“The Wind” review

El film nos cuenta como finales de 1800 una presencia maligna afecta a una joven mujer que acude a la frontera norteamericana para establecerse allí junto a su marido. La paranoia comienza a apropiarse poco a poco de su mente, desatando una espiral de locura y terror de trágicas consecuencias.

El debut en la dirección de Emma Tammi parte de una cierta peculiaridad al unir dos géneros muy antagónicos en un principio y con ejemplos ciertamente escasos en números como resultan ser el western y el terror, la indagación genérica en torno a un terreno hasta ahora poco explorado abre en un principio nuevas vías que pueden resultar novedosas de cara al espectador habituado al fantástico, en el caso que nos ocupa expuesto a través de un claro tono psicológico, al igual que algunos trabajos de cineastas como Jennifer Kent, Julia Ducournau o Ana Lily Amirpour entre otras muchas The Wind supone un nuevo ejemplo de relato auspiciado por autoras que podríamos denominar de nuevo cuño, a través de sus trabajos muy posiblemente estemos asistiendo la evolución más significativa e interesante del cine de cine de género de estos últimos años. Es por ello que de alguna manera la opera prima de Emma Tammi nace de una cierta condición contestataria, posiblemente más direccionada, de forma voluntaria o no, en lo relativo a su fondo y no tanto a unas formas que por momentos parecen beber claramente de las referencias.

Esas referencias señaladas que detectamos en The Wind las podemos encontrar por poner un solo ejemplo entre muchos otros en Repulsion de Roman Polanski, al igual que Catherine Deneuve la protagonista de la película que nos ocupa se adentra en un desvarió psicológico que deviene como in crescendo, si la primera era debido principalmente a un apartheid emocional de la sociedad en The Wind dicha ruptura con la conciencia es debido en gran parte a un escenario que deviene como claro percutor de esa supuesta fractura mental, a través de lo meramente sugerido en clave fantástica acerca del supuesto detonante de dicha actitud es donde encontraremos los mejores momentos del film, el entrar en un terreno en donde lo intuido y lo atmosférico van al unísono expuestos a través de una narrativa fraccionada y pausada en donde se confronta lo racional con la mitología, es en esa ambivalencia en donde nuevamente encontraremos una indagación en el clasicismo cinematográfico, en este caso poniendo como ejemplo la fundamental The Innocents de Jack Clayton, perfecto paradigma que obligaba al espectador a preguntarse si la visión de la protagonista era provocada por un elemento fantástico o simplemente venia de raíz.

Del mismo modo y a un nivel algo mas alegórico The Wind también podría ser leída como una muy ligera muestra de film que intenta indagar a través de un cierto empoderamiento de la mujer en el western y al mismo tiempo como relato de fantasmas interiores en lo referente a una visión plenamente femenina (que el guion corresponda a otra mujer como Teresa Sutherland da algunas pistas al respecto) dando la inequívoca impresión de querer dar una vuelta de tuerca más a un género tan rígido en esquemas genéricos como resulta ser el western, emparentado aquí con el horror-folk , en tal sentido la opera prima de Emma Tammi al igual que el The Witch de Robert Eggers transita en todo momento a través de lo insinuante o lo subyacente, quedando expuesto mediante tiempos pausados a modo de una cocción narrativa que deviene lenta en su trasfondo a través de una base contemplativa que evidentemente en algún momento del relato llega a resquebrajarse con la inclusión del supuesto elemento fantástico, la soledad como factor de desequilibrio en modo de indagación subyacente de cierto folklore local representado en esta ocasión por un misterioso viento que influye de alguna manera en la débil psique de la protagonista principal (notable Caitlin Gerard), mujer que sufre, como abnegada esposa que se queda sola en casa mientras su marido apenas hace acto de aparición en ella, las consecuencias de dicho factor imaginario a modo de elemento inherente a una irrealidad subjetiva que marcaran una historia que por momentos tiene la virtud de redefinir con cierto aplomo conceptos genéricos desde una mirada tan renovada como distanciada en referencia a sus casi inexistentes precedentes. The Wind como relato de claras connotaciones de terror insinuante deviene como una ópera prima muy a tener en cuenta pese a sus evidentes aristas, una apuesta sin apenas concesiones en donde se prioriza más el trayecto que el destino, posiblemente no tenga un beneplácito más generalizado que si han tenido otras autoras que han transitado por sendas parecidas con anterioridad, algo que no ha de ser óbice para seguir con inusitada atención los futuros trabajos de alguien tan prometedor como da la impresión de ser Emma Tammi.

Valoración 0/5: 3’5