos de Emmanuel Mouret, la ganadora moral de los César 2021 (solo ganó un César de los 13 a los que aspiraba) y que es una de las películas más emocionantes del año.

Berlin Alexanderplatz

Completa este primer adelanto de una programación que llegará a los 90 títulos, dos debuts fulgurantes con el estreno catalán de La vida era eso de David Martín de los Santos, protagonizada por Anna Castillo y Petra Martínez, galardonada con el premio a la mejor actriz en el Festival de Sevilla 2020, y el estreno de la película catalana Mía y Moi de Borja de la Vega, protagonizada por Bruna Cusí y Eneko Sagardoy, ganadores del Goya a los mejores intérpretes revelación por Verano 1993 y Handia, respectivamente.

«Adiós, idiotas» inaugurará el D’A 2021

La película inaugural del D’A Film Festival Barcelona será Adiós, idiotas de Albert Dupontel, protagonizada por él mismo y Virginie Efira. La película ha sido un fenómeno en su paso por los cines franceses y arrasó en los premios César de este año donde ganó un total de siete galardones, incluyendo los de mejor película, director y guion. La séptima película como director de Albert Dupontel es una tragicomedia delirante, cargada de humor negro y ritmo frenético.

https://youtu.be/s7BXyq50Ib0

 

Exposición «otras miradas» sobre los primeros años del Festival de San Sebastián

La exposición en Kutxa Kultur Plaza consta de treinta fotografías del periodo entre 1953 y 1970.
La muestra está comisariada por el equipo de Zinemaldia 70: todas las historias posibles, proyecto de investigación patrocinado por la Sociedad Estatal de Loterías y Apuestas del Estado.

La exposición Primeros pasos. Otras miradas sobre la historia visual del Festival de San Sebastián (1953-1970) se ha inaugurado hoy en la sala Kutxa Kultur Plaza, en el cuarto piso de Tabakalera. La muestra, organizada por el Festival de San Sebastián, Kutxa Fundazioa y Elías Querejeta Zine Eskola (EQZE), contiene treinta imágenes de más de cincuenta años de antigüedad, procedentes del fondo fotográfico del archivo del Festival y de la colección Kutxateka.

La muestra está comisariada por el equipo del proyecto de investigación Zinemaldia 70: todas las historias posibles (Z70), bajo la dirección de Pablo La Parra Pérez. El proyecto Z70 comenzó en 2020 a abordar el patrimonio fotográfico del festival en dos líneas de trabajo: la conservación, catalogación e investigación del fondo fotográfico del archivo del Festival y el estudio y perfeccionamiento de la catalogación de los fondos de la colección Kutxateka. Esta exposición es el primer resultado público de esta tarea, que sigue su curso.

Las primeras directoras que compitieron en la Sección Oficial

La idea de “primeros pasos” contiene un doble sentido: hace referencia a los primeros años del Festival pero, también, se trata de la primera incursión crítica en su patrimonio fotográfico en el marco del proyecto Z70. La exposición abre dos vías de reflexión que exploran tensiones políticas, de género y clase en las ediciones iniciales del Festival.

Así, por un lado, esta exposición presta atención, más allá de la representación tradicional de las estrellas, a las mujeres que participaron en el Festival ocupando posiciones profesionales alejadas del foco mediático o ignoradas por las historias dominantes del cine, como directoras, guionistas o las propias trabajadoras. Por ejemplo, la exposición rescata fotografías de las tres primeras directoras que compitieron en la Sección Oficial: Yuliya Solntseva (1965), Tatiana Lióznova (1966) y Judit Elek (1969). La muestra examina también los mecanismos de construcción y cosificación de la star cinematográfica como objeto de consumo y fascinación mediática. Como ejemplo paradigmático, en la exposición se analiza la construcción mediática de Pepa Flores como Marisol, desde su primera aparición en Donostia en 1960, con tan solo 12 años, hasta sus apariciones en los años posteriores como estrella popular.

Por otro, Primeros pasos. Otras miradas sobre la historia visual del Festival de San Sebastián (1953-1970) pone el foco en la tensión entre la expectación popular que suscitaba el Festival entre la ciudadanía y la exclusividad y elitismo de la mayoría de sus actos oficiales, a través de fotografías que exponen el fuera de campo de la alfombra roja. Asimismo, enseña los aspectos más institucionales del Festival y su instrumentalización por parte de la dictadura franquista como escaparate internacional del régimen. Es el caso de las imágenes que recogen la asistencia al festival de personalidades del régimen como Carmen Polo, presencia de autoridades civiles y militares en actos oficiales, aunque también de los resquicios de libertad que se abrieron en el marco del Festival, como el célebre pase de Ama Lur en los cines Astoria en 1968.

Z70 es fruto del trabajo conjunto del Festival de San Sebastián con el departamento de investigación de EQZE. Este proyecto de investigación patrocinado por Loterías y Apuestas del Estado, con la colaboración  Kutxa Fundazioa, Filmoteca Vasca y el centro internacional de cultural contemporánea de Tabakalera, pone de relieve la importancia de los fondos documentales del Festival (cartas, fotografías, críticas y reseñas en periódicos y revistas, libros…) conservados en su archivo desde 1953. El principal objetivo del proyecto es generar reflexión y discusión en torno al pasado, el presente y el futuro del Festival, así como diálogos críticos con la creación cinematográfica y el pensamiento contemporáneo.

La exposición se enmarca en el propósito del Festival para configurase como una actividad de todo el año. En este sentido, vinculada a la muestra, el día 20 de marzo se proyectará dentro del ciclo Zinemaldia + la película de Judit Elek que compitió en el Festival: Sziget a szárazföldön (The Lady from Constantinople, 1969).  El filme será presentado por el responsable del proyecto de investigación, Pablo La Parra Pérez y la alumna de EQZE Anna Babos.

La exposición, que se inaugura hoy, 24 de febrero, permanecerá abierta hasta el 25 de abril.  El horario es de 9:00 a 21:00 de lunes a viernes, de 10:00 a 22:00 los sábados y de 10:00 a 21:00 los domingos.

 

Abierto el plazo de inscripción para Sitges 2021

El Sitges – Festival Internacional de Cinema Fantàstic de Catalunya, que celebrará su 54ª edición del 7 al 17 de octubre inicia la cuenta atrás. 
 
El lunes 15 de febrero, se abrió el periodo de inscripciones de largometrajes y cortometrajes. Los directores/as, productoras y distribuidoras que lo quieran podrán presentar sus films hasta el 15 de julio, fecha de cierre para todas las categorías. 
 
El comité de programación del Festival está trabajando con normalidad y responsabilidad, adaptándose en las medidas establecidas por la crisis de la covid-19. El comité está avanzando en los visionados y selección de los primeros títulos que configurarán la próxima edición del Festival. 
 
Las empresas titulares de las películas seleccionadas por el comité de programación recibirán un formulario (entry form) a través del cual formalizarán su participación en el certamen.
El Festival contactará únicamente con los titulares de los films seleccionados por el comité. La plataforma Festhome es el único sistema oficial para inscribir la pieza. La organización no acepta otros formatos ni jefe otro sistema que no sea este. 
 
Las bases de participación y el reglamento de Sitges 2021 están disponibles aquí.

Americana 2021: una programación de lujo a pesar de la pandemia

Tras celebrar la edición de Americana del 2020, casi de forma milagrosa, justo cinco días antes de que se nos confinara, este 2021 la logística nos permitirá disfrutar del festival en formato híbrido, presencialmente, con las salas al 50% y cumpliendo todas las normas de seguridad, demostrando una vez más que la cultura es segura y de forma virtual, a través de la plataforma Filmin. Además, también haremos extensible nuestra propuesta a Madrid, donde debutaremos este año. Y como ya es habitual la Route 66 llevará nuestras películas por varias localidades de Cataluña y España.

El festival se inaugurará en el Cine Phenomena el martes 2 de marzo y continuará en las tres salas de los Cines Girona y en el Zumzeig del 3 al 7 de marzo. La inauguración, como siempre, será con invitación. En Madrid estaremos en el Círculo de Bellas Artes del 12 al 14 de marzo y entre los días 2 y el 14, las películas irán desfilando por Filmin.

Los precios de las entradas físicas son de 7 euros, con abonos compartibles de 6 entradas por 35 euros. Las sesiones de cortos tendrán un coste de 4 euros. Y en Filmin habrá dos tipos de títulos, 23 largos y más de 20 cortos en suscripción y 13 en Premium. En Madrid las estradas tendrán un precio de 6 euros. La mayoría de los títulos Premium irán entrando y saliendo, así que atentos a la parrilla que publicaremos mañana en nuestro web. Habrá un abono de Filmin que incluye 3 tickets Premium y un mes de subscripción por 14,95€.

Pese el contexto actual, nos sentimos nuevamente muy orgullosos de la programación de Americana, que este año consta de 47 largos y 29 cortos, que os pasamos a detallar.

En la sección estrella del festival, la sección TOPS, podremos disfrutar del verano de El verano de Cody (Driveways), que será el título inaugural. Después de la muerte de su hermana, Kathy y su hijo de 8 años van al pequeño pueblo donde esta vivía para hacerse cargo de sus pertenencias. Allá conocerán a su viejo vecino Del. La historia es sencilla, pequeña, pero su delicadeza, su guion preciso y su música melancólica consiguen conmover. Una propuesta vitalista nominada a dos premios en los Independent  Spirit Awards. En Sweet Thing, recuperamos los personajes de Little Feet que pasaron por el festival. Los que la visteis recordaréis a los hijos pequeños de Alexandre Rockwell jugando despreocupados. Ahora con 15 y 11 años, se enfrentan en un mundo más hostil y peligroso: el de la madurez. En esta estética road-movie ganadora en Berlin, delicada y sórdida, volvemos a encontrarnos con una preciosista blanco y negro, una selección musical exquisita y unos paisajes desérticos y desolados. Wilcox es el último film de Denis Côté, ganador del premio de la Crítica en la anterior edición. De Wilcox, el protagonista, solo sabemos que viste de militar y que rehúye las multitudes y las zonas pobladas. Con una apuesta sonora inusual, este largo de poco más de una hora nos sumergirá en unas atmósferas que beben de Lynch, con que Côté crea una película única, enigmática, alienante y abstracta que deambula entre el misterio y la incertidumbre para llevarnos a territorios desconocidos y fascinantes. Y para los fans de las películas enigmáticas y seguidores de los sospechosos y sospechosas habituales del Americana, os recomendamos Black Bear. Dirigida por Lawrence Michael Levine y protagonizada por Aubrey Plaza y Christopher Abbott, es un ejercicio fascinante de metacinema donde partiendo de un triángulo amoroso se sumerge en terrenos tan pantanosos como son la crisis creativa, el arcaísmo de los roles de género tradicionales, la fragilidad del ego del artista y los límites morales del arte. Se pudo ver en Sundance y en Sitges. Y siguiendo con Sundance y relaciones de pareja, la comedia del año, que ya anunciamos por Navidad.

Descarada, imaginativa, políticamente incorrecta y con elementos fantásticos, Palm Springs es una fresca y muy divertida comedia romántica, con un reparto solvente con secundarios de lujo como J.K. Simmons o Peter Gallagher. Aclamada en Sundance 2020 y con dos nominaciones a los Indepent Spirit Awards, a mejor película y mejor actor. The Killing of Two Lovers, también nominada a los Independiente Spirit Awards, en este caso a John Cassavetes Award, es un viaje inquietante y tumultuoso hacia la psique de su protagonista. Este retrato frío y rural de la América más profunda representa la muerte, lenta y dolorosa, de la llama del amor. Un thriller psicológico sugestivo que ha sido alabado unánimemente por la crítica americana. Y de un director que apunta muy alto, a uno de muy reconocido y pilar del indie, Tim Sutton, un outsider que con títulos como Pavilion o Dark Night ha demostrado un estilo único, con una estética inmaculada, unos personajes frágiles al margen del sistema y un montaje milimetrado, frío y quirúrgico, que lo ha llevado a casi todos los grandes festivales: Sundance, SXSW, Venecia, Toronto o Berlín, donde estrenó su último trabajo, Funny Face. La historia de dos almas perdidas que encuentran una en la otra, el apoyo incondicional que necesitan para llevar a cabo lo único que tienen clara: la venganza. En TOPS también podremos ver Freshman Year (Shithouse), donde un universitario tímido y apocado decide ir a una fiesta loca. Allá conoce a Maggie, una chica misteriosa que, en solo una noche, pondrá su mundo cuadriculado cabeza abajo. El debutante Cooper Raiff escribe, dirige, produce, edita y protagoniza la ganadora de SXSW y condensa en hora y media la vida universitaria americana con referencias al Linklater más romántico y reflexivo. Y seguimos con estudiantes en busca del amor con Shiva Baby, una comedia enérgica y neurótica protagonizada por una debutante sorprendente, Rachel Sennott. Nos lleva de pleno a la situación infernal de encontrarse con tu exitosa ex novia, tu sugar daddy con su mujer e hija y tu numerosa familia en un mismo lugar. Que, además, no es otro que el velatorio de un familiar al que casi no conocías. Y acabamos TOPS con una de las joyas indiscutibles de 2019 que de forma incomprensible continúa inédita en nuestro país. Se trata de The Last Black Man in San Francisco, una joya tan reivindicativa como extraña, tan física como onírica, tan cruda como inevitablemente sentimental, que ha captado la atención y el entusiasmo del público, festivales y crítica especializada y se ha hecho con casi 20 premios importantes, donde destaca el premio Especial del Jurado y el de mejor dirección en Sundance.

Dentro de NEXT, tenemos La noche de los reyes, una co-producción entre Costa de Marfil y Quebec que ha entrado en la shortlist del Oscar de habla no inglesa y está nominada en la misma categoría de los Independent Spirit Awards. Nos explica la historia de un joven delincuente en una prisión gobernada por los reclusos. Una película tan brutal como poética con imaginación y creatividad desbordante. Siguiendo con nominadas a los Independent Spirit, también contamos con Lapsis, comparada con The Vast of Night, una distopía geek con mensaje social. También nominada a los Independent Spirit Awards encontramos Farewell Amor, que nos adentra en el reencuentro de un padre con su mujer y su hija que llegan de Angola después de 17 años sin verse. Estuvo en Sundance y ha recogido múltiples premios entre los que destaca el Top 10 de National Board of Review. Y continuamos con más Sundance, en este caso con Beast Beast, donde una chica que busca su conexión con el mundo del arte se convierte en una reflexión sobrecogedora sobre crecer en un mundo lleno de inseguridades y en una sociedad marcada por las redes sociales y la imagen individual. Y si como las dos películas anteriores, os gustan los jóvenes con vena artística, vuestra película del año es Summertime, también presentada en Sundance. Un mosaico urbano en Los Angeles donde skaters, grafiteros, raperos y camareros de comida rápida entran y salen para ofrecernos un recital poético a pie de calle. Y acabamos con los retratos juveniles de NEXT con una coming of age mexicano, Blanco de verano. Una historia compleja, sin tabúes, con delicada precisión pero con la necesaria contundencia sobre la ira de un adolescente cuando la nueva pareja de su madre ocupe su posición de hombre de la casa. Una película que se hizo con tres premios en la última edición del Festival de Málaga, incluyendo mejor película iberoamericana y mejor guion. Una sesión en colaboración con Casa América. Y ahora cambiamos de tercio y nos vamos a la América profunda con Buck Alamo, donde conoceremos un trillado cantante de country al que persigue la muerte, interpretada por Bruce Dern. Un retrato generacional que cuenta con Lorelei Linklater, la música de Sonny Carl Davis y una foto absolutamente espectacular. Y también de America profunda trata Lorelei, una historia sobre las prisiones, tanto reales como psicológicas que nos cortan las alas. Una película tierna sobre una sirena fuera del agua ganadora en Deauville. Y seguimos con mujeres atrapadas en el agua, en este caso con Nadia, Butterfly, una película de ficción de la selección oficial de Cannes donde acompañamos en los Juegos Olímpicos de Japón, que ahora parecen una distopía, a una atleta en la despedida de su vida profesional y las posibilidades infinitas que le depara el futuro, en una cinta muy intimista. Y también intimista es Small Town Wisconsin, donde un padre divorciado y alcohólico, anclado en una juventud que hace tiempo que pasó, pierde la custodia de su hijo y en vez de explicarle la situación quiere impresionarlo para que lo recuerde siempre. Una película que tiene la impronta omnipresente de Alexander Payne, el productor ejecutivo del film.

Dentro de DOCS veremos Bienvenidos a Chechenia, un documental de denuncia en clave de thriller, que nos acerca a la persecución gubernamental contra los gais de Chechenia, con el apoyo de Putin, y el trabajo de un grupo de activistas que sacan del país a las víctimas para evitar su muerte. Con premios en Berlín y Sundance y en dos shortlists de los Oscar, mejor documental y mejores efectos digitales. Y seguimos con Assassins y el asesinato del líder norcoreano Kim Jong-un en el aeropuerto de Kuala Lumpur. Las cámaras de seguridad muestran a dos chicas que se le acercan y a continuación huyen y así, ellas se convierten en las asesinas del hermano del máximo dirigente de Corea del Norte. ¿Pero la realidad es tan simple? ¿O hay un complot detrás? Por enésima vez, la realidad supera la ficción. Y en Feels Good Man el protagonista es Donald Trump i Pepe the frog, estrella de memes de hace unos años y que se convirtió en símbolo de la extrema derecha americana, muy a regañadientes de su autor. Una historia increíble que nos acerca a dos realidades absolutamente actuales: el poder incontrolable de las redes sociales y la división social y política de los EE. UU. (y del mundo). A Stray sabremos como en Istambul durante muchos años se ejecutaba a los animales de la calle. Después de críticas internacionales dejaron de hacerlo y actualmente estos animales viven libremente por la ciudad sin prohibiciones junto a los sin techo y los excluidos. Un punto de vista ganador en HotDocs y nominado a los Independent Spirit Awards. En Bloody Nose Empty Pockets encontraremos la mirada sensible sobre una pandilla de personas solitarias que han hecho de un bar de mala muerte de las afueras de Las Vegas, su casa. Actores olvidados, músicos adictos, veteranos de guerra y un puñado de personas a quienes la vida ha pasado factura, beben, filosofan, se abrazan, se quieren, se odian y por encima de todo se hacen compañía en el último día del bar en cuestión. . ¿Ficción? ¿Realidad? Qué más da, porque Bloody Nose Empty Pockets es una auténtica maravilla. Una proyección en colaboración con nuestro estimado festival Rizoma. Y acabamos DOCS con la clausura del festival, Spaceship Earth. Un grupo de amigos, científicos y contraculturales, ven el mundo como una aventura y un reto constante. Empiezan con pequeños experimentos y acaban llevando a cabo una gran aventura: cerrarse durante dos años en un ecosistema artificial para buscar nuevas esperanzas en el espacio, si nos cargamos el planeta. Ciencia, naturaleza, cambio climático, poder, intereses económicos y política conviven en un documental con guion de ciencia ficción. Será objeto de nuestras matinales en colaboración con la Fundación Victor Grífols y Lucas.

En toda esta programación de largometrajes hay que añadir los 29 cortos repartidos en tres sesiones, Shorts 1, Shorts 2 y Sundance Shorts.

En la primera sesión podremos ver entre otros Low-Key, una comedia animada de ciencia ficción donde sale Steve Buscemi, Uproot, el nuevo trabajo de Julia Bales, la pareja de Jim Cummings sobre dos hermanos o She used to laugh, una ruptura de pareja explicada a pie de micrófono en una noche de stand-up comedy. En Shorts 2, podremos ver High Card, una pequeña pieza sobre una pareja a punto de tener sexo por primera vez, The Colour of Your Lips, una distopía sobre un mundo donde el aire es irrespirable, Blocks, que sería como Swallow, pero al revés, es decir, una mujer que saca piezas de Lego por la boca o Standstill, un corto de terror sobre un hecho cotidiano para mucha gente. Y contaremos con una tercera sesión de cortos de Sundance. Los dos últimos años habíamos proyectado su Sundance Short Tour, pero con la pandemia no lo han podido preparar. Llegados a este punto hemos establecido una colaboración directa con Sundance para proyectar algunos de los cortos de la edición de 2021. ¡Más frescos imposible! Aquí destaca el documental A Concerto is a Conversation, que está en la shortlist de los Oscar y In the Air Tonight, una freakada que nos destapa lo que hay al detrás del éxito de Phil Collins.

Este año, por motivos evidentes, no habrá invitados. Pero aun así sí que contaremos con una retrospectiva en la Filmoteca, en este caso de la directora Kelly Reichardt, una de nuestras directoras de cabecera de quien hemos visto sus últimos trabajos en Americana. En esta retrospectiva podremos ver todas las películas de la directora, excepto la última First Cow, puesto que su situación de distribución en nuestro país no lo ha permitido.

