“Open Windows” review

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Nick (Elijah Wood) es un chico con suerte. Esta noche va a conocer a Jill Goddard (Sasha Grey), la actriz más excitante del momento. Jill está promocionando su última película, y Nick ha ganado una cena con ella, en un concurso por la web. Sin embargo, recibe una llamada de un tipo, Chord (Neil Maskell), que le informa de que la cena ha sido cancelada y le confiesa que es culpa de la caprichosa actriz. Chord, en compensación, y demostrando unas increíbles habilidades como hacker, le ofrece a Nick el acceso para poder espiar a Jill durante el resto de la noche, desde su propio portátil, de formas que ningún otro fan podría soñar jamás. Pero una terrible verdad comienza a revelarse. Todo parece ser un montaje ideado por Chord, en el que Nick es la pieza de un plan mucho mayor.

Open Windows” el tercer largometraje rodado por Nacho Vigalondo tiene más de una similitud (y no solo porque ambas estén protagonizadas por Elijah Wood) con “Grand Piano” de su compañero Eugenio Mira, los dos films suponen una  novedosa reinterpretación de la narrativa en que se basan las películas de Alfred Hitchcock y ambas son propuestas arriesgadas y novedosas dentro del actual panorama de género patrio que la llevan a ser productos de una imperfección bastante perceptible que hay que juzgar con cierta benevolencia dada su valentia conceptual.

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Lo primero que hay que destacar de “Open Windows“, primero rodado en inglés por su director, es la buena mano con que se desenvuelve este a la hora de plasmar en imágenes este thriller tecnológico de enorme complejidad logística (100 minutos de duración sobre siete horas totales de metraje que obligaron a que la postproducción se prolongase durante más un año), la película esta vivida y relatada en tiempo real mediante el uso de portátiles, cámaras de seguridad, móviles etc,cualquier dispositivo es válido a la hora de que Vigalondo cree un ritmo muy rápido mediante el uso de estos mimbres logrando un ejercicio de estilo de lo más notable, algo que ya se intuía en “Los Cronocrímenes” pero no tanto en la simpática “Extraterrestre“.

Un ritmo frenético que engancha al principio pero que debido a la naturaleza del producto hace que el espectador llegue a un grado considerable de cansancio mental a la media hora de duración debido en parte a la propia estructura narrativa del film, sufriendo aquí un bache algo considerable y llevándonos en su acabado a un final con varios giros argumentales tan inverosímiles como lo fueron en “Grand Piano” y en donde no estaría de más ponerle algún límite a la credibilidad de la historia, pero que no tendría que suponer ninguna insatisfacción en términos generales a la hora de juzgarla pues el propósito de “Open Windows” está en un primer lugar el destacar el efectismo técnico al narrativo.

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Open Windows” también nos ofrece por momentos un meritorio ejercicio de voyeurismo por parte del director cántabro llegando a plantear varias ideas que lamentablemente no tienen el desarrollo deseado, el derecho a la intimidad o privacidad por parte de personajes famosos o el concepto inverso del enunciado..hasta donde tiene que satisfacer estos personajes a un publico quizás demasiado incondicional.

Pensar que el futuro del género de nuestro país pasa por gente como Nacho Vigalondo solo puede ser motivo de satisfacción, propuestas tan ingeniosas e inteligentes como “Open Windows” así lo atestigua, un tipo de cine tan ávido tanto en ideas como en estructuras.

 

 

Valoración 0/5:3’5