El cine de los hermanos Zellner retrospectiva del Americana 2019

Todos sabemos de famosos hermanos que se han dedicado al mundo del cine. Empezar a citarlos sería absurdo. Pero quizás muchos todavía no conozcáis a los hermanos Zellner. Y es que David y Nathan todavía son dos desconocidos para el gran público, fuera de los Estados Unidos. Y eso que llevan haciendo cine desde que debutaron en 1997 con Plastic Utopía. Desde entonces han rodado juntos cinco largos más y un puñado de cortos premiados en los festivales más prestigiosos del mundo. Repartiéndose tareas de dirección, guion, producción, edición, fotografía e incluso actuación, queda claro que los hermanos Zellner son de los pocos directores actuales que controlan sus trabajos hasta el final. Cine de autor de verdad porque además, tienen unas constantes de estilo muy marcadas: humor absurdo, referentes cinéfilos que reinventan, vida cotidiana enrarecida, personajes solitarios, el estado de Texas y la extraña presencia de varios animales como protagonistas. Podríamos decir que los Zellner son la última joya oculta del cine indie americano. Y para ayudaros a descubrirlos, el Festival Americana junto con la Filmoteca de Catalunya os presentamos una retrospectiva de estos dos directores que comprende cinco de sus películas y sus cortometrajes. Entre los días 6 y el 31 de marzo, la Filmoteca de Catalunya proyectará dos sesiones de cada uno de sus largos, excepto de Damsel que tendrá solo una proyección que se sumará a la del Festival Americana y también una proyección que nos mostrará doce de sus premiados cortos.

De entre los largometrajes podremos ver Frontier, su segundo trabajo, una locura con un sentido del humor absurdo sobre dos débiles exploradores que intentan colonizar un nuevo mundo, la nación de “Bulbovia”, un lugar donde su racionalidad será absurda ante el salvajismo y las extrañas costumbres de los habitantes de allá, gente que come escarabajos, cambia de esposas o abusa de los árboles. Un delirio que ya estuvo en SXSW en 2001.

Con la inclasificable Goliath, la segunda película de los Zellner programada en la retrospectiva, los dos directores empiezan a hacerse un hueco dentro del indie y por primera vez son seleccionados por el Festival de Sundance. Un gato perdido (los animales son una constante en sus primeros trabajos) es la obsesión de nuestro protagonista (el mismo David Zellner, acompañado en el reparto de su hermano Nathan y el amigo Andrew Bujalski), un hombre recientemente divorciado, mediocre, con un trabajo cualquiera por el que no tiene interés. El animal, lo único que queda de su matrimonio, se vuelve una obsesión patética en esta comedia punzante, hilarante, desesperada, a veces cerca del drama demoledor. Tan oscura como a la vez divertida, Goliath es un buen ejemplo de la forma de hacer cine de los Zellner: en la frontera de todo, en terreno de nadie.

Kid-Thing es el tercer trabajo seleccionado, una especie de cuento de hadas divertido, delirante y amargo, donde  Annie, una niña de diez años que vive (como no) en Austin con un padre que no está demasiado por ella, se dedica a vagar por el bosque y a romper cosas. Un día escucha una voz femenina saliendo de un pozo. Annie, a partir de entonces, día tras día, volverá al pozo llevando alimentos para socorrer a la mujer, pero también un puñado de preguntas y dudas existenciales. Entre la fantasía y el hiperrealismo, los hermanos Zellner, cerca de los (también hermanos) Dardenne o de Kelly Reichardt, componen un original estudio sobre los perdedores y quizás también sobre la locura. La película estuvo en los festivales de Sundance y SXSW en 2012.

Kumiko, the Treasure Hunter, la cuarta por película de la retrospectiva, la conoceréis los que nos seguís desde el principio porque estuvo en la segunda edición de Americana, en el 2015. En medio del ruido de una ciudad de 35 millones de personas, la Kumiko se siente desesperadamente sola. Torturada por su soledad vive su día a día llena de resentimiento hacia un trabajo inútil, un jefe que la degrada y hacia una madre que no para de darle la lata porque todavía está soltera. Pero su estado de ánimo cambia cuando ve una escena en una película americana, donde un hombre entierra una maleta llena de dinero en un remoto lugar invernal de los Estados Unidos. Con poco más que un mapa hecho a mano,  Kumiko se embarca en un viaje épico e insólito hacia la helada Minnesota para reencontrar su fortuna. Presente en Sundance, SXSW, Austin o Toronto, recibió las nominaciones a mejor director y actriz en los Independiente Spirit Awards de aquel año.

Y finalmente, completa la retrospectiva su último largo, que presentamos en esta edición de Americana: Damsel. Samuel Alabaster (Robert Pattinson) llega a un pueblo del oeste de los de siempre, lleno de polvo y de gente de dudosa fiabilidad. Pretende empezar un viaje para encontrar a su prometida, Penélope (Mia Wasikowska), secuestrada por unos delincuentes. Y una vez la salve quiere pedirle para casarse. Pero las cosas no serán tal y como él esperaba y los roles de héroe y chica a salvar serán cada vez más difusos. Damsel toma todo aquello que necesita del western clásico para reinterpretarlo y llevarlo hasta la más absoluta modernidad. Le añade un poquito del humor y los diálogos de Tarantino, un deambular próximo a Dead Man y mucho del cine imprevisible de ellos mismos, de los hermanos Zellner. Todo ello forma un cóctel explosivo y delirante, un western diferente a todo lo que hemos visto hasta ahora.