Lo que sí tenemos es una nueva sección. Se llama “discoveries” y agrupa títulos que han pasado por el festival, pequeños descubrimientos que queremos reivindicar, y que a día de hoy no se pueden ver en ningún tipo de plataforma del estado. Esta sección se proyectará exclusivamente en Filmin. Dieciséis títulos donde destaca por ejemplo, LoveTrue, el documental sobre el amor verdadero del Alma Har’el, Take me to the river, una pequeña joya que muchos preguntabais si se podía ver de alguna forma o Interesting ball, un corto que hicieron los Daniels mucho antes de triunfar con Swiss Army Man.

 

El Festival de San Sebastián, tercera iniciativa cultural más importante de 2020

El Observatorio de la Cultura de la Fundación Contemporánea ha hecho públicos los resultados de su análisis del panorama cultural de España en 2020. El Festival de San Sebastián ha sido valorado como el tercer acontecimiento cultural más importante de 2020.

El tercer puesto del Festival supone ascender una posición respecto al ranking del año pasado, que vuelve a estar encabezado por el Museo del Prado y el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía. En tercer lugar se posiciona el Festival y la cuarta y quinta plaza están ocupadas, respectivamente, por el Teatro Real y el Museo Thyssen – Bornemisza. A continuación, figuran el Museo Guggenheim Bilbao, PhotoEspaña, CaixaForum, Museo de Bellas Artes de Bilbao Bilbao y Festival Internacional de Teatro Clásico de Almagro.

El Observatorio de Cultura es un instrumento para tomar el pulso del sector, analizar tendencias, promover el debate e identificar carencias y oportunidades. Desde 2009 lleva a cabo una consulta anual para detectar las instituciones y acontecimientos culturales más destacados del año. En este último cuestionario han participado 472 expertos y profesionales del ámbito cultural: escritores, artistas, cineastas, actores, músicos, arquitectos y creadores de todos los campos, responsables de fundaciones, directores de museos, centros e instituciones culturales; editores, productores, promotores, galeristas y responsables de industrias culturales; comisarios de exposiciones y gestores culturales, así como responsables de áreas e instituciones culturales de la administración pública central, autonómica y municipal.

Observatorio de la cultura  – Análisis de resultados

Charles Chaplin protagonista del BCN Film Fest 2021

El festival, 100% presencial con entradas a 2,90€, rinde homenage a Charles Chaplin con el diseño del cartel oficial y una retrospectiva en la sección Imprescindibles. 

El Festival Internacional de Cine de Barcelona-San Jorge (BCN FILM FEST), que este año se celebra del 15 al 23 de abril en los Cines Verdi de Barcelona como sede principal, ha presentado esta mañana el cartel oficial de su 5.ª edición y las primeras novedades confirmadas de su programación. El acto ha sido presentado por la directora del BCN FILM FEST, la periodista y crítica de cine Conxita Casanovas y el Director de RTVE en Cataluña, Pere Buhigas Cristina Muñoz, Jefa de Documentales de TV3.

“Este año será una edición especialmente importante porque esperamos poder confirmar que el festival sigue creciendo de manera vigorosa, saludable y sólida”, ha comentado Conxita Casanovas a la presentación de la 5.ª edición del festival. “Creo que podemos contribuir a que la gente recupere la rutina de ir al cine y los espectadores recobren la confianza de ver cine en las salas”, ha añadido.

El BCN FILM FEST, fiel al espíritu cultural de San Jorge, vuelve a ofrecer películas que giran alrededor del eje temático Cine-Literatura-Historia dentro de la Sección Oficial, centrándose sobre todo en adaptaciones literarias, biopics de grandes personalidades y acontecimientos históricos de relevancia.

Cómo en ediciones anteriores, el Festival contará con 6 secciones: Sección Oficial, Cine con Gracia (dedicada a las comedias), Zona Abierta, Arte en Pantalla (dedicada a grandes documentales de arte), Imprescindibles (dedicada a clásicos del cine de autor, este año de Charles *Chaplin) y una sección dedicada al cine de un país invitado, en esta edición: Japan by CineAsia.

“Estamos haciendo un grandísimo esfuerzo para salir adelante el festival de manera presencial contando con talento internacional del nivel de Nicolas Winding Refn, que ha confirmado su asistencia. Y estamos muy agradecidos a los distribuidores que apuestan por el BCN FILM FEST en esta nueva edición, el que nos permite presentar una gran variedad de títulos muy atractivos en un año muy complicado para elaborar programaciones”, ha destacado Casanovas.

La directora también ha remarcado que “tener a Chaplin en el cartel con motivo de la celebración del centenario de Chico y dedicarle la retrospectiva nos da la oportunidad de recuperar un espíritu y una mirada llena de ternura y humor que pienso nos viene muy bien en el momento actual que estamos viviendo”.  

 

CARTEL OFICIAL

El cartel oficial del BCN FILM FEST 2021 rinde homenaje al primer largometraje de Charles Chaplin, THE KID (El chico), en el centenario de su estreno. La imagen del pequeño Jackie Coogan del clásico de Chaplin, en una sala, como fascinado por la película que se proyecta en una pantalla que solo él puede ver, también pretende reivindicar el poder y la magia del cine en un momento como el actual, en el cual, como decimos en el spot del festival, parece que lo necesitamos más que nunca.

El centenario THE KID (El chico) es el motivo que nos ha llevado a dedicar nuestra sección Imprescindibles a Charles Chaplin, con una amplia retrospectiva de su filmografía que incluye 10 películas y 7 cortometrajes. El diseño del cartel es de Joel B. Garcia de VECTOR WHO.

ESPOT OFICIAL

El spot entabla un tipo de diálogo con el cartel del festival. Un diálogo cómplice entre pioneros del cine: el icono del personaje creado por Chaplin y el símbolo que representa el origen de todo, el cinematógrafo de los hermanos Lumière. Un spot que evoca y reafirma la necesidad del cine como arte popular por excelencia, tanto en la época en la cual fue inventado, hace ya más de 100 años, como en los tiempos complicados que hoy nos ha tocado vivir. El diseño del spot es de Paco Ruíz. Ver el spot

ADELANTO DE LOS PRIMEROS TÍTULOS DEL BCN FILM FEST 2021

La 5.ª edición del festival contará con una programación de más de 50 títulos entre sus diferentes secciones. A continuación un primer adelanto de la programación:

SECCIÓN OFICIAL A COMPETICIÓN

MAMÁ MARÍA (La Daronne)
De Jean-Paul Salomé / Con Isabelle Huppert, Hippolyte Girardot
Francia / Première española

PENGUIN BLOOM
De Glendyn Ivin / Con Naomi Watts, Andrew Lincoln, Jacki Weaver
Australia, Estados Unidos / Première española

PEQUEÑO PAÍS (Pequeño Pays)
De Eric Barbier / con Jean-Paul Rouve
Francia, Bélgica / Première española

SOMBRA De Bruno Gascon
Portugal / Première española

SUEÑOS DE UNA ESCRITORA EN NUEVA YORK (My Salinger Year) 

De Philippe Falardeau / Con Margaret Qualley y Sigourney Weaver
Canadá, Irlanda / Première española

THE GOOD TRAITOR (Bordes mand y Amerika) 
De Christina Rosendahl / Con Ulrich Thomsen
Dinamarca / Première española

YALDA, A NIGHT FOR FORGIVENESS
De Massoud Bakhshi
Irán, Francia / Première española

 

SECCIÓN OFICIAL (FUERA DE COMPETICIÓN)

LA MUJER DEL ESPÍA (Wife of a spy)
De Kiyoshi Kurosawa
Japón / Première catalana

PAOLO CONTE, VÍA CON ME
De Giorgio Verdelli
Italia/ Première catalana

 

CINEMA AMB GRÀCIA

BLITHE SPIRIT
De Edward Hall / Con Dan Stevens, Isla Fisher, Judi Dench
Reino Unido / Première española

EL TRIUNFO (Un triomphe)
De Emmanuel Courcol / Con Kad Merad
Francia / Première catalana

 

ZONA ABIERTA

VALHALLA RISING (2009)
De Nicolas Winding Refn / Con Mads Mikkelsen
Dinamarca, Reino Unido

 

IMPRESCINDIBLES  –CENTENARIO EL CHICO RETROSPECTIVA CHARLES CHAPLIN

EL CHICO (1921)

UNA MUJER DE PARÍS (1923)

LA QUIMERA DE ORO (1925)

EL CIRCO (1928)

LUCES DE LA CIUDAD (1931)

TIEMPOS MODERNOS (1936)

EL GRAN DICTADOR (1940)

MONSIEUR VERDOUX (1947)

CANDILEJAS (1952)

UN REY EN NUEVA YORK (1957)

Cortometrajes:

VIDA DE PERRO (1918)

¡ARMAS AL HOMBRO! (1918)

AL SOL (1919)

UN DÍA DE JUERGA (1919)

VACACIONES (1921)

DÍA DE PAGA (1922)

EL PEREGRINO (1923)

 

EL JURADO

La 5.ª edición de el BCN FILM FEST contará con el polifacético director de cine y de teatro y actor Mario Gas en calidad de Presidente del Jurado. Galardonado el 1996 con el premio Nacional de Teatro de Cataluña y nombrado Director del Teatro Español el 2004, como actor de cine ha forjado una extensa carrera con más de 30 películas a su haber. Ha trabajado con grandes directores como Vicente Aranda, Bigas Luna, Berlanga o Ventura Pons, y recientemente lo hemos podido ver a “La Vampira de Barcelona”. Como actor de doblaje es la voz habitual de actores como Ben Kingsley, Geoffrey Rush, Bill Nighy o John Malkovich.

La actriz Laia Marull, con tres Goyas, Mejor Actriz Revelación por su papel a “Fugitivas”, Mejor Actriz por “Té doy mis ojos” y Mejor Actriz de Reparto por “Pan Negro” y el director Jaume Balagueró completan el jurado de esta quinta edición. *Balagueró es uno de los precursores del cine de terror español y responsable de títulos como “Los sin nombre”, la saga “Rec”, “Frágiles”, “Mientras duermes” y “Way Down”, último trabajo que está pendiente de estreno.

ACTIVIDADES PARALELAS DEL FESTIVAL

Como en las ediciones anteriores, el festival completará su programación con charlas y coloquios variados. Las actividades paralelas del festival serán gratuitas. Toda la información de las actividades paralelas se dará a conocer durante el mes de marzo. Un primer adelanto.

>> Coloquio presencial con el director Nicolas Winding Ref

>> Coloquio Charles Chaplin – Con motivo del Centenario EL CHICO se realizará un coloquio de especialistas con la participación de Carmen Chaplin, nieta de Charles Chaplin, quien presentará las primeras imágenes del documental: “Charlie Chaplin, A Man of the World”.

>> 4.ª Jornada de Guionistas e Industria con la colaboración de PROA.

>> Presentaciones de libros relacionados con el cine y la historia, con la colaboración de Penguin Random House y FNAC.

ENTRADAS A 2,90€ Y SESIONES GRATUITAS

El festival continuará con un precio de 2,90€ para la mayoría de las sesiones de los cines Verdi y con sesiones gratuitas Imprescindibles (retrospectiva Charles *Chaplin) en varios centros cívicos de la ciudad de Barcelona. Un festival popular y abierto en la ciudad.

En este LINK  se puede recuperar el video resumen de la edición de 2020 de el BCN FILM FEST que contó con más de 8.000 espectadores (a pesar de las restricciones de aforo a causa de la  Covid19).

El proceso de acreditación para prensa e industria para la quinta edición del BCN FILM FEST empezará el próximo 12 de febrero y acabará el 12 de marzo de 2021.

El BCN FILM FEST cumplirá con todas las medidas sanitarias y de seguridad, así como el máximo aforo previsto que marque la ley en el momento de la celebración del festival.

Primeras confirmaciones del Americana 2021

Ya queda menos para volver a disfrutar de una selección de la mejor cosecha de cine indie del año con el único festival del sur de Europa especializado en Cine Independiente Norteamericano. Americana Film Fest es consciente de la situación actual debida a la pandemia mundial y por eso se realizará en un formato híbrido con la presencia física que las autoridades establezcan en su momento y con una presencia online. Las sedes físicas del festival serán como siempre los Cines Girona, Zumzeig, Phenomena y Filmoteca de Catalunya. La sede online será la plataforma Filmin. Otra novedad que queremos anunciar es la expansión del festival gracias a la nueva sede del festival en Madrid: Círculo de Bellas Artes.

Teniendo en cuenta esta nueva estructura el calendario del festival será:

Del 3 al 14 de marzo en Filmin
Del 2 al 7 de marzo en Barcelona
Del 12 al 14 de marzo en Madrid

Las fechas de las sedes físicas podrán quedar afectadas por las posibles restricciones covid. Si se da el caso anunciaremos los posibles cambios en nuestras redes sociales. Stay tunned!

Ya es una tradición de estas fechas, Americana lanza su oferta única navideña por un tiempo limitado. Podrás comprar tu abono de 6 película a un precio excepcional de 30 euros hasta agotar las existencias. Atención: estos abonos solo serán válidos para las sesiones en Barcelona (Cinemes Girona, Zumzeig) del festival. Este abono te permitirá el acceso a seis sesiones del festival y es compartible, es decir, puedes cambiar más de una entrada por sesión para disfrutar del buen cine en compañía.

Comprar abono

Próximamente tendréis noticias sobre los abonos para Filmin y sobre las entradas para el Círculo de Bellas Artes (Madrid).

Y como no podía ser de otra forma, aquí tenéis dos confirmaciones de la octava edición:

Palm Springs
(Max Barbakow)

Sin duda una de las sensaciones de la pasada edición de Sundance. Palm Springs contiene todos los ingredientes indes que más nos gustan: comedia romántica y ciencia ficción. Andy Samberg, Cristin Milioti J.K. Simmons protagonizan esta especie de Atrapado en el tiempo del siglo XXI.

The Killing of Two Lovers
(Robert Machoian)

Americana acogerá el estreno español de una de las películas del año: The Killing of Two Lovers. Tras su paso por Sundance consiguió ser la mejor película en el Atlanta Film Festival y este mes ha entrado en el listado de recomendaciones de Nuevos Directores de IndieWire.

A estos dos títulos se le añade la película que os anunciamos el mes pasado: Bloody Nose Empty Pockets de Bill Ross IV i Turner Ross. Documental multipremiado presente en festivales como Sundance, Berlín Champs-Élysées, donde ganó el premio a la mejor dirección. Una experiencia única que podremos disfrutar gracias a la colaboración de este año con el Festival Rizoma.

Crónica Festival de Sitges 2020. Día 10

Kandisha

Tres chicas, que han sido inseparables desde niñas, invocan el espíritu de Kandisha, una criatura vengativa e inquietante que se encuentra en las leyendas marroquíes. Lo que solo pretendía ser un juego se convierte en una pesadilla cuando las relaciones cercanas del trío comienzan a desaparecer en circunstancias cada vez más trágicas.

Alexandre Bustillo y Julien Maury volvían a Sitges con su nuevo trabajo titulado Kandisha, una película que supone  el regreso de los realizadores galos a su país de origen después de un más que traumático paso por tierras estadounidenses, un trayecto este último plagado de varios proyectos cancelados y un film tan impersonal como carente de cualquier tipo de autoría como resulto ser Leatherface.

Viendo como está trascurriendo su trayectoria posiblemente sea el momento idóneo de intentar saber posicionar con una mayor perspectiva y ecuanimidad el lugar ocupado por Alexandre Bustillo y Julien Maury dentro del género fantástico europeo pues en cierta manera pertenecen a esa clase de autores que parecen no haber cumplido del todo las expectativas iniciales atribuidas a su opera prima, o más bien se han visto incapacitados a la hora de satisfacer el ruido mediático generado en su debut. Es evidente que À l’intérieur marca de alguna manera un punto álgido de aquella tendencia fílmica denominada extremismo francés, una película sin embargo más direccionada a ser aplaudida y etiquetada en base al concepto por el que se movía que por sus propios méritos cinematográficos. Sea como fuera los posteriores trabajos de Alexandre Bustillo y Julien Maury no han estado sustentados a través de esa atribuida autoría de talante rompedor que a su manera redefiniera conceptos dentro del fantástico como si se percibe de algún modo en la trayectoria de su compatriota Pascal Laugier estando más cerca en espíritu a Alexandre Aja en lo concerniente a recurrir a la referencia, e incluso en ocasiones a trabajos de claro carácter alimenticio, como se ha demostrado en sus películas posteriores Livide, posiblemente su mejor película realizada hasta la fecha, Aux yeux des vivants y Leatherface. Kandisha pertenece de una forma evidente a este grupo de trabajos expuesto aquí en base a una entretenida y funcional reinterpretación narrativa del Candyman de Bernard Rose. Un film competente en base a una cuidada factura técnica pero intrascendente más allá de ser un mero entretenimiento genérico de unas claras y nada disimuladas texturas comerciales que transita a través de un terror urbano con espíritu vengativo de por medio situado escénicamente en las periferias de los barrios humildes de las grandes ciudades a la hora de indagar en la parte ancestral y exótica de la leyenda maldita siempre dentro de un contexto de realismo social. La película de Alexandre Bustillo y Julien Maury, que ya tienen un nuevo film listo titulado The Deep House, se aparta por consiguiente de ese supuesto tono trasgresor que algunos quisieron ver en À l’intérieur, a tal respecto posiblemente lo mejor de Kandisha radique en ser conciente de sus propias limitaciones siendo un producto de terror tópico, sencillo y directo, alejado de supuestas pretenciosidades nacidas bajo el amparo de unas expectativas tan elevadas como mal interpretadas en su momento.

Valoración 0/5: 2

 

May the Devil Take You Too

Dos años después de escapar del demonio, Alfie y Nara tratan de rehacer sus vidas. Pero la primera sigue atormentada por la culpa y sufre visiones extrañas. En realidad, el tormento está muy lejos de haber terminado, ya que una entidad ávida de almas acecha todos sus pasos.

Podríamos aseverar a estas alturas que el realizador indonesio Timo Tjahjanto es todo un referente en lo concerniente al cine de género proveniente de Asia, la curiosa Macabre fue su primera toma de contacto con el terror, tras sus correctas participaciones en las colectivas The ABCs of Death y V/H/S/2 en 2018 presento en Sitges por partida doble The Night Comes for Us y May the Devil Take You, esta última una cinta de terror satánico y posesiones expuesta a modo de una efectiva catarata de jump scares cuya segunda parte, fiel en estilo y espíritu a la primera, estuvo presente este año en el certamen catalán.

Ya habíamos hecho referencia en anteriores crónicas de esta edición de como el cine de horror proveniente de Indonesia ocupo este año en Sitges un lugar bastante privilegiado en referencia a las cinematografías asiáticas que transita a través del terror, junto a Impetigore y The Queen of Black Magic el film de Timo Tjahjanto se erigió como uno de los más incisivos en esa cada vez más complicada tarea de intentar satisfacer las exigencias del actual fandom del fantástico. En tal sentido May the Devil Take You Too sigue las mismas directrices que su antecesora, si acaso amplifica aún más los conceptos antes mostrados en base a ser ese tipo de cine que en ningún momento quiere disimular las que son sus referencias, en este caso y de forma muy evidente las dos primeras partes de la saga Evil Dead de Sam Raimi, aquí mostrado en base a una acción escenificada primordialmente a través de un espacio cerrado en donde sus habitantes ocasionales son sistemáticamente atacados por una deidad de índole demoníaco en relación a la continua exposición de un terror visceral expuesto a modo de tren de la bruja permitiéndose el lujo Timo Tjahjanto incluso de apuntar en la historia ciertas texturas del folklore asiático, un producto afín de cuentas en donde no parece llegar a ser un déficit, de ahí su gran virtud, el seguir por unas rutas genéricas percibidas y desarrolladas como muy prestablecidas.

Valoración 0/5: 3

 

Tin Can

Mientras el planeta sucumbe a una plaga mortal, una parasitóloga queda encerrada en una cámara de suspensión vital. Al despertar, halla a los herederos de la Tierra y, para sobrevivir, deberá acabar con los últimos vestigios de su propia especie.

Hace un par de años el joven realizador canadiense Seth A. Smith presento en Sitges la interesante The Crescent, historia de fantasmas de trazo vanguardista  y estructura algo arty anclada en un limbo temporal que nos remitía fugazmente a texturas propias de la fundamental The Twilight Zone, con Tin Can, su tercer trabajo tras las cámaras, presente en la sección Panorama Fantàstic cambia casi por completo de rumbo y tono a la hora de ofrecernos un modesto y curioso relato minimalista de ciencia ficción.

Tin Can nace de la necesidad perentoria de ese concepto de intentar rentabilizar al máximo la falta de recurso con algo de imaginación y talento, de hecho el film parece dar la impresión de estar vertebrado en base a dos mediometrajes, esto no resta interés a una propuesta en apariencia interesante pero algo irregular en referencia a su narrativa. Tras una presentación en donde una pandemia de difícil control amenaza con destruir la humanidad, que nos pone solo de forma aparente en situación, llega una primera parte, posiblemente la más interesante de la película, en donde se nos muestra un confinamiento extremo que toma referencias a conceptos claustrofóbicos vistos en películas como por ejemplo el Buried de Rodrigo Cortés o Cube de Vincenzo Natali, este segmento de la historia de un claro tono minimalista, al igual que las películas comentadas, como mandan los cánones basa su principal razón de ser mediante la incertidumbre de su narrativa, en tal aspecto hacemos un viaje casi en paralelo a la protagonista en lo concerniente a saber el porqué de tal situación, hasta ese momento la película función relativamente bien dadas su modesta pero aplicada estructura, la parte más discutible del film de Seth A. Smith posiblemente venga en lo relativo a una parte final en donde se cambia casi por completo de tono, la supuesta fuga al exterior motivara las respuestas pertinentes a las interrogantes anteriores utilizando de forma algo discutible el recurso del flashback temporal, artificio este que hace entrar al relato en una especie de agujero de gusano más direccionado al drama que al fantástico propiamente dicho, una tesitura genérica que nos lleva a preguntarnos si realmente era necesario tales recursos narrativos a la hora de contar una historia en apariencia bastante simple, un déficit que en parte también ya era percibida en su anterior The Crescent. En tal respecto, y sin que sirva como un mal endémico pues Seth A. Smith sigue percibiéndose como un interesante realizador aún por pulir, parece bastante claro que Tin Can, pese a ciertos hallazgos concernientes a la utilización de recursos escénicos bastantes ingeniosos, pertenece a ese tipo de películas que funcionan mucho mejor planteando preguntas que respondiéndolas.

Valoración 0/5: 2’5

 

Saint-Narcisse

El fetiche de Dominic es… él mismo. Nada le excita más que su reflejo. Por eso, descubrir que tiene un hermano gemelo, criado en un monasterio remoto por un sacerdote depravado, le causa una gran turbación. El destino vuelve a juntar a los dos jóvenes, y su relación fraternal se retuerce entre el sexo, la venganza y la redención.

Por alguna razón que escapa a mi entendimiento el realizador canadiense Bruce LaBruce se ha convertido en estos últimos años en una figura muy recurrente dentro del Festival de Sitges, posiblemente debido a ser un autor que tenga la costumbre de tomar referencias de ciertos conceptos de la serie B a la hora de redefinir una autoría lindante con lo underground, sea como fuera Saint-Narcisse su último trabajo tras las cámaras estuvo presente en Sitges aportando una buena dosis de esa característica tan particular que atesoran ciertas filmografías que suelen transitar a través de la irreverencia autoral.

Encuadrado como no podía ser de otra manera dentro de la sección Noves Visions Bruce LaBruce, por aquello del elemento fantástico, entro en Sitges con aquella demencial L.A. Zombie en donde se mezclaban sin apenas pudor el gore con el porno gay, como ha declarado en diversas entrevistas el cine porno, tan presente en toda su trayectoria, ha sido utilizada en la gran mayoría de ocasiones en sus películas a modo de herramienta subversiva política, Saint-Narcisse sigue moviéndose por unos patrones similares a anteriores trabajos suyos sin embargo el tono de extravagancia da la impresión de ser algo más depurado y por lo tanto menos agresivo como lo demuestra que en el pasado Festival de Cine de Venecia fuera, aun en secciones paralelas, galardonado. No se trata de un adocenamiento y si más de una evolución hacia un discurso y una narrativa percibida como más depurada, a tal respecto la irreverencia que encontramos en Saint-Narcisse, su proyecto más ambicioso realizado hasta la fecha contando con un presupuesto de 2 millones de dólares, cifra que evidentemente no lo mueve fuera de unos parámetros de cine independiente de nivel bajo, esta direccionada principalmente a ser una crítica al concepto tradicional de la familia y la iglesia, esta última expuesta como ente material que imposibilita búsqueda del yo interior, en esta ocasión el discurso resulta bastante más matizado sin llegar a recurrir a ese artificio morboso algo repetitivo e innecesario que normalmente suele utilizar el responsable de The Misandrists. Saint-Narcisse, que atesora curiosos apuntes acerca de la dualidad del individuo, recrea el mito del narciso bajo un prisma que parece mirar al cine de los años 70 en base a una amalgama genérica diversa en donde predomina el thriller mostrado en base a una curiosa ambientación gótica aquí expuesta a través de recursos simbólicos muy estéticos . Bruce LaBruce vuelve a echar mano a la exploitation en la medida de ser posiblemente el tipo de cine más directo a la hora de intentar exponer una incorreción política de lo que está sucediendo, también en lo concerniente a reformular el concepto del supuesto valor del shock dentro del relato, en esta ocasión mostrado de una forma algo menos abrupta e incoherente que de costumbre.

Valoración 0/5: 2

 

Spookies

Un avejentado alquimista colecciona en su mansión maléfica todo tipo de monstruos: zombies, gnomos, arañas, alienígenas, muppets y viejos fantasmas. En tal circunstancia aprovecha la incidental visita de un grupo de parejas imbéciles, para sacrificarlos y revivir a su esposa que ha estado durmiendo los últimos setenta años.

Dentro de la sección Seven Chance han ido apareciendo en estos últimos años una serie de películas que aprovechando su salida en formato digital reivindican en cierta manera aquel cine de género consumista recurrente en los video clubs de los años ochenta, films que por diferentes motivos han quedado casi enterrados en el anonimato en las últimas décadas siendo muchas de ellas auténticas desconocidas para el nuevo fandom del fantástico, si en la pasada edición del festival muchos pudieron descubrir por primera vez la notable Dream Demon de Harley Cokeliss en esta ocasión el turno es para un divertimiento tan desprejuiciado como Spookies.

El rescate o la proyección de una película de las características de Spookies atesora una doble lectura con respecto al espectador ya algo veterano y el digamos recién llegado, por una parte una de un claro índole nostálgico con respecto al primero en base a recuperar aquellas series B disponibles en formato doméstico que marcaron a toda una generación, no ya por la valía de las películas en sí mismo sino por ese concepto material de poder tener la potestad por primera vez en tu vida de elegir un film para poder verlo en tu casa el día y la hora que quisieras, evidentemente dicho privilegio direcciono a un nutrido grupo de aficionados al descubrimiento casi arqueológico de un tipo de cine de género fantástico de serie B nacido específicamente para dicho mercado, en tal sentido Spookies formaría parte de él, en el otro apartado vendría la reflexión de índole ya menos emotiva que se detenga en lo concerniente a como hoy en día asimilamos un producto de estas características al ser inconcebible el poder llegar a realizarlas en el presente llegando a la conclusión de que el entretenimiento base sin ningún tipo de pretensión tal como lo concebían aquellas películas en la actualidad, incluso en el escalafón más bajo que podamos encontrar en cualquier opera prima de tono independiente, está más concebido a intentar mostrar de forma sistemática algo más que un simple divertimento genérico. Con respecto a intentar desgranar las virtudes y defectos de Spookies estamos ante esa clase de películas que necesitan de muy poca explicación al estar concebida básicamente para ser disfrutada más que analizada, la película se sitúa solo un escalón por encima de cualquier producción Troma de la época, de hecho estamos ante un film realizado en base el descarte de otro, solo así se puede legar a entender tanto la triple nómina de directores que la conforman, Genie Joseph, Thomas Doran y Brendan Faulkner, como al caos narrativo del que se sustenta, inexplicable infanticidio al principio del relato incluido. Con esa agradable exaltación hacia el maquillaje artesanal y las referencias ineludibles a lo que por aquel entonces estaba de moda en el fantástico, desde el Evil Dead de Sam Raimi al Michael Jackson’s Thriller de John Landis, Spookies dada su honestidad fue un acertado broche final al certamen en el vetusto pero entrañable cine Prado por parte de un servidor, una nueva edición de un Festival de Sitges que pese a todas las dificultades habidas y por haber ha decidido seguir adelante un año más. A tal respecto gracias por el esfuerzo.

Valoración 0/5: 3

 

Palmares

Secció Oficial Fantàstic a competició

Millor pel·lícula / Mejor película / Best Feature Length Film
Possessor Uncut (Brandon Cronenberg) 

Premi especial del jurat / Premio especial del jurado / Special Jury Prize
La nuée de/by Just Philippot     

Millor direcció / Mejor dirección / Best Direction
(sponsored by Moritz)
Brandon Cronenberg (Possessor Uncut)

Menció a la direcció / Mención a la dirección / Mention to the Direction
Natalie Erika James (Relic)

Millor interpretació masculina / Mejor interpretación masculina / Best Actor
(sponsored by Vilamòbil)
Grégoire Ludig & David Marsais (Mandibules)

Millor interpretació femenina / Mejor interpretación femenina / Best Actress
(sponsored by So de Tardor)
Suliane Brahim (La nuée)

Menció a la interpretació femenina / Mención a la interpretación femenina  / Mention to the Best Actress
Marin Ireland (The Dark and The Wicked)

Millor guió / Mejor guion / Best Screenplay
(sponsored by Fundació «la Caixa» & CaixaBank)
Márk Bodzsár, Juli Jakab & István Tasnádi (Comrade Drakulich)

Millors efectes especials / Mejores efectos especiales / Best Special Effects
(sponsored by Kelonik & Antaviana)
Maks Naporowski, Filip Jan Rymsza, Dariush Derakhshani (Mosquito State)

Millor fotografia / Mejor fotografía / Best Photography
Tristan Nyby (The Dark and The Wicked)

Millor música / Mejor música / Best Music
Bingen Mendizábal & Koldo Uriarte  (Baby)

Gran Premi del públic a la millor pel·lícula / Gran Premio del público a la mejor película / Audience Award Best Motion Picture
(sponsored by La Vanguardia)
La vampira de Barcelona (Lluís Danés)

Millor curtmetratge de gènere fantàstic / Mejor cortometraje de género Fantástico / Best Fantastic Genre Short Film
(sponsored by Fotogramas)
The Luggage (Yi-fen Tsai)

Menció al curtmetratge / Mención al  cortometraje / Mention to the Short Film
Rutina: La prohibición (SAM)

Panorama Fantàstic

Millor pel·lícula / Mejor película / Best Feature Film
Tailgate (Bumperkleef) de Lodewijk Crijns

Focus Asia

Millor pel·lícula / Mejor película / Best Feature Film

The Queen of Black Magic de Kimo Stamboel

Noves Visions
Millor pel·lícula / Mejor película / Best Feature Film
My Heart Can’t Beat Unless You Tell It To (Jonathan Cuartas)

Menció a la pel·lícula / Mención a la película / Mention to the Film
El elemento enigmático (Alejandro Fadel)

Millor direcció / Mejor dirección / Best Direction
Laura Casabé (Los que vuelven)

Millor curt Noves Visions Petit Format / Mejor corto Noves Visions Petit Format / Best Noves Visions Petit Format Short    
Luz Distante – Parte 1, Les desventurades (Santiago Reale)

Midnight X-treme
Premi del públic a la millor pel·lícula / Premio del público a la mejor película / Audience Award Best Motion Picture
The Queen of Black Magi(Kimo Stamboel)

Sitges Documenta
Premi a la millor pel·lícula / Premio a la mejor película / Award Best Motion Picture
Ivan, O Terrível (Mario Abbade)

Blood Window
Premi Blood Window / Premio Blood Window / Blood Window Award
Marea alta (High Tide) de/by Verónica Chen

Jurat de la Crítica
Premi de la Crítica José Luis Guarner / Premio de la Crítica José Luis Guarner / José Luis Guarner Critic’s Award
Teddy (Ludovic Boukherma & Zoran Boukherma)
Premi Citizen Kane a la direcció revelació / Premio Citizen Kane a la dirección revelación / Citizen Kane Award for Best New Direction
Jonathan Cuartas (My Heart Can’t Beat Unless You Tell It To)

Méliès d’Argent
Premi al Millor Curtmetratge /Premio al Mejor Cortometraje / Award for Best Short Film
Dar-dar de Paul Urkijo

Premi a la Millor Pel·lícula/ Premio a la Mejor Película / Award for Best Feature Film
Le dernier voyage de Paul W.R de Romain Quirot

Carnet JOVE
Premi Jurat Carnet Jove al millor llargmetratge de gènere fantàstic  /  Premio Jurado Carnet Jove al mejor largometraje de género fantástico / Carnet Jove Award for Best Fantasy Genre Feature Film     
She Dies Tomorrow (Amy Seimetz)

Premi al millor llargmetratge d’animació / Premio al mejor largometraje de animación / Award for Best Animated Feature Film    
Seven Days War (Yuta Murano)

Premi al millor curtmetratge d’animació / Premio al mejor cortometraje de animación / Award for Best Animated Short Film
Red Rover (Astrid Goldmisth)

Brigadoon
Premi Brigadoon Paul Naschy / Premio Brigadoon Paul Naschy / Paul Naschy Brigadoon Award
Horrorscope (Pol Diggler)


Crónica Festival de Sitges 2020. Día 9

Cosmética del enemigo

Jeremiasz Angust es un arquitecto de éxito que dirigiéndose al aeropuerto de Tokyo pierde su vuelo a causa de una misteriosa joven, Texel Textor, que lo aborda de repente. Los dos personajes iniciarán una conversación que irá enrareciéndose hasta convertirse en algo siniestro y criminal.

El realizador catalán Kike Maíllo vino a confirmar con su competente Cosmética del enemigo su buena mano con los géneros ya comprobados en anteriores trabajos suyos como aquella fantasía robótica de ciencia ficción titulada Eva, presente como inauguración en Sitges 2011, o el aplicado thriller patrio Toro, con Cosmética del enemigo, su proyecto más internacional y ambicioso realizado hasta la fecha, Maíllo se adentra en ese algo pantanoso terreno de las adaptaciones literarias populares contemporáneas.

Partiendo de la base de la exitosa novela homónima de la escritora belga Amélie Nothomb publicada en 2001 Cosmética del enemigo película transcurre básicamente a través de ese concepto de características tan teatrales existente en base a la confrontación dialéctica entre dos únicos y antagonistas personajes, dicho duelo con respecto al texto original difiere de forma lógica al estar sustentando bajo paramentos y conceptos de índole más cinematográficos, especialmente en referencia a la incorporación de más espacios escénicos a la trama, la mayoría de ellos mostrados en forma de flashbacks en base a continuos saltos narrativos y temporales. Como buen thriller psicológico que es en donde evidentemente nos encontraremos tarde o temprano con los consabidos giros argumentales Cosmética del enemigo nos muestra a través de ese duelo verbal mal avenido ya desde un principio, y que conforma avanza la trama se vuelve más oscuro, comportamientos en un principio de naturaleza oculta como la culpa que genera la aparición de fantasmas del pasado, aquellos males que se intentan de alguna manera tapar con respecto a los demás pero que aquí terminan, debido a esa fricción dialéctica, saliendo al exterior. El film de Kike Maíllo, posiblemente la película española presente en el certamen con más posibilidades comerciales con respecto al mercado foráneo, pese a moverse de forma funcional por unos inequívocos parámetros del thriller entendido como convencional se beneficia de un buen uso escénico en referencia a ese amplio aeropuerto que pese a su amplitud geométrica viene a representar a la perfección en base a sus texturas asépticas e impersonales la idea del no-lugar, un espacio grande que deviene como pequeño para el protagonista, a la postre una pequeña caja de ratón que nos viene a decir como por muchos viajes y huidas que intentemos tomar el subconsciente siempre ira un paso por delante de nosotros, disyuntiva casi emparentada a la sufrida por el personaje de la notable The machinist de Brad Anderson, aquí expuesta a modo de un trauma que siempre acompañara al protagonista en forma de un autoengaño de ineludible poder autodestructivo.

Valoración 0/5: 2’5

 

Inmortal

Ana llega a Buenos Aires tras la muerte de su padre. A través de su viuda descubre que un científico llamado Benedetti fue contratado por una misteriosa fundación, para la que está desarrollado un mundo paralelo que permitiría que los vivos y los muertos entren en contacto.

Algo arrinconada por el impacto que tuvo en el festival Historia de lo oculto, Inmortal de Fernando Spiner (Aballay, el hombre sin miedo, La sonámbula) fue otra de las producciones de género argentinas presentes este año en Sitges, un drama fantástico que indaga en ese difícil imaginario que intenta recrear la difícil coexistencia mental, aquí física gracias al elemento fantástico científico, entre vivos y muertos.

Inmortal, presentada en el festival como riguroso estreno mundial, transita a través de dimensiones paralelas partiendo de una premisa en un principio interesante, un simple ascensor actúa como umbral entre el mundo real y un reducto artificial en donde los muertos de alguna manera se materializan pudiendo interactuar con ellos, dicho espacio escénico viene a estar representado en las antípodas de por ejemplo la ampulosidad colorista vista en el imaginario creado por Richard Matheson y Vincent Ward en What dreams may come, puestos a buscar algunas similitudes por aquello de las realidades alternativas a un nivel visual y salvando las distancias pues ambos ejemplos no pueden ser más antagonistas entre ellos ese universo de los llamados residentes visto en Inmortal se asemeja en algo a aquel segundo plano terrenal recreado en la serie Fringe, ambos espacios devienen como asépticos y mortecinos con un predomínate filtro amarillo que actúa a modo de tamiz a la hora de mostrar la carencia vital de los que lo habitan. El problema con Inmortal posiblemente venga en relación a un choque percibido como abrupto en referencia a no saber calibrar del todo bien sus facetas genéricas, un servidor tiene la intuición de estar esencialmente ante un drama en donde predomina en todo momento un muy acentuado realismo que entra en una continua fricción con un elemento fantástico aquí mostrado con demasiada incredulidad, este de alguna manera ha de ser la posibilidad, o la llave narrativa, a la hora de mostrarnos un melodrama que intenta explorar las relaciones filiales en base a la búsqueda de una afectividad que fue carente en vida, sin embargo la sensación final es que la fantasía o la fantasmagoría del relato no deja de ser solo una mera excusa expuesta con bastante aparatosidad, lamentablemente tan mal desarrollada como la visualización mostrada en la película con respecto a ese difuso vínculo existente entre ambos universos.

 Valoración 0/5: 2

 

Impetigore

Confinada en la cabina del peaje donde trabaja, Maya observa cómo un coche se para, y un hombre desciende y se dirige hacia ella machete en mano. La única que le puede ayudar es su amiga Dini, pero está lejos. El susto inicial dará paso a un viaje a un pueblo selvático, en el que Maya y Dini buscarán respuestas, pero lo único que encontrarán serán las suspicacias de sus habitantes.

Algo sorprendente como en un año en donde el cine proveniente de Japón, Corea de sur o Hong Kong tuvo una presencia casi residual en Sitges fuera un país como Indonesia el que tuviera la presencia más fiel y destacada, en referencia básicamente al reciclaje de conceptos genéricos, en lo concerniente al terror asiático presente en esta edición del certamen, trabajos como The Queen of Black Magic de Kimo Stamboel, May the Devil Take You Too de Timo Tjahjanto o el Impetigore de Joko Anwar que nos ocupa mostraron y dieron buena cuenta del buen momento de dicho país en lo concerniente a un terror que sin renunciar a señas de identidades propias es perfectamente exportable a otras latitudes.

Joko Anwar, también guionista de la antes comentada y también presente en el festival The Queen of Black Magic, no es un recién llegado al género, suyas son aportaciones direccionadas en mayor o menor medida al fantástico como por ejemplo The Forbidden Door (2009), Modus Anomali (2012) o Satan’s Slaves (2017) entre otras, con Impetigore, ejercicio de terror tan funcional como recomendable, se adentra en el subgénero de la maldición aldeana en base a un relato de fantasmas vengativos con cierto aroma al folk horror local, un film que funciona principalmente en lo relativo a su malsana atmosfera rural. Con una primera escena muy efectiva a tal respecto Joko Anwar va al grano y necesita de muy poco tiempo a la hora de atraer a ese espectador poco exigente dispuesto a pasar un buen rato con un relato que le prometa no salir de determinadas coordenadas genéricas, en tal respecto Impetigore sale bien parada en base a la agraciada fusión de tropos de géneros clásicos con elementos de la historia y la cultura de su país de origen. Posiblemente los elementos que vertebra de la trama de Impetigore no sean novedosos y atesoren una cierta sobre explicación en algunos tramos de la historia, Joko Anwar sin embargo en referencia a esa ausencia de originalidad lo compensa con un estilo cercano al buen artesano del genero aportando aquí pequeños detalles y acotaciones a la hora de generar una tensión adicional al relato en lo concerniente por ejemplo a establecer una confrontación entre diferentes miradas y percepciones de la realidad, las modernas provenientes de las grandes ciudades en relación a las dos protagonistas principales y la tradicional, adyacente a un ámbito rural de tono amenazador anclado en supersticiones del pasado.

Valoración 0/5: 3

 

Citizen K

Es un rostro único, impenetrable. Es también un artista con múltiples caras. Takeshi Kitano encarna el nuevo cine japonés, el arquetipo del yakuza despiadado, pero también es un subversivo artista visual, un desatado comediante de televisión, un atizador de la conservadora sociedad japonesa.

Suele ser ya una norma casi habitual que figure algún trabajo documental dentro de esa sección tan interesante que es Seven Chances, este año la elección recayó en un habitual de Sitges y del formato de la no ficción como es Yves Montmayeur. Si en anteriores trabajos, la mayoría vistos en el festival, el francés disecciono figuras y corrientes cinematográficas como Takashi Miike (Electric Yakuza, Go to Hell!), Hayao Miyazaki y la Ghibli (Ghibli et le mystère Miyazaki), el nuevo cine fantástico español (Viva la muerte! Autopsie du nouveau cinéma fantastique espagnol), Guy Maddin (The 1000 Eyes of Dr Maddin) o la imagen de la mujer asiática en el cine de acción (Dragon Girls! Les amazones pop asiatiques), en esta ocasión su mirada recayó en esa figura de contornos casi poliédricos que es Takeshi Kitano.

Curioso y algo contradictorio el recibimiento que ha tenido en nuestro país la obra de Takeshi Kitano, como viene siendo habitual los primeros ecos de su cine vinieron tarde y de forma algo atropellada, fue en el año 1993 en donde por primera vez se pudo ver en un festival patrio, curiosamente en Sitges, una película suya, en esta ocasión Sonatine, a continuación vino un prestigio tan merecido como algo desmedido dentro de ese curioso y ambivalente ámbito de festivales y circuitos de exhibición en V.O con películas fundamentales a la postre en su carrera como fueron Hana-bi, El verano de Kikujiro, Dolls o Zatoichi, esa especie de beneplácito desapareció del día a la noche en el momento que el director japonés entra en un proceso de autocrítica autoral extrema y nada complaciente, primero con una trilogía del absurdo compuesta por Takeshis’, Glory to the Filmmaker! y Achilles and the Tortoise y después con una oscura y desencantada vuelta al subgénero yakuza con la magistral trilogía Outrage. A tal respecto Citizen K no deja de funcionar a modo de un apéndice algo funcional, al igual que en anteriores trabajos de Yves Montmayeur, todos ellos de poco más de una hora de duración, más que el estudio de una trayectoria completa entendida como tal el documental queda supeditado en referencia básicamente a una entrevista concedida por el propio Kitano, alrededor de ella habrá diferentes apuntes interesantes sobre las reflexiones lanzadas por el propio artista hacia su obra, sin embargo la sensación final será la de estar ante un documento en donde resulta más interesante el propio artista en cuestión, con muchas facetas aún desconocido para el público occidental, que la de un trabajo percibido como algo mecanizado e incompleto en referencia a su supuesta didáctica, en tal sentido Yves Montmayeur sabe indagar en aspectos poco comunes del material que maneja pero tiene más de un problema a la hora de saber cómo exponerlos sin otorgar una cierta sensación de estar ante un documental más concebido y direccionado a ser una especie de apéndice de naturaleza inacabada que indaga en recovecos poco transitados que en el propio estudio completo de la obra de un artista.

Valoración 0/5: 2’5

 

The Superdeep

1984, en el Círculo Ártico. Ubicado a 12.000 metros bajo el suelo, el Kola Superdeep es el mayor laboratorio secreto de la Unión Soviética. Unos meses después de su inauguración, diversos científicos registran allí voces y gritos de origen desconocido. El laboratorio es clausurado, enviando a un equipo de investigación liderado por Anna para averiguar qué se esconde exactamente en el pozo más profundo del planeta.

El cine de terror proveniente de Rusia que indaga en el concepto de la visita alienígena tuvo una doble presencia este año en Sitges, ambas películas situadas en los años ochenta, y nada complacientes con la precariedad del régimen de aquella época,  se apropian de alguna manera de conocidos arquetipos narrativos provenientes del cine de género estadounidense, si por una parte la notable Sputnik de Egor Abramenko nos plantea en base a un estimulante ejercicio de terror y ciencia ficción una curiosa y hasta cierto punto interesante apropiación del concepto del astronauta en cuyo regreso a la tierra trae algo aparentemente peligroso en su interior, The Superdeep se presenta como otra variación más, de naturaleza bastante más tosca, en referencia al monstruo o alienígena que es despertado de su letargo por parte de la indagación científica del ser humano.

The Superdeep se presentó en Sitges como primicia mundial aunque la sensación que a un servidor le quedo fue más bien la de estar ante una especie de work in progress en donde es muy fácil percibir su condición de subproducto que a duras penas llega al nivel de una prototípica serie B. Tampoco fue de gran ayuda que la película presentada en Sitges fuera a través de una copia doblada al inglés de una forma excesivamente estridente, casi teatral, rozando en ocasiones y de forma involuntaria el tono caricaturesco. Posiblemente estemos en un momento del fantástico en base a su saturación en que ya no valga la sola referencia a clásicos a la hora de justificar un producto, en tal aspecto The Superdeep queda vertebrada básicamente en función al desarrollo de conceptos vistos en clásicos como Alien, The Thing y otros muchos, dicha digamos pleitesía también podría ser aplicable en este caso a la utilización de unos efectos especiales casi artesanales en donde predomina el látex a lo digital, expuestos en base a un look ochentero a semejanza de títulos pretéritos, sin embargo dichos artilugios no disimulan una aproximación que deviene como bastarda y farragosa en lo relativo a intentar escanear estándares genéricos provenientes del cine USA sin saber a ciencia cierta cuál es su propia naturaleza, aquí principalmente en lo concerniente a no saber hace mínimamente verosímil lo inverosímil. Para más inri a The Superdeep le falta acción y gore y le sobra bastante metraje, razón de más para intuir que sus responsables han intentado elevar la mirada muy por encima de unas posibilidades reales que dada la modestia, muy mal disimulada del producto, apenas logra elevarse a pocos metros de ras de tierra.

Valoración 0/5: 1’5

Crónica Festival de Sitges 2020. Día 8

The Last Journey of Paul W. R.

En un futuro próximo, las temperaturas han alcanzado nuevas e insoportables cotas. Casi toda la fauna se ha extinguido, cientos de millones de personas se han convertido en refugiados climáticos y las reservas de petróleo, carbón y gas se han agotado. A medida que la misteriosa Luna Roja se acerca peligrosamente a la Tierra, solo un hombre puede salvar el mundo: su nombre es Paul W.R.

En estos últimos tiempos los estrenos mundiales vistos en festivales de cine como el de Sitges no eran precisamente una garantía de calidad con respecto al producto en cuestión, digamos que era más bien todo lo contrario, en su gran mayoría solían ser películas que no habían podido encontrado una oportunidad mejor en otros certámenes de un mayor empaque publicitario teniendo que acudir a certámenes de una segunda línea de flotación para su promoción, a tal respecto Sitges con sus inconvenientes y sus ventajas lo es. Este año en el certamen hubo un número mayor de estrenos mundiales menos malos de lo habitual, la coyuntura que provoco la suspensión de muchos festivales previos a Sitges propiciaron un cupo mayor de lo habitual elevando tímidamente la calidad de muchos trabajos que veían por primera vez la luz en una pantalla de cine como resulto ser la curiosa opera prima del francés Romain Quirot titulada The Last Journey of Paul W. R.

The Last Journey of Paul W. R. fue otras de las interesantes óperas primas francesas vistas este año en Sitges, un film que tiene la parcial virtud de aproximarse con cierta originalidad a la temática de los últimos días del apocalipsis y como el ser humano se tiene que enfrentar a ello, en la mayoría de los casos este concepto ha estado expuesto en diversas películas a través de una premisa en donde por medio de un Macguffin predominaba una especie de cuenta contrarreloj como se podía ver en la apreciable Miracle Mile de Steve De Jarnatt, en otras muchas como por ejemplo la australiana These Final Hours de Zak Hilditch, la canadiense Last Night de Don McKellar o la más autoral 4:44 Last Day on Earth de Abel Ferrara el mal era ya irreversible y la disyuntiva de los protagonista se desarrollaba en la medida de cómo aprovechar y afrontar de forma algo lúdica las últimas horas de su existencia antes de producirse el cataclismo. The Last Journey of Paul W. R. coge de forma parcial ambos conceptos pero a través de una mirada totalmente diferente a lo anterior colindando de forma muy recurrente con lo poético y muy especialmente con lo reflexivo en base a la advertencia que intenta exponer. La acción, con ciertas texturas derivativas al comic y muy especialmente al Métal Hurlant en referencia a su estética, toma conceptos de forma tímida de la ciencia ficción apocalíptica y desértica al uso para jugar y revertir dichos código y clichés que aquí serán expuestos a modo de fábula intimista de un tono inevitablemente fatalista en donde el mensaje de índole ecológico, aquel que nos dice una vez más que la humanidad está destruyendo poco a poco el mundo, está muy presente, a tal respecto y de forma algo afortunada Romain Quirot sale relativamente airoso de ese farragoso subrayado tan habitual en este tipo de películas de claro tono concienciador.

Valoración 0/5: 2’5

 

 

Mosquito State

Agosto de 2007. Aislado en su austero ático con vistas a Central Park, el analista de datos de Wall Street Richard Boca ve patrones siniestros. Sus modelos informáticos se están comportando de manera errática, igual que los enjambres de mosquitos que se reproducen en su apartamento, una plaga que ayuda a su derrumbe psicológico.

El cineasta polaco-estadounidense Filip Jan Rymsza conocido principalmente por ser responsable de la restauración de ese film perdido e inacabado que es The Other Side of the Wind de Orson Welles presento a concurso la cinta Mosquito State, film que desato, como ocurrió semanas antes en el Festival Venecia, una en parte muy comprensible disparidad  de opiniones con respecto a lo que fue su acogida.

Evidentemente con el visionado de Mosquito State como buen relato de índole kafkiano que pretende ser a un servidor le vino a la mente retazos muy evidentes del cine de David Cronenberg, su narrativa nos deriva a un progresivo y degenerativo descenso en picado a estados mentales y físicos cada vez más alterados como bien pudimos ver en la fundamental The Fly del director canadiense, a través de ello somos testigos de cómo su protagonista, un Beau Knapp que está más cercano al Nicolas Cage de Vampire’s Kiss que al Jeff Goldblum del film de Cronenberg , utiliza una obsesión de tono enfermizo hacia los insectos que invaden su lujoso apartamento para crear a partir de su comportamiento un modelo analítico tan alternativo como sofisticado a la hora de intentar predecir los mercados financieros. La película, de una muy recargada caligrafía visual, sin embargo actúa más en lo relativo a ser una especie de alegoría retorcida que nos retrata masculinidades en crisis que fluctúan con respecto a un declive capitalista que está a punto de hacer acto de aparición, en concreto el shock financiero del año 2008, a tal respecto el film de Filip Jan Rymsza se acerca más al concepto expuesto en el American Psycho de Mary Harron que al de cualquier otro apartado derivado de un apocalipsis orgánico. La metáfora o fábula física en relación a los mosquitos y su conexión con la sangre humana en lo relativo a la asociación del insecto con la enfermedad no termina de estar adecuada a un relato posiblemente demasiado ambicioso en referencia a sus postulados, terminando por estar ante una historia algo difusa, viniendo a representar ese tipo de relato que te quieren explicar demasiadas cosas pero que ninguna de ellas terminan por llegar a buen puerto. En todo caso dicho desplome acaba percibiéndose como más social que físico en lo concerniente a mostrarnos el final de una era de capitalismo feroz, o por lo menos de las cosas y comportamientos tal y como se entendían hasta un determinado momento. Lástima que el exceso de simbolismos, en cierta manera muy evidentes pero muy poco conceptuados e incapacitados a la hora de fusionar y desarrollar ideas, termine por desbaratar una analogía o metáfora que da la sensación de no atreverse a ir hasta el final de su en un principio atrayente enunciado.

Valoración 0/5: 3

 

 

Historia de lo oculto

Faltan 60 minutos para la última transmisión de Midnight, el programa de periodismo más famoso de la televisión. Esta noche es Adrian Marcato, quien podría exponer una conspiración que vincula al Gobierno con un Aquelarre real.

Por fortuna en los festivales de cine y por increíble que parezca aún existe un pequeño resquicio para el descubrimiento de obras en apariencia desconocidas que suponen en base a su ingenio e imaginación toda una sorpresa no prevista para el espectador, este atípico año y posiblemente debido a la ausencia de películas evento Sitges tuvo que recurrir casi por obligación a incidir en pequeñas producciones de las cuales muchas atesoraban suficientes atributos artísticos como para ser resaltadas y otorgarles ese adjetivo tan mal utilizado hoy en día de descubrimiento, en ese aspecto la argentina Historia de lo oculto fue indiscutiblemente una de esas sorpresas agradables que para bien cogieron desprevenidos a la mayoría de espectadores presentes en el certamen.

Posiblemente el mayor acierto de la película de Cristian Ponce resida en el hecho de como a estas alturas en donde parece estar ya todo inventado o transitado dentro del fantástico surja un talento que intente exponer un relato que pese a las evidentes referencia que atesora huye conscientemente de ciertos códigos preestablecidos dentro del género para ir de alguna manera por libre. Historia de lo oculto en tal aspecto constituye toda una extrañeza que huye de lo preestablecido para tomar un muy atípico y sugerente camino, partiendo del modelo del docudrama a modo de programa televisivo de investigación de índole fantástico narrado en tiempo real, como vimos en la seminal Ghostwatch de Lesley Manning, veremos a distintos personajes deambular alrededor de secretos y revelaciones a cual más misteriosas, también percibiremos desde la distancia en lo concernientes a una formas de índole casi retro-futurista otra película fundamental que indagaba en el thriller psicológico persecutorio como era Invasión de Hugo Santiago Muchnik. El film de Cristian Ponce tiene la particularidad de no solo proponernos una trama periodística de índole conspiratorio, será la inclusión del elemento fantástico y esotérico en la trama lo que otorgue a Historia de lo oculto una peculiar particularidad y posiblemente la etiqueta de película de culto en un futuro no muy lejano pues atributos los tiene de sobra para ello. Esa relación entre el satanismo y el poder de unas ocultas élites que están a punto de tomar el mando institucional nos son mostradas a través de esos programas de TV en blanco y negro típicos de los años 70 de forma inteligente en base a situaciones distorsionadas de la realidad en donde cualquier coincidencia por pequeña que sea con la del pasado no resulta ser baladí. En base su amalgama genérica de periodismo, ocultismo, distopía retro futurista e incluso retazos del folk horror, mezcla de conceptos que evidentemente pueden producir algo de confusión a una trama que posiblemente necesite de más de un visionado para su completo entendimiento, Historia de lo oculto, que termina estando más enfocada en relación a la palabra que en la acción propiamente dicha, acaba siendo un film que pese a su modestia atesora como principal virtud eso cada vez más complicado de ver dentro del género fantástico que es una originalidad, que por momentos deviene como desconcertante, que sabe sacar el máximo recurso posible en lo relativo a su innegable creatividad.

Valoración 0/5: 4

 

Viy

Un joven sacerdote debe pasar tres noches velando el cadáver de una bruja. Durante ese tiempo, toda clase de horrores pondrán a prueba su fe y su cordura.

Dentro de los clásicos vistos este año en Sitges la cinta Rusa Viy de Georgi Kropachyov y Konstantin Yershov tuvo un muy agradecido acomodo dentro de la sección Seven Chances, un film que no deja de ser una rara avis dentro del contexto histórico del fantástico europeo y que viene a representar, y en parte a paliar, el desconocimiento de una gran parte de público hacia el cine de género ruso de los años 60 y 70, más activo en lo relativo a su faceta de ciencia ficción que la de un terror aquí planteado desde una mirada hacia un folclore local que se emparentaba de alguna manera a las producciones góticas que se estaban realizando ese mismo periodo de tiempo en otras cinematografías.

Como esplendida fabula folklórica que es Viy, que bien mirado podría figurar perfectamente como un capitulo bastardo del fundamental El Manuscrito encontrado en Zaragoza de Jan Potocki, un servidor sigue siendo de la opinión que su desbordante fantasmagoría final, clara deudora del imaginario artesanal de Ray Harryhausen, viene a representar uno de los momentos cumbre en lo concerniente al fantástico europeo. La película de Georgi Kropachyov y Konstantin Yershov adapta de forma bastante fiel según algunas fuentes un cuento corto del escritor de origen ucraniano Nikolai Gogol que vio la luz por vez primera el año 1835 incluido en una recopilación de relatos titulada Migorod. Viy, sustentada en base a una leyenda ucraniana, que curiosamente sirvió de inspiración a Mario Bava a la hora de realizar su icónica Black Sunday , viene a representar de forma meridiana la representación de la fantasía popular aplicada en su traslación a la gran pantalla al prestigio cultural asociado al nombre de Nikolai Gogol, el resultado termina siendo una película modesta en medios aunque no en relación a su desbordante faceta creativa, un cuento de brujas en un principio más cercana al divertimento fantástico, dado en gran medida a sus ligeros apuntes livianos de humor, e incluso en lo relativo a una velada crítica al autoritarismo feudal extrapolable a otros ámbitos sociales de la época, que a una narrativa gótica proveniente de la Europa occidental percibida como más adulta y menos fabularía en lo concerniente a un tono más oscuro y sexualizado. Viy viene a ser esa clase de películas que dada su naturaleza inclasificable de cuento de hadas perverso con un antihéroe como protagonista principal atesora una meritoria atmósfera irreal y onírica, pasando a engrosar la lista de aquellos films que por desgracia no tuvieron ni referentes ni continuidad, películas que terminaron siendo una especie de islotes que sin embargo atesoraban una identidad formal muy propia destinada con el paso del tiempo a ser redescubiertas y reivindicadas en su justa medida.

 

Valoración 0/5: 4’5

 

The Education of Fredrick Fitzell

Con un trabajo corporativo, pareja estable y una madre enferma, el encuentro casual de Fred con un hombre de su juventud resulta en recuerdos aterradores. Poco a poco, va desentrañando un misterio oculto durante años sobre una niña desaparecida, una droga llamada Mercury y una criatura aterradora, que le ha acompañado en cada paso del camino. Pasado, presente y futuro se van cruzando, y Fred comienza a explorar las vidas posibles que podría llevar. ¿Cuál elegiría?

Ocho años han pasado para el realizador canadiense Christopher MacBride volviera a ponerse detrás de las cámaras tras debutar en 2012 con The Conspiracy, uno de los mejores y más interesantes mockumentarys realizados en los últimos años, con este estimulante primer trabajo en la ficción titulado The Education of Fredrick Fitzell MacBride se adentra en un drama existencial de tono onírico y fantástico que transita a través de diversas realidades paralelas y la posibilidad de poder incidir y reflexionar a través de ellas.

The Education of Fredrick Fitzell bascula principalmente en base a ese concepto que todo mortal hemos tenido en algún momento de nuestras vidas en mayor o menor medida, el preguntarnos, ya con un bagaje extenso en lo relativo a nuestra existencia, a nosotros mismos que derroteros hubieran trancurrido por nuestras vidas de haber tomado decisiones diferentes a las finalmente elegidas, Christopher MacBride partiendo de esa premisa argumental ofrece un drama con texturas de thriller alucinógeno de un claro tono existencial, el elemento fantástico para que el protagonista se adentre en estas dobles o triples realidades estará causado o representado por mediación de una droga de diseño conocida como Mercurio que permite de alguna manera ampliar la mente y su conciencia a los personajes que decidieron tomarla tanto en el pasado como en el presente, un apunte argumental que nos remite a la siempre reivindicable Jacob’s Ladder de Adrian Lyne con respecto al concepto de supuestas vidas vividas con posibilidad de poder reconfigurarlas. En estos últimos años a la hora de enfrentarnos a relatos que manipulan el espacio tiempo siempre ha habido un temor, al menos en lo que concierne a un servidor, a la hora de enfrentarte a un relato que es consciente de su naturaleza criptica y que necesite seguramente de más de un visionado para poder entender del todo bien esas narrativas laberínticas que forman parte de la historia, como ejemplo con respecto a esta tesis me viene por ejemplo a la cabeza películas como el Endorphine de André Turpin o el Donnie Darko de Richard Kelly, afortunadamente la intención de Christopher MacBride con respecto a The Education of Fredrick Fitzell es la de no aturdir al espectador por mucho que la física cuántica esté muy presente en un relato que más que detenerse en explorar las posibilidades materiales de alterar todas las vidas que podría tener un ser humano, o en las consabidas segundas oportunidades, indaga en la reflexión casi intimista de alguien que atesora el don de ser consciente de todas y cada una de las realidades creadas a partir de lo que han sido sus propias decisiones, un film que decide detenerse más en lo emotivo que en lo laberintico exponiendo la ambivalencia de esa percepción que solemos tener de lo entendible como realidad.

Valoración 0/5: 3

Crónica Festival de Sitges 2020. Día 7

Wendy

Wendy y sus hermanos conocen a un extraño chico llamado Peter, que los lleva a su isla, un mundo sin adultos, en el que los juegos de infancia duran eternamente. Perdida en una isla misteriosa donde el tiempo y el envejecimiento se han detenido, Wendy debe luchar para salvar a su familia, su libertad y al espíritu alegre de la juventud, del peligro mortal de crecer.

Han tenido que pasar ocho años para que Benh Zeitlin volviera a ponerse detrás de las cámaras tras su alabada y premiada opera prima Beasts of the Southern Wild, razón de más para que Wendy fuera una de las películas más esperadas de esta edición del Festival de Sitges, un film en donde se vuelve a reincidir en una muy particular reformulación del imaginario infantil, un concepto artístico que con tan solo dos trabajos realizados por parte de Zeitlin parece haberse ya convertido en todo un rasgo autoral marca de la casa plenamente identificativo.

Posiblemente el gran déficit que podemos encontrar en una película de las características de Wendy venga dado en la medida de percibir por parte del espectador como un discurso, o una determinada mirada narrativa y formal, apenas ha evolucionado  a lo largo de ocho años, en cierta manera Wendy de sustenta en base a postulados casi idénticos a los mostrados en Beasts of the Southern Wild, el problema sin embargo radica en comprobar como en una funcionaba, en parte dado lo novedoso de la propuesta, y en otra no, por consiguiente la repetición de la jugada termina siendo percibida como claramente fallida. Con una estética similar al estilo Terence Malick y bajo el concepto de reformular el cuento de Peter Pan en Wendy se vuelve a incidir en simbolismos varios adyacentes al imaginario de los niños, en esta mirada del infante ante la disyuntiva del crecimiento Benh Zeitlin vuelve a apostar por una narrativa en donde predomina básicamente lo visual y lo pretendidamente trascendental del mensaje en lo referido a apartarnos de lo cotidiano para trasportarnos a una segunda realidad supuestamente más idílica provista múltiples elementos fantásticos expuestos en base a una mirada tan emotiva como melancólica, especialmente visible en lo concerniente a una música que se empeña en remarcar en base a subrayados, en forma de continuos in crescendos, la supuesta importancia de una historia en donde solo se percibe, desde la lejanía, ligeros apuntes novedosos al mito como por ejemplo el concepto del feminismo en el liderazgo de un grupo, lamentablemente dicha apuesta por la poética de las imágenes deviene como difusa, con cierta textura a capricho lírico y en el peor de los casos con la sensación de estar contada a través de una concepción autoral en donde parece predominar la impostura de una reflexión, que a diferencia de la opera prima de su autor, no logra ser todo lo majestuosa que en un principio pretender creer ser.

Valoración 0/5: 2

 

La nuée

Para salvar su granja de la bancarrota, una madre soltera comienza un negocio de cría de saltamontes comestibles. Pronto desarrolla una relación extraña y obsesiva con ellos.

Otra de las varias óperas primas presentes en la sección oficial a concurso este año en Sitges fue la cinta gala La nuée de Just Philippot, película que venía apadrinada con el sello de la Semana de la Crítica del Festival de Cannes y que vino a confirmar el gran momento actual que parece estar atravesando el cine de género fantástico proveniente de Francia.

La nuée certifico de buenas a primeras ese tipo de cine de tono autoral presente este año en el festival que tan bien, a diferencia de otros muchos, sabe utilizar e insertar la metáfora dentro del relato, en esta ocasión la de un drama familiar con claros contornos fantásticos, a tal respecto el mensaje alegórico del film adquiere una curiosa concomitancia con los tiempos actuales del Covid 19 a la hora de mostrarnos como la mano del hombre está forzando de alguna manera a la naturaleza en base a la alteración de sus propios recursos. Si a lo largo de la historia del género fantástico el concepto de catástrofe natural y animal ha estado representada en la mayoría de ocasiones a través de una causa científica en La nuée dicha manipulación parte de unos parámetros algo distintos en base a pervertir el consabido concepto del mad doctor mostrado aquí a través de una idea de índole mucho más minimalista y realista en lo referido a una vertiente social, el de una madre soltera y la precariedad en la que se mueve, excelente interpretación a cargo de Suliane Brahim, dispuesta a todo con tal de poder salvaguardar un negocio de crías de saltamontes comestibles que viene a ser el principal sustento de su familia. La reflexión que deriva en advertencia a modo de alegoría en clave medioambiental que nos lanza Just Philippot viene dada en la medida de justificar o no una maternidad percibida como negligente a la hora de cruzar ciertos límites de responsabilidad. Esa obsesión por parte de la protagonista a la hora de alimentar de una manera muy especial a los saltamontes en base a aumentar cada vez más su producción y salvarle de la bancarrota hará que entre en escena en la parte final de la película el elemento fantástico de un modo casi bíblico-apocalíptico, y lo hace de una manera admirable en función de mostrar de una forma muy comedida e incluso realista una causa/efecto, la revolución animal hará acto de presencia de forma abrupta como fiel testigo y juez implacable en referencia a la desmedida ambición humana, este último concepto con un buen uso y sentido de la digitación, aquí expuesta casi a modo de un emotivo guiño cinéfilo a aquellas entrañables producciones de plagas de índole catastrofistas que tan bien sabia orquestaba en su día Irwin Allen.

Valoración 0/5: 4

 

Post Mortem

Post Mortem nos sitúa en un frío invierno de 1918, Tomás, un joven que se dedica a la fotografía post mortem, termina en un pequeño pueblo húngaro. Los extraños ruidos nocturnos, la hostilidad, las muertes misteriosas y las figuras sombrías que aparecen en sus fotografías lo impulsan a largarse cuanto antes. Pero Tomás regresa a la aldea para investigar las intenciones de los fantasmas y poder encontrar una manera de librarse de ellos.

Curiosa cuando menos la forma que tiene la producción húngara Post Mortem de introducir y exponer el horror dentro de un relato que parte en un principio de unos postulados que se sustentan en lo relativo a unas tradiciones fantasmagóricas de índole local expuestas casi a modo y semejanza de un tren de la bruja que parece propio de una película de James Wan, o lo que es aún peor, de cualquier producción media baja de la Blumhouse.

Posiblemente el que tengamos unos parámetros predeterminados en nuestra mente en referencia al fantástico haga que Post Mortem, vendida de forma algo engañosa como el primer film de terror realizado en la historia de su país, provoque una cierta incredulidad y extrañeza hacia el espectador experto en la diversidad de narrativas dentro del género a la hora percibir como está formulada. El film de Péter Bergendy viene a ser un relato de fantasmas de época supuestamente gótico que indaga en el folklore local pero que no recurre a lo sutil e insinuado, como suele ser preceptivo en estos casos, y si en lo aparatoso, a tal respecto se abusa tanto de retóricas tan habítales dentro del género de terror contemporaneo como por ejemplo el consabido y abrupto golpe de sonido o la agresión invisible grandilocuente que al final seguramente estemos ante la comedia involuntaria de este Sitges 2020. El problema viene dado en la medida que ver como esa montaña rusa pasada de vueltas que es Post Mortem no termina de ser del todo consciente, o al menos un servidor tuvo ese sensación, de su naturaleza de producto derivativo del splatstick y por consiguiente de una comedia de tono macabro en donde la presencia reiterativa del muerto esta tan presente a un nivel escénico que pierde por completo su función amenazadora, llegando incluso a satirizar involuntariamente el concepto de inmortalizar cadáveres en base a fotografiarlos y mostrarlos repetidamente en referencia al trabajo del protagonista principal. El film de Péter Bergendy, que incluso se permite el lujo de saquear una de las escenas más controvertidas del The House That Jack Built de Lars von Trier, viene a representar de forma meridiana como con una buena utilización de los efectos especiales o un apreciable sentido estético no basta si la dirección en base a su narrativa no sabe mesurar convenientemente dichos artificios, convirtiendo a la película en un Deus Ex Machina perpetuo que evidencia una total y alarmante ausencia de equilibrio en lo relativo a su forma y fondo.

Valoración 0/5: 1’5

 

À Meia-Noite Levarei Sua Alma

Un siniestro enterrador que se hace llamar Zé do Caixao quiere encontrar a la mujer perfecta para que su estirpe se prolongue. Para ello va secuestrando, aterrorizando y torturando a diversas mujeres.

Los clásicos presentes en la siempre interesante sección Seven Chances tuvieron una de sus representaciones con la proyección en 35 milímetros de À Meia-Noite Levarei Sua Alma de José Mojica Marins, primera incursión en el personaje Zé do Caixão por parte del icónico realizador brasileño fallecido este mismo año.

Posiblemente más importante y fundamental en referencia a poder ubicarla dentro de un específico contexto histórico que por sus propios méritos artísticos À Meia Noite Levarei Sua Alma fue una clara pionera en un país sin apenas tradición hasta ese momento en el género terrorífico viniendo a representar en su día una especie de respuesta, que atesoraba un cierto tono comercial irreverente y desprejuiciado, a aquella corriente tan determinante dentro del cine brasileño de la época como fue el Cinema Novo. El film de José Mojica Marins se inscribe pues dentro de ese tipo de cine en donde lo puramente artesanal, en el buen sentido de la palabra y desde todas sus vertientes posibles, se erige como motor principal del relato a la hora de paliar las muy evidentes carencias presupuestarias que en este caso dan la impresión de colindar con lo más puramente amateur, en cierta manera esta obligatoriedad fuerza a la reinvención de recursos dentro de un imaginario propio insertado y expuesto a la perfección en la creación, original y revolucionaria, de un personaje hasta aquel entonces sin precedentes dentro de la historia cine del cine de terror como fue Zé do Caixao . En À Meia-Noite Levarei Sua Alma encontraremos pocos elementos de índole sobrenatural dada su clara naturaleza de tono nihilista. Definida por algunos como un película de terror moral y materialista estamos ante una historia en donde una pequeña localidad queda sometida y atemorizada a merced de un sepulturero que en realidad se mofa de los ritos y las creencias populares, a la postre un relato de fantasmas sin fantasmas que convierten a la trasgresora y referencial obra de José Mojica Marins en la primera película que dio origen a todo un icono y referente de la cultura popular brasileña y por ende del cine fantástico mundial.

Valoración 0/5: 3’5

 

Come True

En Come True vemos como una adolescente de carácter rebelde vive atormentada por unos oscuros sueños que espera solucionar a través de un estudio universitario sobre dicha dolencia, una terapia que espera que la ayude a deshacerse de sus pesadillas, sin embargo dicho tratamiento se convierte en el canal de un nuevo descubrimiento bastante oscuro.

Una de las agradables sorpresas vistas este año en Sitges correspondió al segundo trabajo tras las cámaras del realizador Anthony Scott Burns titulado Come True, film que indaga en ese concepto onírico tan amplio y dado a multitud de interpretaciones como es el sueño que deriva en pesadilla y que se filtra y sobrepasa ese ámbito cotidiano entendible como realidad.

Anthony Scott Burns, que ejerce de auténtico hombre orquesta en la película y que proviene de esa cantera inagotable de jóvenes directores canadienses aquí bajo la producción ejecutiva de un autor tan recurrente en Sitges como es Vincenzo Natali, nos muestra en Come True un estimulante thriller psicológico cuya premisa inicial de tono científico se vuelve cada vez más onírica conforme se va desarrollando una trama que constituye  uno de los estudios más perturbadores y magnéticos, en referencia a la ambivalencia de la mente humana, vistos este año en el festival. El concepto de la pesadilla dentro del género fantástico ha basculado mayoritariamente bajo arquetipos en donde intentar diferenciar la realidad de las pesadillas se erigía como principal motor narrativo a la hora de plantear historias dentro de ese submundo tan interesante y lleno de posibilidades. Hace unos años Rodney Ascher tras su notable Room 237 se adentraba con otro documental titulado The Nightmare, no tan conseguido como el anterior, en el estudio y seguimiento a ocho personas con respecto a la parálisis del sueño que padecían, a tal respecto Come True, que transita por vericuetos argumentales bastantes similares, expone el concepto de no dormir como claro epicentro a la hora de desencadenar de una serie de acciones de terminan derivando en viajes oníricos de tono gélido que buscan desesperadamente un halo de luz a través de la mente de una joven, una excelente Julia Sarah Stone, que padece dicha enfermedad . Un relato plagado de elipsis oníricas y expuesto a través de una oscura y preciosista puesta en escena de tono simétrico, en el nuevamente entramos en la interrogante de la tangibilidad o no del sueño, el saber a ciencia cierta que corresponde verdaderamente a la realidad y que a una ficción posiblemente orquestada a través de una mente cautiva en lo concerniente a la manipulación del sueño, tesis perfectamente mostrada en una conclusión que en base a una naturaleza supuestamente sorpresiva, y a diferencia de otras mucha películas semejantes, no modifica o reinterpreta lo anteriormente mostrado si no que reafirma y otorga más solidez al valor alegórico del relato. En Come True también existen apuntes y referencia muy palpables a otras películas importantes dentro del fantástico de estos últimos años desarrollados en base a laberintos oníricos adyacentes a la mente humana como por ejemplo el Donnie Darko de Richard Kelly o el It Follows de David Robert Mitchell, en todas ellas seremos testigos a fin de cuentas de la dolorosa imposibilidad existente en la adolescente a la hora de poder transitar por un imaginario percibido como incontrolable.

Valoración 0/5: 4

 

El hombre lobo y la bestia interior liberada, leitmotiv de Sitges 2021

La 54ª edición del SITGES – Festival Internacional de Cinema Fantàstic de Catalunya, que se celebrará del 7 al 17 de octubre de 2021, tendrá como leitmotiv la figura legendaria del hombre lobo como principal representante iconográfico del tema clásico de la bestia interior o la dualidad interna en el ser humano. Casualmente, en 2021 se cumplen diversas efemérides relacionadas como el 80º aniversario del estreno de El hombre lobo (The Wolf Man, George Waggner, 1941), una producción Universal protagonizada por Lon Chaney Jr.; así como también los 40 años del estreno de dos populares y renovadoras versiones del personaje: Un hombre lobo americano en Londres (An American Werewolf in  London, John  Landis, 1981) y Aullidos (The Howling, Joe Dante, 1981). Sin olvidar el medio siglo del estreno de La noche de Walpurgis(León Klimovsky, 1971), una de las más populares entregas del hombre lobo nacional, el Waldemar Daninsky interpretado por Paul Naschy.

El Festival de Sitges tratará asimismo este leitmotiv como imagen del Festival, con una retrospectiva de títulos y la publicación de un libro, en colaboración con la Editorial Hermenaute. La figura del Doctor Jekyll & Mister Hyde (la versión más filosófica y base literaria del tema), así como personajes colaterales relacionados con la dualidad hombre-bestia, como las mujeres felinas, diferentes seres zoomórficos o entidades duales de los cuentos tradicionales, serán estudiadas en el volumen y expuestas en la retrospectiva.

Crónica Festival de Sitges 2020. Día 6

 

The Book of Vision

Eva, una doctora y estudiante de medicina, descubre un manuscrito del siglo XVIII, que recoge las emociones, temores y sueños de multitud de pacientes. Al sumergirse en sus páginas, la joven se embarcará en un íntimo y sensorial viaje a través del tiempo.

Después de inaugurar la Semana Internacional de la Crítica del pasado Festival de Venecia la opera prima de Carlo Hintermann irrumpió con fuerza en Sitges con el principal reclamo, aparte de ser un producto de supuesta y elevada calidad arty, de ser una producción auspiciada bajo el amparo de Terrence Malick, ya no solo a un nivel de producción ejecutiva sino también por ser una clara deudora del estilismo cinematográfico del responsable de la estupenda A Hidden Life, algo que en cierta manera juega en contra de una película cuyas expectativas terminan estando algo por encima de lo que finalmente son sus resultados.

The Book of Vision, que atesora un incuestionable poder visual gratificante, termina siendo un film tan ambicioso como fallido en referencia a sus postulados, un relato bicéfalo narrado a través de dos tiempos que se interrelacionan en la medida de unir ciencia y emotividad. El debut en la dirección de Carlo Hintermann da la sensación de ser esa clase de películas en donde existe una continua confrontación en lo concerniente a lo que son unas imágenes y una narrativa que no siempre van cogidas de las manos, digamos que uno tiene cierta sensación de que dicho tono visual pretende sin conseguirlo contarnos bastante más de lo que en realidad ofrece un relato en apariencia sencillo, el problema viene dado en la medida de que por muy alumno aventajado que sea Carlo Hintermann por desgracia no es Terrence Malick, en tal aspecto esa amalgama de misticismo romántico y simbolismos de índole sobrenatural mal manejados pueden llevar a una cierta indigestión, o lo que es peor, a una pomposidad visual de tono vacuo. En ese terreno pantanoso se sitúa este viaje sensorial que es The Book of Vision, haciendo evidente que ese intento de preciosismo escénico no termina de ir acompañado por el guion firmado por el propio Carlo Hintermann y Marco Saura, este propone ideas y conceptos elevados que no terminan de estar convenientemente adecuados a la imagen, esa mirada a la naturaleza entendida como un primordial organismo viviente o la simbiosis e interactuación existente entre dos tiempos, temarios inherentes al imaginario de Terrence Malick, terminan siendo redundantes, y en el peor de los casos sobre explicativos, otorgando al film el dilema de ver como su preciosismo y su remarcable belleza escénica queda situada algo lejos de esa supuesta trascendencia de la que se cree poseedora.

Valoración 0/5: 2’5

 

Teddy

En los Pirineos franceses, Teddy sobrevive trabajando en un salón de masajes. Un día, a principios de verano, el joven es atacado y arañado por una bestia; probablemente, el lobo tras el que andan todos los granjeros del lugar. Al cabo de unas semanas, empieza a sentir cierta pulsión animal.

Teddy, el nuevo trabajo tras las cámaras de los hermanos Boukherma tras su interesante opera prima Willy 1er fue una de las cintas vistas este año en Sitges que atesoraban esa nomenclatura del sello Cannes Selects, la coyuntura hizo que el film tras no poder estar presente en el nonato certamen galo, seguramente incluida en algunas de sus secciones paralelas, viniera a Sitges de alguna manera virgen en referencia a visionados y opiniones previos, esa escasa información sobre ella hizo que en cierta forma se recobrara una sensación habitual, de cierto encanto, en los festivales de cine de antaño, el enfrentarse a una película libre de prejuicios e intoxicaciones por parte de terceros.

También posiblemente a todo ello, y no deja de ser algo sintomático en relación a cómo funciona en base a diversas sinergias la crítica actual, la comedia dramática Teddy causo una sensación de bastante disparidad y desubicación entre los asistentes a la proyección, algo que nos puede llevar a pensar que la crítica y el público de Sitges empieza a estar normalizado en lo relacionado a la asimilación ya habitual de films con referencia previa. Centrándonos en Teddy la película reformula el concepto tradicional del hombre lobo adolescente pero desde un prisma local muy particular, casi autóctono, en este caso no sería temerario el afirmar que Teddy sería lo más cercano a parecerse a una película de terror firmada por Bruno Dumont, a tal respecto encontraremos más de una similitud con la serie Li’l Quinquin, en ambos trabajos se nos sitúa en una comunidad rural francesa en donde confluyen una galería de personajes trazados por ese patrón de humor situado a medio camino entre la irreverencia y un humor absurdo en ocasiones colindante con un Cartoon al uso desvirtuado en relación a diálogos que dan la sensación de ser imposibles. Teddy utiliza ese elemento fantástico de la transformación en una bestia a la hora de extrapolar desde lo distendido de su tono una alegoría con texturas propias del coming age del inadaptado y la imposibilidad de este de formar parte de un contexto social predeterminado del que está excluido, tanto en lo referido a su forma humana como evidentemente animal, en este sentido podemos percibir aunque a través de registros totalmente distintos alguna que otra concomitancia con la notable As boas maneiras de Juliana Rojas y Marco Dutra. Teddy utiliza inteligentemente ese subtexto fantástico del subgénero de la licantropía relacionado con el cambio hormonal en la adolescencia en base a una mirada desvirtuada aquí expuesta a un nivel contestatario mostrada desde un tono de humor supuestamente vulgar pero provisto de connotaciones muy sutiles. Una película que certifica junto a otras, como bien se pudo comprobar este año en Sitges, el buen momento actual que parece estar atravesando el cine de género francés.

Valoración 0/5: 3

 

Black Bear

En una casa en un remoto lago en las montañas de Adirondack, una pareja entretiene a una invitada que busca inspiración para su película. El grupo cae rápidamente en un calculado juego de deseo, manipulación y celos, sin darse cuenta de que pronto sus vidas se volverán peligrosamente complicadas, mientras la cineasta busca una obra de arte que desdibuja los límites entre autobiografía e invención.

Proveniente del Festival de Sundance y con un claro marchamo genérico a la actual esencia de dicho certamen se presentó dentro de la sección Noves Visions la estimulante Black Bear, tercer trabajo tras las cámaras del realizador Lawrence Michael Levine tras películas tan a tener en cuenta como Gabi on the Roof in July o Wild Canaries, con Black Bear Levine, su mejor film hasta la fecha, nos ofrece una interesante y retorcida exploración en clave de metaficción del proceso de construcción y reconstrucción en lo concerniente a la creatividad del artista y el costo ocasionado en relaciones adyacentes que puede conllevar dicho acto.

Es complicado hablar de la narrativa de una película de las características de Black Bear sin desvelar parte del activo y atractivo que hacen de ella una propuesta tan singular como interesante, digamos que es esa clase de relatos en donde llegados a un punto determinado de una trama hasta ese momento bastante simple en referencia a su tesis, situada casi en el ecuador de la película, se reconfigura por completo y por fuerza reinterpreta todo lo visto anteriormente en base a una nueva trama con los mismos personajes, mismo escenario, pero reasignados en nuevos roles a modo de una película dentro de otra película atesorando esta última una narrativa por momentos criptica. Bajo las texturas de un drama psicológico con ciertos toques de un humor retorcido, beneficiado por la labor interpretativa de sus tres actores principales, especialmente en referencia a esa ya casi musa del cine independiente norteamericano que es Aubrey Plaza y el cada vez más en alza Christopher Abbott, presente también en el certamen en el Possessor de Brandon Cronenberg, Black Bear transita a través de una deconstrucción que conforme va avanzando se va volviendo más compleja y ambiciosa, de connotaciones escénicas claramente teatrales colindante con un tono casi Cassavettiano, a la hora de exponer el proceso de realización de una película independiente, a través de una película independiente como evidentemente manda los cánones, en donde se indaga en la ambivalente dinámica existente entre el autor y la musa y las estructuras de poder de dichas relaciones expuesto en base a un juego de espejos que da la sensación que querer jugar con espectador a la hora de discernir qué es lo real y qué es parte de la imaginación del personaje del escritor, a la postre el protagonista principal verdadero que maneja todas las cuerdas y que plantea un juego sin reglas que otorga un curioso sentido a este peculiar relato de naturaleza desestructurada.

Valoración 0/5: 3’5

 

My Heart Can’t Beat Unless You Tell It To

Dwight y Jessie están en desacuerdo sobre los cuidados de su frágil y enfermo hermano menor Thomas, que solo vive de la sangre humana. A Dwight le cuesta comprender que para que su hermano viva tengan que dejar tras de sí un reguero de cadáveres, pero cuando empiece a distanciarse de su familia, la implacable Jessie hará lo que sea necesario para mantenerlo en casa.

Viene siendo un denominador común en estos últimos años, algo que en Sitges es bastante visible, el ver como un número significativo de películas retuercen conceptos y parámetros del género fantástico a la hora de hablarnos de problemáticas de índole social, en su mayoría lindantes con el drama, el debut en la dirección de Jonathan Cuartas (Premio Citizen Kane a la dirección revelación) con la nada desdeñable My Heart Can’t Beat Unless You Tell It To, una variación muy sui géneris del concepto del vampiro, vendría a ser un buen ejemplo de ese posicionamiento en lo referente a la vertiente más agraciada de dicho termino.

El problema a la hora de aplicar dicho concepto antes citado es ver como muchos autores utilizan una mirada algo despectiva, casi situado por encima del hombro, hacia el fantástico en la medida de plantear la alegoría, en esta cuestión entraríamos en el eterno debate de cuál es la prioridad o justificación del relato en cuestión, la narrativa de genero que vertebra sutiles interpretaciones y matizaciones de otro ámbito o utilizar el fantástico, en la mayoría de veces de forma burda, como mera excusa a la hora de exponer la metáfora, en esta edición de Sitges hubo una película que ejemplarizaba a la perfección esta última aseveración como fue muy publicitada Relic, una de las películas que peor ha tratado el concepto puro del fantástico en estos últimos años. Podríamos llegar a la conclusión de que la modesta pero meritoria My Heart Can’t Beat Unless You Tell It To transita por unos territorios parecidos, sin embargo a diferencia del film de Natalie Erika James Jonathan Cuartas no distrae ni disimula a la audiencia, o lo que es peor engaña, en referencia a cuáles son sus auténticas motivaciones a la hora de plantear un discurso, a tal respecto el tema del vampirismo, un poco a la manera de la seminal Martin de George A Romero, es una excusa aquí casi anecdótica empleada en la medida de desarrollar, en base a una puesta en escena sobria, un seco y áspero drama familiar que nos cuenta la toxicidad que puede desprender en el ser humano la dependencia, también la exploración de hasta dónde puede llegar el compromiso hacia el vínculo consanguíneo y que estás dispuesto a sacrificar en base a la contradicción moral para poder hacerlo prevalecer. La revisión del mito vampírico expuesta en My Heart Can’t Beat Unless You Tell It To será pues algo difusa en relación a su vertiente más puramente fantástica, sin embargo será bastante lucida en la medida de mostrarnos un relato demoledor a modo de cruda deriva intimista sin subrayados acerca de ese grupo de desheredados de las sociedades que parecen estar excluidos de ese en muchas ocasiones quimérico sueño americano.

Valoración 0/5: 3’5

 

Jumbo

En Jumbo vemos como Jeanne, una joven mujer introvertida, vive en su casa con su madre y trabaja en el turno de noche como limpiadora en un parque de atracciones. Su madre quiere que conozca a un hombre, pero jeanne prefiere quedarse encerrada en su cuarto rodeada de cables, bombillas y piezas sueltas, creando versiones en miniatura de las atracciones de feria. En sus turnos nocturnos comienza a pasar cada vez más tiempo con una atracción a la que decide bautizar como “Jumbo”. Sus luces rojas la seducen poco a poco, lo que conduce a Jeanne a entrar en una nueva y compleja “relación”.

Al igual que la notable Teddy la opera prima de la realizadora belga Zoé Wittock Jumbo transita a partir de esos recovecos relacionados con la adolescencia en donde se indaga en referencia a diversas problemáticas adyacentes a ella, si en Teddy se utiliza un claro subtexto fantástico a la hora de exponer un rechazo social para con el protagonista el film de Wittock recurre de forma más clara a la metáfora, situada a medio camino entre realidad y la fantasía personal, a la hora de mostrar el concepto del despertar amoroso del adolescente como derecho ineludible en el ser humano.

Posiblemente lo mejor de Jumbo radique en el riesgo que supone recurrir a una alegoría poco usual en relación a exponerla a través de un discurso que parece muy obvio, el derecho a cualquier tipo de rol genérico y afectivo frente a una sociedad que juzga en base a su puritanismo expuesto a través de una idea o concepto anómalo de dicha sexualidad que dota al relato de una cierta particularidad. El film también indaga en el relato iniciático en referencia a como una primera historia de amor otorga al adolescente una independencia con respecto al núcleo familiar, unas coordenadas estas ya preestablecidas con demasiada frecuencia en este tipo de relatos, sin embargo dicha narrativa bicéfala es la que vertebra y le da un sentido común a un relato tan irregular como sugerente en ideas, esa atracción no normativa, derivada de la objetofilia, entre una adolescente y una maquina hace que evidentemente el relato fluctué en una línea divisoria bastante fina situada entre la fascinación que produce ese retrato del derecho a una identidad propia que se aleja del estereotipo y un tono que bordear de forma peligrosa el ridículo en base a lo naif, digamos que Zoé Wittock se queda entre dos aguas, curiosamente en algunos apartados de difícil manejo sale bastante bien parada en referencia a darle cuerpo a esa radicalidad como por ejemplo podemos ver en esa escena de sexo entre la protagonista y la atracción de feria que por momentos da la sensación de bordear imaginarios propios de David Cronenberg, hay otros sin embargo que caen en ese tono naif antes comentado difícil de justificar como esa conclusión que parece sacada del Muriel’s Wedding de P. J. Hogan y en donde se banaliza el mensaje. Posiblemente sea algo injusto con respecto a  esta relectura de la supuesta normalidad de lo afectivo que es Jumbo el tener la percepción de que podría haber hecho un director como por ejemplo el antes citado David Cronenberg, la fundamental Crash está muy presente en el relato, con el planteamiento del que parte Zoé Wittock, siendo una lástima que lo convencional que resulta ser su narrativa y formas a no lleguen a estar a la altura a lo arriesgado de su enunciado.

Valoración 0/5: 2

Crónica Festival de Sitges 2020. Día 5

Fried Barry

Barry es un bastardo drogadicto que es abducido por extraterrestres después de una de sus habituales juergas. El propio Barry se convierte en un pasajero de sí mismo cuando un alienígena asume el control de su cuerpo y lo lleva a dar un paseo por Ciudad del Cabo.

Partiendo de la génesis de un corto homónimo realizado en el año 2017 Ryan Kruger debuta en el largometraje con la cinta Fried Barry, una película que parte de ese concepto ya transitado con bastante frecuencia dentro del fantástico en base a la mirada del alienígena a nuestro mundos mediante la apropiación de un cuerpo humano, idea vista en films como por ejemplo Starman, Under the Skin o la divertida The Borrower de John McNaughton, película con la que guarda más de una similitud.

Fried Barry, comedia burda de género donde las haya, viene a engrosar esa lista de películas que dan la sensación de ser incapaces a la hora de poder disimular sus muy evidentes costuras de cortometraje, en cierta manera el film de Ryan Kruger nunca va más allá de lo que es su anecdótica premisa, la broma dura hasta que el espectador determine cuando es suficiente pues estamos ante un relato que reincide una y otra vez sobre la misma idea de la que parte, una abducción extraterrestre que deriva en un viaje embadurnado a través de grandes dosis de ácido, sexo y gore narrado en forma de epopeya psicotrópica. La síntesis del alíen confundido ante lo que le rodea y que se limita básicamente a imitar todo lo que ve en una denigrada Ciudad del Cabo será pues expuesta a través de una estética visual excesivamente cargada colindante con lo alucinógeno, de hecho el relato da la impresión de estar elaborada en lo relativo a una continua improvisación de situaciones que repetidamente satiriza en modo gamberro los vicios humanos. Posiblemente si existe una clase de película que requieran de una complicidad por parte del espectador esta es sin duda Fried Barry, sin ella el producto en cuestión difícilmente será soportable, esto último fue lo que le ocurrió a un servidor que buscaba algo más que el chiste fácil y soez, algo difícil de encontrar en una película de estas características en donde es complicado percibir algo parecido al desarrollo de un argumento, lo suyo es más bien una sucesión de gags cortados por el mismo patrón de irreverencia en base a una amalgama de tonos alucinógenos que coquetea en ocasiones con lo underground, un catálogo de supuesta incorreción política disfrutable únicamente si se acepta sin reservas el sentido de humor esgrimido por su director.

Valoración 0/5: 1’5

 

Marea alta

Laura ha perdido el control. Después de dormir con Weismar, el jefe de obra que se encarga de la construcción de una barbacoa en su casa de la playa, los otros dos trabajadores comienzan a actuar de manera extraña, lo que le provoca la sensación de que su intimidad está siendo violada. Cuando Weismar finalmente desaparece, Laura se ve obligada a dirigir por sí misma a los trabajadores. Sin embargo, se siente incapaz de ello, por lo que decide mantener una distancia y observarlos desde la seguridad de su hogar. Ignorando las llamadas de su marido, comienza a abusar del vino mientras espera el regreso de su amante.

Marea alta, el nuevo trabajo de la realizadora argentina Verónica Chen, presente en la sección Noves Visions nos ofreció esa otra parcela alejada del fantástico entendido como tal en donde se nos relata una incómoda historia de tono minimalista a modo de drama con ligeras texturas de thriller, a semejanza para hacernos una idea y salvando las lógicas distancias de cierto cine perpetrado por Michael Haneke en donde una perturbadora calma tensa terminan ocasionando una serie de acontecimientos tormentosos.

De alguna manera Marea alta, que atesora un empaque visual ciertamente atractivo, es una película vertebrada principalmente en relación a exponer diferentes reflexiones con respecto a los supuestos roles de poder que ocasionan fricciones entre distintas clases sociales, el relato empieza bajo conceptos genéricos muy reconocibles en donde una protagonista femenina ve invadida su intimidad por parte de terceros a un nivel casi territorial, esta parte nos puede llegar a recordar perfectamente a la reivindicable The Plumber de Peter Weir, a tal respecto dicha invasión, que paulatinamente va pasando del incomodo a la amenaza seria, nos sitúa por momentos en la prototípica home invasión de tono psicológico, sin embargo Verónica Chen intenta ir algo más allá de dicho concepto al intentar esgrimir supuesta reflexiones de claro índole moral e interpretaciones ambiguas en base a cuestiones tales como la legitimidad que otorga la sexualidad femenina frente al machismo o la colisión social existentes entre clases y géneros distintos y su repercusión dentro de las dinámicas de poder. En este sentido la conclusión de Marea alta abandona las interrogantes para ofrecernos una respuesta cuanto menos ambigua y muy abierta al debate, el concepto de revenge quedara aquí de alguna manera expuesto en base a dobles lecturas reinterpretando toda la narrativa anterior en relación a difusas cuestiones colindantes con el cuestionamiento sobre la moralidad de los protagonistas, unos personajes con los que el espectador se puede sentir, o no, identificados a la hora de entrar junto a ellos en un dilema ético.

Valoración 0/5: 2’5

 

L’ultimo uomo che dipinse il cinema

Renato Caso es uno de los ilustradores más importantes en la historia del cartelismo cinematográfico. En este documental, el dibujante nos abre su estudio para mostrarnos su colección personal y compartir los recuerdos de un arte casi olvidado.

Dentro de esa clase de documentales vistos este año en Sitges que inciden en la pedagogía de múltiples ramificaciones existentes dentro del ámbito cinematográfico destaco por encima del resto el retrato de Renato Caso que expone L’ultimo uomo che dipinse il cinema, un estudio a través de los carteles de películas que el artista diseño, de hecho estamos ante un recorrido simultaneo que abarca distintas facetas, la de la promoción cinematográfica en base a la publicidad de sus ilustraciones y la de la misma historia del arte en relación a la mirada y trayectoria de un artista.

L’ultimo uomo che dipinse il cinema, que formaría un buen programa doble junto a El hombre que diseñó España de Andrea G. Bermejo y Miguel Larraya, ejemplariza el documental teórico como parte esencial de un estudio didáctico, a través suyo encontraremos un tono de evidente nostalgia a semejanza de una exposición impartida por un viejo maestro que desprende empatía hacia el alumno, percibiremos como el concepto digital y las redes sociales han restado de importancia el trabajo, totalmente artesanal, de quienes pintaron con pincel y aerógrafo el póster cinematográfico de antaño. Un artista que en cierta manera redefine a través de su trabajo el imaginario colectivo a la hora de captar la supuesta esencia de narrativas y personajes, haciendo que cada película, en base a su cartel, sea atractiva para un público que por aquel entonces era atraído principalmente por las enormes imágenes publicitarias esparcidas por las ciudades. A través de la obra de Renato Caso veremos fragmentos de su vida cotidiana, de sus fotografías y su basto material de archivo celosamente guardado en el estudio de su ciudad natal de Treviso, como suele ser preceptivo en esta clase de trabajos el documental también se acerca al lado humano del artista en base a recuerdos y curiosidades varias, reflexiones en primera persona sobre su pasado e incluso su presente, su adolescencia, su encuentro con los grandes ilustradores y directores de la época como John Huston, Sergio Leone, Claude Lelouch, Dario Argento, Rainer Werner Fassbinder, Bernardo Bertolucci, Giuseppe Tornatore, Francis Ford Coppola o Martin Scorsese entre otros muchos. El artista así mismo nos revela la técnica de la pintura, realizando en vivo algunos carteles famosos, a tal respecto veremos multitud de bocetos preliminares que dieron lugar a los originales. L’ultimo uomo che dipinse il cinema también se beneficia del testimonio de terceros, coleccionistas, críticos y personalidades del mundo del cine italiano que han trabajado con Renato Caso, que tiene para bien contarnos no solo los detalles, la dinámica creativa y la implicación comercial de ciertos carteles de éxito, sino también una mirada anexa a la época dorada de cine italiano en base a sus implicaciones artísticas y sociales. Un documental que cuenta en ese aspecto lo que representó el póster de cine en la Italia de la posguerra permitiéndose el lujo de reflexionar sobre la evolución del mundo del cine de ese período concreto y el valor artístico que supuso el trabajo de un hombre que pinto cine.

Valoración 0/5: 3

 

Manos torpes

Un niño, Peter, ve morir a su padre a manos de un cazador de recompensas, y toda su vida estará obsesionado por vengar esa muerte. Cuando es un joven que trabaja al servicio del poderoso ranchero Charly, contrae matrimonio en secreto con Dorothy, la hija del hacendado. Pero éste, que pretende casarla con otro hombre por interés, hace que el joven sea apaleado y abandonado en el desierto para que muera. Cuando la muerte está próxima, reconoce en la cara de la persona que le salva la vida al asesino de su padre: el cazador de recompensas Latimore. De momento Latimore le ayuda. Sin embargo, cuando el precio por la cabeza de Peter sube como la espuma, el duelo entre ambos pistoleros será inevitable.

Dentro de esas sinergias que suelen ser  tan proclives en los festivales de género se dio la agradable oportunidad de poder revisitar en pantalla grande y copia restaurada un western tan peculiar como es Manos torpes aprovechando tanto su acertada selección para la sección Seven Chance por parte del crítico Alejandro G. Calvo como en lo referente al homenaje que el certamen tuvo para bien concederle a Manuel de Blas, actor secundario que formo parte del elenco de la película dirigida por Rafael Romero Marchent.

La estimulante Manos torpes viene a ser una curiosa hibridación resultante del Spaghetti Western y de ese otro fascinante subgénero poco transitado que es el Weird Western, posiblemente lo sea de una forma algo involuntaria. En tal sentido la fusión del western con el género fantástico posee una infinidad de sugestivas implicaciones, esa irrupción de lo que podíamos denominar como anómalo en una película del Oeste nunca ha sido aprovechada del todo, unas mixturas genéricas que con sus puntos de contacto y divergentes han sido expuestos en la mayoría de ocasiones de una forma casi anecdótica. A tal respecto Manos torpes introduce desde la propia extrañeza del relato apuntes fantásticos a una trama que sigue el esquema habitual del cine de venganzas de tono fatalista, hay momentos a rescatar  como ese inicio onírico de índole pesadillesco y premonitorio en donde se confunde la imaginación con la realidad, o esa escena impagable zombie que años más tarde nos recordaría George. A. Romero en el inicio de la magistral Day of the Dead demuestran como su catalogación de weird es lógicamente extrapolable a su condición de exploitation, algo que queda reflejado a la perfección en la parte del film en donde el protagonista se reinventa o renace bajo la enseñanza de un maestro de las artes orientales, ese momento kung fu, unidos a los otros arriba comentados, tal como los plantea Rafael Marchent, no desvirtúan ni resta un ápice de credibilidad a un relato de contornos tan bizarros como entretenidos.

 Valoración 0/5: 3’5

 

The Silencing

Después del secuestro de su hija, un cazador decide reformarse y aislarse del mundo en una reserva natural. Años después, abandona su retiro para ayudar a la sheriff local a capturar a un peligroso asesino que pudo haber estado implicado en la desaparición de la niña.

The Silencing vino a certificar esa clase de películas residuales de catalogación algo dudosa provenientes de esa sección Orbita que este año por razones de logística desapareció de la programación de Sitges. Lo más curioso de este thriller de suspense que aporta bien poco en lo referente a su supuesta originalidad es ver como directores de origen europeo, en un principio prometedores, se ven en cierta manera engullidos por trabajos de un claro índole alimenticio una vez integrados en la maquinaria de producciones estadounidenses, en esta ocasión el belga Robin Pront que en 2015 tuvo un interesante debut con la notable D’Ardennen no consigue ni mucho menos estar a la altura de su ópera prima.

En cierto modo The Silencing representa ser todo lo contrario con respecto al primer trabajo tras las cámaras de su realizador, un film cuyo principal lastre posiblemente no recaiga en transitar por recovecos ya demasiados transitados sino más bien por contar mal una historia que básicamente pretender dar dos puntos de vista antagónicos acerca de una investigación criminal, por una parte la del protagonista principal y por otra la de la agente de policía (personaje incoherente donde los haya), ambos terminaran convergiendo en relación a unos crímenes en los que por un motivo u otro tienen interés o implicación. En tal sentido el correcto trabajo tras las cámaras de Robin Pront, con una especial incidencia hacia un tono agreste oscuro, no atesora el suficiente crédito a la hora de ocultar las evidentes carencias del guion a cargo de Micah Ranum, este juega al consabido concepto genérico de “quien es el asesino” durante una narrativa que como mandan los cánones está plagada de falsos culpables y estereotipos varios adyacentes al género negro. Sin embargo The Silencing termina siendo una película bastante incapacitada a la hora de profundizar, ni siquiera cierra algunas de sus tramas, en muchos de los apuntes e ideas que son levemente percibidos en su algo confuso argumento, llegando a transitar en el pantanoso terreno del thriller con denominación de predecible, aquel que para mal simplifica en base a su torpeza el suspense que esta por descifrar.

Valoración 0/5: 1’5

 

Crónica Festival de San Sebastián 2020. Día 8

El valor de la maternidad

Presente en la sección New Directors el debut tras las cámaras del brasileño Joao Paulo Miranda Maria nos ofreció un enigmático relato de carácter etimológico y lenguaje onírico acerca de la complicada aceptación que puede llegar a tener un legado social y cultural en un país como es Brasil que da la sensación de estar actualmente situado en una inclemente realidad poco dada a la esperanza. En Memory House vemos como Cristovam trabaja en una fábrica de leche en una antigua colonia austríaca en Brasil. Se siente solo, condenado al ostracismo por diferencias culturales y étnicas. Un día, descubre una casa abandonada llena de objetos que le recuerdan a sus orígenes.

Posiblemente debido a una situación ideológica y social algo complicada como es la actual diversos estamentos culturales dan la sensación de estar obligados a ofrecer un tono contestatario a una realidad, como la de Brasil, a través por ejemplos de películas en donde su tesis argumental parte del concepto de volver a conectarse a unas raíces, que en el caso de Memory House devienen casi como primigenias, en la medida de recuperar una serie de valores que ahora están percibidos como perdidos. En tal sentido el film de Joao Paulo Miranda Maria navega principalmente en base a la denuncia a través de reconocibles texturas que nos derivan al Cinema Novo pero también en relación, como ya lo hacia el Bacurau de Kleber Mendonça Filho, a insertar elementos, aquí casi indescifrables, de tono fantástico en el relato. Al final y pese a evidentes diferencias en lo relacionado a sus narrativas ambas películas nos direccionan a un mismo ideario, o esa es la percepción que un servidor tuvo de todo ello, ya sea a través de la refundición de géneros de índole popular con una clara mirada política o bien como en el caso que nos ocupa, la de mostrar una especie de fábula folklórica de contornos crípticos narrados desde la extrañeza, en ambas historias, que no apelan a mecanismos obvios de denuncia social, el mensaje o alegoría acabaran confluyendo a la hora de decirnos como las raíces del pueblo pueden significar el único conducto valido posible hacia una especie de purificación, o más bien hacia una última resistencia, con respecto a un presente cruelmente opresivo para con el débil.

Dentro de la muy válida e interesante cosecha asiática vista este año dentro de la sección New Directors, Gull la opera prima de la realizadora china Kim Mi-jo, vino a certificar por si aún existían dudas al respecto el buen nivel existente en esta edición en dicho apartado, un film conciso de denuncia cuya mejor virtud radica en ofrecernos una visión nada maniquea de un conflicto moral y social, el relato nos retrata la vida de O-bok, una mujer de 61 años que ha regentado una tienda de mariscos en un mercado de pescado durante décadas. Un día tiene su primer encuentro con los futuros suegros de su hija In-ae. Esa noche, O-bok es violada por Gi-taek. Al principio, finge que no ha pasado nada y trata de seguir con su vida como siempre. Poco después, le confiesa la violación a In-ae. La policía llama a Gi-taek para investigar y la historia del incidente comienza a difundirse por el mercado.

Es ciertamente interesante el comprobar como una película como Gull prescinde de ese catálogo formalista que en ocasiones deriva en preciosista en base a multitud de dictados y estilos varios de índole artificial tan recurrente últimamente en las óperas primas a la hora de abordar una problemática social mostrada a través de un retrato psicológico, aquí expuesto desde la mirada de una no potencial víctima de violación, en cierta manera estamos ante una película que recurre constantemente a la elipsis casi a modo de un acto de fe, nos cuenta bastante pero en base a no mostrarnos mucho, especialmente en lo referido a un suceso, situado fuera de campo, que dará pie a todo el entramado argumental posterior, este se desarrolla en referencia a un tono que deviene como cotidiano, o al menos en lo referido a su génesis, apenas percibido como algo casi anecdótico que ira volviéndose enrevesado conforme la victima de la violación se sienta totalmente legitimada moralmente para la denuncia pese al cada vez mayor descredito al que se ve sometida por todo su entorno. En Gull también encontraremos interesantes apuntes al contexto de la crisis económica como podemos comprobar en ese intento de expropiación por parte del ayuntamiento del mercado en donde trabajan víctima y acusado, una problemática que en parte colinda con la principal del relato, el de la denuncia, a la hora de establecerse curiosos paralelismos en referencia a como la sociedad prioriza una cuestión para relativizar la otra, por fortuna la mirada de Kim Mi-jo a tal respecto no se sustentara en la demagogia como suele ser bastante habitual en estos casos, la visión de la realizadora devendrá limpia y libre de prejuicios en base a su condición de relato contemplativo, decisión que encumbra esta honesta y estimable película.

Resulta algo complicado el ubicar de forma adecuada la agitada e irregular trayectoria de Fernando Trueba a lo largo de estos últimos cuarenta años, en ella evidentemente veremos un punto de inflexión en película como Belle Époque o La niña de tus ojos, anteriormente nos encontraremos con el que es posiblemente su mejor trabajo, El sueño del mono loco, curiosamente un film que se aparta por completo de lo que es su ideario cinematográfico, sin embargo en su posterior desarrollo se le ha etiquetado de ser uno de los directores del cine patrio más importantes de los años 90 a pasar poco menos a ser un proscrito en lo relativo a encadenar fiascos cinematográficos de forma reiterativa, El olvido que seremos que venía con el sello Cannes y que clausuro, ese honor que últimamente resulta ser envenenado para cualquier tipo de certamen, esta edición del Festival de San Sebastián supone una especie de regreso ambicioso por parte de Fernando Trueba que aquí vuelve a colaborar con su hermano David a la hora de narrarnos de manera íntima la vida de un hombre bueno, el médico Héctor Abad Gómez, carismático líder social y hombre de familia, un destacado médico y activista por los derechos humanos en el Medellín polarizado y violento de los años 70. La historia relata la vida del doctor, padre de familia preocupado tanto por sus hijos como por los niños de clases menos favorecidas. En su casa se respiraba la vitalidad y la creatividad características de una educación fundamentada en la tolerancia y el amor, sin embargo la tragedia asomaba en el seno de la familia.

Basada en la novela de Héctor Abad Faciolince El olvido que seremos sabe en parte abstraerse del consabido biopic al uso a la hora de mostrarnos un relato en donde prima principalmente el concepto familiar por encima de los hechos, un canto apasionado y desbordado a dicho conclave, la relación del padre, un hombre honesto bajo los rasgos de un excesivamente esforzado Javier Cámara, con sus hijos nos hacer recordar en algo a la fundamental Matar a un ruiseñor del gran Robert Mulligan en la medida de retratar como la sabiduría ha de ir en consonancia con la tolerancia mediante el discurso oral que el padre imparte a los hijos. En tal aspecto El olvido que seremos no deja de suponer una especie de respiro algo agraciado en la trayectoria de Fernando Trueba, sin embargo no estamos ante una película sutil en referencia a exponer todo un catálogo de sentimientos, aquí muy enfatizada por música compuesta por Zbigniew Preisner, que busca continuadamente la agitación del espectador también en base a un sentido del lirismo pretérito tan forzado que podría remitirnos perfectamente a la Roma de Alfonso Cuarón. Posiblemente también se percibe un exceso a la hora de idealizar de una forma algo repetida al personaje principal, algo que en cierta manera puede resultar hasta lógico en lo concerniente a un director supuestamente afín a tal ideario que en estos últimos tiempos no ha sabido equiparar del todo bien una obra que se ha movido de forma algo confusa y convulsa a través de compromisos y militarismos algo vacuos.

True Mothers fue otra de esas películas presentes este año en la sección oficial a concurso que en un principio tenían previsto su participación en el festival de Cannes del pasado mes de mayo, con toda seguridad de haberse celebrado el certamen galo la película también hubiera estado presente en San Sebastián en la sección Perlas pues Naomi Kawase es un nombre ya muy habitual en ambos festivales, en True Mothers, adaptación de la novela de Mizuki Tsujimura, la directora nipona vuelve a incidir y explorar en una de las temáticas más recurrentes, casi de modo obsesivo, de toda su filmografía como es el concepto de la maternidad aquí expuesto desde distintas vertientes, la historia nos cuenta como tras una larga e insatisfactoria lucha por quedarse embarazada y convencida por una asociación de adopción, Satoko y su marido deciden adoptar a un niño. Años después, su familia se tambalea con la amenaza de Hitari, una chica desconocida que dice ser la madre biológica. Satoko opta por confrontar a Hitari directamente.

En True Mothers se hace visible como se empieza a vislumbrar una especie de involución en la carrera de la responsable de El bosque del luto, en cierta manera esta dirección en sentido inverso va un poco a contracorriente con respecto a la gran mayoría de autores, si en sus primeros trabajos estos estaban plagados de simbolismos y alegorías a cual más diversas, también en lo referido a un cierto preciosismo visual como aún pudimos ver en su anterior y algo indigesta Vision, en True Mothers se opta por una narrativa de un tono sencillo que evita dichos excesos, por momentos lindante con el cine clásico pero también atesorando texturas bastantes reconocibles que la direccionan a un tono comercial que aquí colinda de forma algo peligrosa con el concepto de publicitar por ejemplo la autoayuda. De alguna manera el film, en donde Naomi Kawase abandona ese escenario agreste prototípico en sus historias para ofrecernos un relato urbano, parte de una premisa que pese a sus ramificaciones argumentales es bien simple, contada en dos tiempos y sendas tramas que terminan convergiendo a la hora de explorar dos, o tres, vertientes totalmente diferentes de la maternidad en lo relativo a preguntarnos qué significa ser madre y que incidencia puede tener en ello el hecho de ser biológica o adoptiva, para ello Kawase se toma todo el tiempo del mundo posible, quizás demasiado. Aun así a tal respecto hay acotaciones ciertamente interesantes en la película como para no desmerecer el producto, cuestiones de fondo como esos apoyos mutuos que las mujeres crean a la hora de sobrevivir a un trauma psicológico como vemos en la historia de la joven madre biológica de 14 años expuestos en el relato a modo de unos flashbacks que aunque interesantes en lo referente a su tesis no deja de ser un pequeño lastre para el desarrollo y fluidez que vertebra una historia, en parte algo domesticada, que posiblemente sea la accesible de toda la filmografía de Naomi Kawase.

 

Palmares

Concha de Oro a Mejor Película: Beginning, de Dea Kulumbegashvili

Concha de Plata a la Mejor Dirección: Dea Kulumbegashvili por Beginning

Concha de Plata a Mejor Actriz: Ia Sukhitashvili por Beginning

Concha de Plata a Mejor Actor: Mads Mikkelsen, Thomas Bo Larsen, Magnus Millang y Lars Ranthe por Another round

Premio del Jurado a Mejor Fotografía: Yuta Tsukinaga por Any Crybabies Around?

Premio del Jurado a Mejor Guion: Dea Kulumbegashvili y Rati Oneli por Beginning

Premio Especial del jurado: Crock of gold, de Julian Temple

Premio Nuev@s Director@s: La última primavera, de Isabel Lamberti

Premio Horizontes Latinos: Sin señas particulares, de Fernanda Valadez

Premio del público: The Father, de Florian Zeller

Premio Zabaltegi: A metamorfose dos pássaros, de Catarina Vasconcelos

Premio Irizar al cine vasco: Ane, de David Pérez Sañudo

Premio de la Juventud: Limbo, de Ben Sharrock

Atlàntida Film Fest llegará en diciembre a 6 países europeos

El festival de cine de Filmin llega en diciembre a Portugal, Grecia, Serbia, Rumanía, Bulgaria y Albania.

Atlàntida Film Fest, el mayor festival de cine online de Europa, organizado por Filmin, amplía su edición internacional y llegará en diciembre a seis países europeos: Serbia, Grecia, Albania, Rumanía, Bulgaria y Portugal. Tras 10 años de historia y un crecimiento exponencial en su edición presencial en Mallorca y en la online en Filmin (se contabilizaron más de 550.000 espectadores en su última edición), el certamen da el salto a nuevos territorios gracias a la colaboración del Programa MEDIA Europa Creativa de la Unión Europea.

Del 1 al 31 de diciembre, Atlàntida Film Fest Internacional estará disponible en las plataformas Cinesquare y Filmin Portugal. Sus suscriptores podran acceder a la Sección Oficial, que incluye ocho títulos imprescindibles de la última edición del Atlàntida Film Fest; y al Catalan Focus, donde, gracias a la colaboración con el Institut Ramon Llull, se visibilizarán internacionalmente nueve de las producciones catalanas más exitosas del año, inéditas hasta el momento en estos seis países.

En la Sección Oficial encontramos grandes títulos como la ópera prima póstuma del compositor Jóhann Jóhannsson, “Last and First Men”, en la que Tilda Swinton narra una historia sobre la extinción de la Humanidad. La película se presentó en el Festival de Berlín y ganó el Premio de la Crítica del Atlàntida Film Fest. A destacar también la presencia del thriller empresarial danés “The Exception”, que cuenta con un reparto de lujo encabezado por Sidse Babett Knudsen (“Borgen”). El misterioso documental “Banksy Most Wanted” expone las múltiples teorías sobre la identidad del provocador y escurridizo artista urbano. Más títulos recientes forman parte de esta sección: la ganadora a Mejor Película en el Festival de Dublín, “Supernova”; la provocadora cinta que retrata a los jóvenes radicalizados de la ultraderecha danesa, “Sons of Denmark”; y la gran sensación en los Premios del Cine Alemán, “I was, I am, I will be”. Finalmente, “Tench”, una provocadora historia sobre la pedofilia; y el revolucionario documental sobre el body positivity, “Fat front”, completan una Sección Oficial de lujo.

De la mano del Institut Ramon Llull, Atlàntida Film Fest exporta Catalan Focus, una selección cuyo propósito es visibilizar el talento catalán más allá de nuestras fronteras. Así, nueve títulos catalanes tendrán la oportunidad de llegar al público internacional: “Els dies que vindran” de Carlos Marques-Marcet; el thriller colectivo “La filla d’algú”, protagonizado por Aina Clotet; la brillante ópera prima de Belén Funes, “La hija de un ladrón”, gran triunfadora de los Premios Goya y Gaudí, donde “7 raons per fugir” ganó el Premio Especial del Público; la conmovedora historia del asesinato de Guillem Agulló, “La mort de Guillem”, también de Marqués-Marcet y estrenada en el Festival de Málaga, donde fue premiada “Ojos negros”, de Marta Lallana e Ivet Castelo, sobre el despertar vital de una adolescente en la España vacía. La selección se completa con tres de los mejores cortometrajes españoles de los últimos tiempos: los ganadores del Goya “Suc de Síndria” y “La última virgen”; y del Festival de Málaga, “Después también”.

Sección Oficial
• Last and First Men (Jóhann Jóhannsson, Islandia, 2020)
• The Exception (Jesper W. Nielsen, Dinamarca, 2020)
• The End of Love (Keren Ben Rafael, Francia, 2020)
• Banksy Most Wanted (Seamus Haley & Aurelia Rouvier, Reino Unido, 2020)
• Supernova (Bartosz Kruhlik, Polonia, 2019)
• Sons of Denmark (Ulaa Salim, Dinamarca, 2019)
• Tench (Patrice Toye, Bélgica, 2019)
• I Was, I Am, I Will Be (Ilker Çatak, Francia, Alemania, 2019)
• Fat Front (Louise Detlefsen, Louise Unmack Kjeldsen, Dinamarca, 2019)

Catalan Focus
• Els dies que vindran (Carles Marqués-Marcet, 2019)
• La mort de Guillem (Carles Marqués-Marcet, 2020)
• La hija de un ladrón (Belén Funes, 2020)
• 7 razones para huir (Esteve Soler, Gerard Quinto, David Torras, 2018)
• Ojos negros (Marta Lallana, Ivet Castillo, 2019)
• La filla d’algú (Marcel Alcántara, Gerard V. Cortés, 2019)
• Suc de Síndria (Irene Moray, 2019)
• Después también (Carla Simón, 2019)
• La última virgen (Bárbara Farré, 2018)

Crónica Festival de Sitges 2020. Día 4

Comrade Drakulich

Hungría, años 70. El camarada Fábián, el héroe húngaro de la revolución cubana, regresa a casa para participar en una campaña de sangre para Vietnam, la nación hermana comunista de Hungría. Pero algo anda mal con el viejo camarada: parece un hombre de 30 años, tiene un comportamiento genial y conduce un Mustang rojo fuego. Una joven pareja que trabaja para la policía secreta es asignada para vigilar al extraño.

Posiblemente el segundo trabajo tras las cámaras del realizador húngaro Márk Bodzsár vino a certificar ese tipo de cine que de alguna manera le da un sentido a la existencia de un certamen cinematográfico, o al menos al concepto que antes se entiende de tal, lejos de la calidad que pueda atesorar el producto en cuestión Comrade Drakulich representa a la perfección esa clase de películas que dadas sus características difícilmente se verá de una forma regularizada en nuestro país si no es a través de un festival cinematográfico como el de Sitges.

Comrade Drakulich es una especie de hibrido genérico de índole localista que seguramente nazca de una voluntad comercial muy manifiesta por parte de sus responsables al recurrir a un mito del fantástico tan conocido como el vampirismo a la hora de apropiarse de dicho concepto y llevarlo al terreno del humor de tono satírico en referencia a los paralelismos y las reasignaciones aquí existentes entre el mito de Drácula y el comunismo existente en la Hungría de los años 70. A través de esa premisa de índole universal que nos cuenta como los vampiros no pueden morir a semejanza de como la ideología comunista también es percibida como eterna queda situado el elemento fantástico y un trazo de comedia que nunca llega a desvirtuar lo anterior encontrándonos de por medio una trama detectivesca con un ligero barniz romántico expuesto a tres bandas, a la postre la que de alguna manera se adueñe casi por completo de una narrativa que ante nuestra mirada puede resultar tan exótica como por momentos moderadamente entretenida.

Valoración 0/5: 2

 

Sea Fever

La tripulación de una embarcación irlandesa pierde su rumbo en alta mar. Su vida corre peligro ya que un parásito ha hecho acto de presencia en su suministro de agua.

La amenaza invisible proveniente del exterior, en su gran mayoría de origen alienígena, en relación a un grupo de personas que de una manera u otra están enclaustradas y han de enfrentarse obligatoriamente a dicho peligro ha constituido en estas últimas décadas casi un subgénero propio dentro del fantástico, en el encontraremos referentes indiscutibles conocidos por todos como por ejemplo las fundamentales Alien o The Thing, dentro del mismo ha habido una serie de ramificaciones estereotipadas que también han ido creando escuela viéndose imitado hasta la saciedad en lo concerniente a como un personaje femenino, a primera instancia de apariencia frágil, consigue erigirse líder y a la postre superviviente del grupo al que pertenece, la realizadora dublinesa Neasa Hardiman revisita tal concepto en la apreciable Sea Fever teniendo el añadido de intentar acotar interesantes variaciones a dicha temática.

Lo primero que queda claro de una película de las características de Sea Fever es percibir como Neasa Hardiman no es una realizadora muy afín al género fantástico, da la sensación de ser esa clase de autores que pasan por el de forma casi accidental y no de una manera vocacional desde un inicio, algo que no tiene por qué ser peyorativo forzosamente pues no sería la primera vez que se ha dado el caso de como una mirada alejada del estereotipo genérico en base a su asimilación autoral ha ofrecido películas ciertamente interesantes, Claire Denis con la estupenda High Life o la reciente Little Joe de la austriaca Jessica Hausner por citar solo dos ejemplos de realizadoras. Sea Fever como relato contenido, por momentos más cercano al drama de tono survival que al del terror propiamente dicho, se asoma tímidamente a dichos postulados arriba comentados al ser una curiosa variación de la temática del terror marítimo reconfigurado aquí hacia parcelas derivativas del eco-thriller de ciencia ficción en donde el monstruo como ente físico amenazador es sustituido por un virus que no deja de ser otro concepto del monstruo pero que en esta ocasión crece de forma no tan visible dentro del organismo de los protagonistas muy a la manera, pese a no ser tan explícita, de aquel reivindicable found footage de Barry Levinson titulado The Bay. Las variaciones antes comentadas en referencia a su narrativa vienen dadas en la medida de percibir como llegados a un punto del relato la amenaza del invasor entendida como tal pasa a un segundo plano, en realidad nunca quedara resulta tal cuestión, en este caso se prioriza el razonamiento científico con un ligero trasfondo ecologista en detrimento del susto fácil, también se hace hincapié en el tono paranoico del superviviente, curiosamente aquí encontraremos alguna que otra interesante concomitancia con nuestro presente a la hora de plantear conceptos morales tales como el dilema al que se ven sometidos los protagonistas de no infectar al resto de la población en base a diferentes comportamientos, principalmente el egoísta y el responsable, frente a una amenaza vírica aquí retratada como invisible.

Valoración 0/5: 3

 

Possessor

En Possessor vemos como Tasya Vos es una agente de una organización secreta que utiliza implantes cerebrales para controlar el movimiento corporal de otras personas, obligándolas a cometer asesinatos que benefician a toda clase de peces gordos del mundo corporativo. Un día, durante una misión rutinaria, algo sale mal. La agente Vos se ve atrapada dentro de la mente de uno de los sujetos que trataba de controlar, cuyo apetito por la violencia se acaba convirtiendo en su peor aliado, superando incluso el suyo propio.

La ganadora indiscutible de este Sitges 2020, Mejor película y director, correspondió al segundo trabajo tras las cámaras de Brandon Cronenberg titulado Possessor, un director que de forma algo curiosa forma parte de esa larga lista de realizadores premiados y muy recurrentes en el festival que son primogénitos de cineastas ya consagrados, a bote pronto me vienen  a la memoria los nombres de Panos Cosmatos, Duncan Jones o Jennifer Lynch por ejemplo, la pregunta con respecto a Brandon Cronenberg y su cine vendrá dada a la hora de preguntarnos hasta qué punto este es deudor de un legado paterno conceptual en la medida de crearnos una perspectiva en referencia a lo que son sus auténticas virtudes.

Es complicado el abstraerse de la obra de Cronenberg padre a la hora de referirse a la de su hijo por una simple cuestión de que ambas guardan una conexión muy evidente pese a que este último no se queda corto en referencia al aporte personal, esta será más bien en la referida a indagar narrativamente en temáticas e imaginarios varios relacionados en su gran mayoría con el body horror y el tecno-thriller más que en lo concerniente a lo meramente formal. Si ya en la notable Antiviral vislumbrábamos retazos evidentes en su parábola futurista en base al terror clínico y corporativo muy recurrente en la obra de David en este thriller de ciencia ficción colindante con el terror onírico que orbita en base a la idea de invadir el espacio del otro sin tener permiso que es Possessor existen claros conceptos ya percibidos en películas como Scanners o la extraordinaria Existenz en lo concerniente a explorar realidades virtuales que afectan a nuestra personalidad mediantes fugas mentales y trasmutaciones corporales urdidas aquí casi bajo el concepto de la “penetración forzada” representado en la película en base a contundentes y explícitos estallidos de violencia. Sin embargo y pese a que Possessor es una interesante película como también lo era su opera prima Brandon Cronenberg aún no da la sensación de atesorar el talento de su padre, pese existir ideas la realización del film ganador de esta edición de Sitges deviene como algo tosca, también lo es en referencia a una narrativa expuesta de forma deficiente, posiblemente demasiado cerebral y esquemática en el desarrollo de unos personajes que no termina por explorar el propio universo del que están estructurados más allá del concepto puramente visual por el que se mueven.  Posiblemente estemos ante un director que aún sigue buscando un lugar concreto, un autor que de alguna manera se encuentra en una continua evolución aun por terminar, en tal sentido Possessor no deja de ser un paso adelante en referencia a una autoría que se vislumbra tan deudora e imperfecta como atrevida y sugerente.

Valoración 0/5: 3’5

 

Be Water

En 1971, tras ser rechazado por Hollywood, Bruce Lee regresó a la casa de sus padres en Hong Kong para completar cuatro películas icónicas. Ilustrando su lucha entre dos mundos, este retrato explota la cuestión de la identidad y de la representación a través de material inédito, entrevistas con sus seres queridos y los propios textos escritos por el legendario maestro de las artes marciales.

Uno de los documentales estrella que se pudieron ver este año en Sitges fue el Be Water de Bao Nguyen, un trabajo algo funcional que repasa la trayectoria y posterior legado de ese casi concepto cultural llamado Bruce Lee, un documental, integrado dentro de la cosecha presente este año en el festival en referencia a los trabajos de la no ficción, que posiblemente fuera el más publicitado previamente por parte de la organización, algo que tendría que llevar a una cierta reflexión acerca de que tipos de documentales se le han de dar prioridad con respecto a su visionado, en tal sentido queda bastante claro que estamos ante un tipo de material que no es muy afín para una gran mayoría de público de Sitges, suele ser una característica común ver proyecciones, como la de la interesante L’ultimo uomo che dipinse il cinema, con la sala prácticamente vacía, Sitges suele programar material didáctico interesante cada año, mucho del mismo derivado a la sección Brigadoon, sin embargo un servidor tiene la impresión de que el certamen no publicita o promociona con algo más de esmero dichos documentales, posiblemente debido a percibir poco interés por parte de un gran número de la audiencia, una sinergia que no deja de ser algo peligrosa pues entramos en una especie de circulo vicioso que parece regirse por el concepto de la demanda y oferta, algo que en parte es todo lo contrario de lo que tendría que ser la idiosincrasia de un festival de cine.

A tal respecto Be Water dio la sensación de ser una especie de concesión al público por su innegable calado popular, un documental perteneciente a la serie 30 For 30 de la cadena ESPN que parece nacer de una necesidad contestataria en lo concerniente a esa entendida por algunos vulgarización del personaje visto fugazmente en la reciente Once Upon a Time in Hollywood de Quentin Tarantino. Basándose en los comentarios de la voz en off de diversos allegados estamos ante una mirada cálida y en cierta manera autorizada de una figura icónica que asumió proporciones míticas tras su muerte pero que sin embargo no parece tener mucho acceso a su vida interior como hombre, en tal aspecto Be Water es un documental vertebrado a partir de testimonios de los propios familiares otorgando al producto la catalogación de oficial y por consiguiente algo carente en lo que respecta a la indagación de los aspectos menos luminosos del astro de las artes marciales, esto no significa que estemos ante un mal documental pues en cierta manera pese a su evidente funcionalidad y esa mirada algo sesgada antes comentada Be Water es un aplicado ejercicio de reconstrucción que tiene sin embargo el hándicap pese a su corrección de no aportar nada nuevo al estudio de un personaje ya suficientemente transitado que pese a ello sigue esperando que aparezca una visión que sea percibida como la definitoria.

 Valoración 0/5: 2

 

El huerto del francés

A finales del siglo XIX, un francés llega a Peñaflor, un villorrio andaluz próximo a Sevilla. Nadie conoce su origen, pero es un hombre inteligente, trabajador y ambicioso. Pronto se establece como prestamista y se casa con Elvira Orozco, la hermosa hija del hombre más rico del pueblo. Construye una casa con jardín y huerto y la convierte en un prostíbulo. Señoritos, toreros y otra clase de gente frecuentan el «huerto del Francés», pero algunos de ellos jamás regresaron.

Gracias a su reconversión en estos últimos años y pese a una cierta sensación de seguir siendo una especie de cajón de sastre temático lo cierto es que la sección Seven Chances nos ofreció una selección de películas que pese a su diversidad de tonos y conceptos fue posiblemente fue de lo más interesante visto en este Sitges 2020. Nunca viene de más recordar que dicha sección fundada en el año 1993 bajo el mandato de Xavier Catafal nació de la feliz idea de escoger siete películas por parte de un mismo número de críticos que no tenían visos de tener una distribución comercial ni en cines ni en el ámbito doméstico de nuestro país. Evidentemente con el paso de los años dicho concepto de selección se ha ido desvirtuando de una forma lógica dado el cambio coyuntural existente dentro del mundo de la distribución, aun así esa máxima de ofrecer siete oportunidades de un material de difícil visionado se ha mantenido hasta día de hoy más o menos fiel al espíritu inicial como se pudo comprobar este año con la proyección de una magnífica copia restaurada de la no menos excelente El huerto del francés de Paul Naschy.

Aunque muchos no quisieron darse cuenta la proyección del El huerto del francés fue uno de los indiscutibles puntos álgidos de este atípico Sitges 20202, en tal sentido el festival cumplió con la labor casi pedagógica de dar una oportunidad de oro con respecto a ofrecer el visionado de una película complicada de ver hasta día de hoy y hacerlo a través de una restauración de lujo. No deja de ser curioso como un film como El huerto del francés ha sido hasta el presente un film maldito en la trayectoria de Paul Naschy, figura clave a la hora de entender el desarrollo y evolución del llamado Fantaterror, una película que sin temor a la equivocación puede considerarse como una de las mejores obras realizadas por parte del cineasta madrileño. El huerto del francés, que basa su historia en un caso extraído de la crónica negra, vendría a ser una hija putativa de esa clase de películas que aprovecharon la transición democrática de finales de los 70 y principios de los 80 a la hora de romper corsés que limitaban la libertad cultural, en tal sentido el film de Paul Naschy representa a la perfección la quintaescencia del true crimen rural patrio pese a existir antecedentes previos como por ejemplo El crimen de la calle Bordadores de Edgar Neville, el tono seco y oscuro direccionan la película a ser casi una génesis de referentes posteriores más populares como por ejemplo El crimen de Cuenca de Pilar Miró y muy especialmente la serie de televisión La huella del crimen en referencia a reflejar la carga social adyacente en aquella torva España negra, aquí escenificada en la Andalucía profunda. Una obra muy reivindicable que enerva el concepto de la crónica negra por encima de cualquier otro tipo de artificios quedando expuesta a través de una sordidez de tono malsano a modo de un fiel retrato social de una oscura época pretérita de nuestro país.

Valoración 0/5: 4

Crónica Festival de San Sebastián 2020. Día 7

Traumas paternofiliales y oscuras reconfiguraciones del mito de Frankenstein

Dentro de la sección New Directors el segundo trabajo tras las cámaras del joven realizador polaco Piotr Domalewski salió por decirlo de alguna manera bastante bien parado en referencia a transitar con cierto aplomo y frescura por temática bastantes recurrentes en un tipo concreto de cine europeo que suele indagar en problemáticas de índole social y afectivas, I Never Cry nos cuenta como una joven chica de diecisiete años llamada Ola debe viajar a Irlanda para trasladar a Polonia el cuerpo de su padre, muerto en un accidente en la construcción. Lejos de interesarse por él, Ola quiere saber si su padre ahorró el dinero necesario para el coche que le había prometido. Mientras se las apaña para lidiar con la burocracia extranjera utilizando su picardía, comienza a conocer a que fue su padre.

Tiene cierto merito el contarnos una historia que para nada es relativamente novedosa pero hacerlo de una forma que resulte bastante empática para con el espectador, en I Never Cry volvemos a percibir ese tipo de relato social europeo de claro tono realista tan deudor de las películas de Ken Loach, no estaría de más en un futuro intentar contextualizar la importancia que ha tenido el ahora algo denostado por esa nueva critica festivalera de índole elitista realizador británico en el cine contemporáneo europeo que transita en los diversos perjuicios adyacentes en el sistema social, a tal respecto la película de Piotr Domalewski parte de la premisa de cómo la inmigración ha causado un déficit afectivo en muchas familias que terminan adquiriendo la condición de desestructuradas ante tal situación. I Never Cry en tal sentido vertebra toda su historia mediante un consabido coming of age de manual, aquí el viaje interior de la joven protagonista, notable performance a cargo de Zofia Stafiej, quedara expuesto mediante la oportunidad, a diferencia de sus progenitores, de vislumbrar un futuro no dependiente en lo social y tener un control propio para con su vida, todo gira en torno a ese concepto, una alegoría perfectamente expresada en la estupenda escena final de este pequeño pero agraciado film en donde vemos como el deseo de conseguir el carnet de conducir por parte de la joven protagonista se hace realidad de la forma menos previsible.

El actor y ahora director Viggo Mortensen aprovechando ese sinergia tan habitual que se viene dando en las últimas ediciones del festival con la entrega del Premio Donostia presento en San Sebastián su opera prima como realizador, un film de tintes autobiográficos que indaga en la parte menos amable de una relación paterno filiar. En Falling vemos como John Peterson vive con su marido Eric y su hija adoptiva, Monica, en California. Willis, su padre, un granjero solitario y conservador, accede a viajar a Los Ángeles y quedarse en casa de John mientras busca el lugar idóneo para jubilarse. Durante su estancia, los mundos de padre e hijo chocan violentamente, hurgando en viejas heridas y abriendo nuevas en el viaje mutuo a la aceptación y el perdón.

Lo primero que destaca de una película de las características de Falling es su no adscripción, por fortuna, a ese tono académico lindante con el melancólico del drama familiar tan reconocible a la hora de retratar desde detrás de las cámaras una existencia o una parte de ella, en ese sentido la opera prima de Viggo Mortensen no es un relato cómodo ni agraciado pero por lo visto si veraz, este viaje interior contado en base a dos narrativas de pasado y presente nos acerca a una suerte de reflexión interiorizada a cargo del personaje del hijo interpretado por el propio Mortensen en lo concerniente a los enigmas que pueden esconder ciertos afectos familiares relacionados con lazos sanguíneos en donde aquella máxima que dice que la familia no se elige simplemente se acepta o no cobra una especial relevancia, en este aspecto el relato orbita principalmente a través del personaje del padre, un poco a la manera del James Coburn del Affliction de Paul Schrader nos encontramos a un ser que a través del resentimiento del pasado ha forjado una personalidad amargada e irascible, comportamiento que se ve alarmantemente engrandecido en relación a la demencia senil que padece. Falling posiblemente abuse de dicho retrato al exponerla pero no matizarlo del todo, una mirada por momentos reiterativa en algo que ya detectamos desde el principio de la historia, a tal respecto el discurso misógino, homofóbico o racista del padre terminara derivando en base a su reiteración hacia un tono de humor de características casi sardónicas poco favorable a la hora de profundizar en temáticas tales como la distancia insalvable entre generaciones o el perdón como acto de redención, quedando algo difusa, en parte incompleta, esa mirada a la figura del patriarcado nocivo aquí intuido a través de una vertiente algo abstracta. Con todo lo mejor de Falling lo encontraremos en la labor interpretativa de un inconmensurable Lance Henriksen, un espléndido actor de reparto que de forma algo inexplicable rara vez en su dilatada trayectoria ha tenido papeles de protagonista principal, en este aspecto nunca es tarde si la dicha es buena.

No deja de ser cuanto menos sintomático como el único film de género fantástico presente este año en San Sebastián fuera de alguna manera el que abriera a través de sus imágenes el debate y la reflexiones más controvertidas y rica en matices de todo el certamen, presente en la sección Zabaltegi -Tabakalera el segundo trabajo tras las cámaras de la realizadora Sandra Wollner tras su notable ópera prima The Impossible Picture nos sitúa en un viaje nada placido a través de la mirada neutra de un ser artificial hacia una sociedad demasiado imperfecta. En The Trouble with Being Born vemos como Elli es un androide y vive con un hombre al que llama padre. Es capaz de rememorar vacaciones y cualquier otra cosa que él programe para que ella recuerde. Durante el día se dejan llevar por el verano y por la noche él la lleva a la cama. Diseñada para asemejarse a uno de sus recuerdos, realmente parece estar viva, a veces incluso parece soñar, y sin embargo no deja de ser una máquina, un contenedor para esos recuerdos que lo son todo para él y nada para ella. Esas evocaciones parecen dominarle, de hecho han llegado a tener vida propia. Una noche ella se interna en el bosque siguiendo un eco evanescente. Se pierde entre los matorrales y alguien la encuentra y se la lleva a su casa, proporcionándole nuevos recuerdos y una nueva identidad.

En The Trouble with Being Born se cumple una dicha que no deja de ser personal por parte de un servidor en referencia a como películas de nacionalidad alemana o austriaca, más allá de ese concepto que es Michael Haneke, dan la sensación de saber manejarse mejor a la hora de transitar por tramas de índole malsano, en tal sentido la notable cinta austriaca The Trouble with Being Born no es una excepción, el film aparte de ser un demoledor y algo creepy relato de fantasmas interiores en cierta manera pervierte conceptos varios vistos en films como el A. I. Inteligencia Artificial de Steven Spielberg o el Air-Doll de Hirokazu Koreeda a través de una mirada de un androide a una sociedad que deviene como enferma. El tono expuesto por Sandra Wollner en este relato en donde la creación supuestamente es más perfecta que el creador por el simple hecho de carecer de imperfecciones de este será la de un tono tan oscuro como aséptico que por momentos parece colindar con los imaginarios surgidos por el gran Jonathan Glazer. En The Trouble with Being Born está muy presente Under the Skin en relación a la mirada del no humano, si allí el alienígena terminaba por empatizar de alguna manera con la condición de las personas aquí la inteligencia artificial a diferencia de lo que suele ser habitual en muchas películas no quiere volverse humana pues carece simplemente de dicha necesidad, el androide será y actuara en esta ocasión a modo de un espejo configurado a la medida de los recuerdos y deseos de sus dueños, la culpa del pasado y la pedofilia como males desvirtuados del ser humano, ambos atesoraran una dolorosa memoria para quien los cometen, acentuada aquí por la mirada fría e impávida del artificial.

Viene siendo bastante habitual en estos últimos año que el coreano Hong Sangsoo esté presente en San Sebastián, su película numero 24 formo parte de la sección Zabaltegi-Tabakalera, una película en la que vuelve a reincidir en la colaboración con la actriz y actual pareja sentimental del realizador Kim Minhee, The Woman Who Ran nos cuenta como mientras su marido está en un viaje de negocios, Gamhee queda con tres mujeres a las afueras de Seúl. Primero visita a dos amigas en sus casas y después se encuentra de casualidad a una vieja amiga en un cine. Pero la interrogante vendrá dada en la medida de saber ¿quién es la mujer que huye, de qué huye y por qué?

La sensación de que el responsable de The Day He Arrives esté sufriendo una especie de involución puede parecer bastante perceptible en un primer momento, sus últimos trabajos a diferencia de la gran mayoría de los anteriores dan la impresión de ser bastante más básicos a un nivel narrativo, en parte ya no se percibe una necesidad de recurrir a bucles temporales ni narrativas de tono cripticas a la hora de lanzar el mensaje, en lo formal sin embargo Hong Sangsoo sigue un posicionamiento que se percibe como fijo, en cierta manera es del todo impensable que a estas alturas lo abandone, el zoom abrupto y los largos planos siguen siendo un recurso marca de la casa. The Woman Who Ran es un fiel reflejo de lo antes comentado, una película casi esquemática, dudo mucho que esté compuesto por más de diez planos secuencias,  la trama consistirá en tres encuentro que la protagonista, de nuevo Kim Minhee, tiene con sendas amigas, cada uno de ellos será interrumpido por alguna intervención algo molesta llevada por una hombre, tres relatos que se repiten a modo de libro de estilo más depurado. Sera a través de esas conversaciones en apariencia cotidianas en donde se nos exponen como viene siendo habitual en el cine de Hong Sangsoo situaciones y pensamientos en principio funcionales para ir convirtiéndose poco a poco en algo más profundo en relación especialmente a distintas dinámicas de pareja, a tal respecto uno tiene la impresión que estos relatos en principio tan pequeños son de alguna manera los que mejor saben reflejar el ideario de un autor que pese a la reiteración de conceptos ya asumidos como inamovibles, o si se prefiere variaciones apenas imperceptibles sobre un mismo tema, sigue dando esa reconfortante sensación de realizar un tipo de cine en base a una sutileza y sencillez que parece estar concebida para que el espectador pueda habitar dentro del mismo relato.

Después de estar presente en la pasada edición dentro de la sección oficial a concurso con la estimable A Dark-Dark Man el realizador Adilkhan Yerzhanov volvía un año después a San Sebastián con una nueva película, en esta ocasión integrada dentro de la sección Zabaltegi-Tabakalera. En Yellow Cat, que está estructurada narrativamente a través de siete capítulos, cada uno presentado a modo de introducción por un dibujo infantil, vemos como el ex convicto Kermek y su amada Eva quieren dejar atrás su vida delictiva en las estepas kazajas. Él tiene un sueño, construir un cine en las montañas. ¿Será el amor, o más bien obsesión de Kermek por Alain Delon y la película El silencio de un hombre de Jean-Pierre Melville lo bastante fuerte como para mantenerlos alejados de las violentas garras de la mafia del lugar?

Viendo las dos últimas película de Adilkhan Yerzhanov parece quedar bastante claro que estamos ante una autoría tan definida con respecto a sus mimbres como algo difícil de asimilar por parte de aquel espectador que no esté dispuesto a aceptar las algo atípicas reglas de juego orquestadas por parte del director de Kazajistán. Tanto en la espléndida A Dark-Dark Man, thriller local con derivas al noir existencialista trágico expuesto a través de esa sempiterna colisión adyacente en la inocencia y en una culpabilidad moral casi viral dentro de una sociedad en donde la corrupción anida en un sistema que genera por igual a víctimas y verdugos, como en la película que nos ocupa los personajes parecen anclados en la nada, representada en su ubicación a través de la inhóspita estepa kazaja, los dos relatos parte de premisas criminales, la primera de una forma evidente, Yellow Cat lo hace sin embargo a través de una confusión genérica algo desconcertante, podríamos decir que la historia se ampara en parámetros muy parecidos al True Romance de Tony Scott, joven prostituta y joven delincuente emprenden una huida de connotaciones quiméricas, la pregunta viene dada en la medida de cuestionar si Yellow Cat es comedia o drama, lo que se nos cuenta en cierta manera no da lugar para muchas sonrisas, el modo en que lo hace posiblemente sí, ese humor absurdo y desconcertante, que por momentos parece mirar sin ningún tipo de pudor a imaginarios provenientes del cine de Jacques Tati por ejemplo, ya intuido a través de pequeñas pinceladas en A Dark-Dark Man, que en su tramo final vira hacia tonos algo más serios y poéticos,  aquí se adueña por completo de una función en donde encontraremos un sinfín de referencia cinéfilas que más que direccionados a la pleitesía del referente dan la sensación de ser una especie de imitación de connotaciones casi paródicas. Una película tan entretenida como desconcertante poseedor de un final muy triste que pese a estar situada un escalón por debajo de su anterior A Dark-Dark Man es un trabajo a tener en cuenta a la hora de valorar a ese tipo de autores cada vez más difícil de detectar que hacen que su obra atesore un tono identificativo y reconocible muy propio en relación a un estilo aquí percibido principalmente en base a la exposición de formalismos poco convencionales.