“The Trouble with Being Born” review

En The Trouble with Being Born vemos como Elli es un androide y vive con un hombre al que llama padre. Es capaz de rememorar vacaciones y cualquier otra cosa que él programe para que ella recuerde. Durante el día se dejan llevar por el verano y por la noche él la lleva a la cama. Diseñada para asemejarse a uno de sus recuerdos, realmente parece estar viva, a veces incluso parece soñar, y sin embargo no deja de ser una máquina, un contenedor para esos recuerdos que lo son todo para él y nada para ella. Esas evocaciones parecen dominarle, de hecho han llegado a tener vida propia. Una noche ella se interna en el bosque siguiendo un eco evanescente. Se pierde entre los matorrales y alguien la encuentra y se la lleva a su casa, proporcionándole nuevos recuerdos y una nueva identidad.

No deja de ser cuanto menos sintomático, y algo desilusionador en referencia al mero índole de selección, como el único film de género fantástico presente el pasado año en el Festival de San Sebastián fuera de alguna manera el que abriera a través de sus imágenes el debate y las reflexiones más controvertidas y rica en matices de casi todo el certamen, presente en la sección Zabaltegi -Tabakalera el segundo trabajo tras las cámaras de la realizadora austríaca Sandra Wollner tras su notable ópera prima The Impossible Picture nos sitúa a través de un relato de ciencia ficción sin apenas artilugios en base a un viaje nada placido a través de una mirada lanzada a una sociedad percibida como demasiado imperfecta.

En The Trouble with Being Born se cumple una dicha, que en parte no deja de ser muy personal por parte de un servidor, en referencia a como películas de nacionalidad alemana o austriaca, incluso más allá de ese concepto que es Michael Haneke, dan la sensación de saber manejarse mejor que otras muchas cinematografías a la hora de transitar e indagar por tramas de un índole crudo y malsano, relatos que parecen direccionados a otorgar desasosiego hacia el espectador, en tal sentido la notable cinta austriaca The Trouble with Being Born no es una excepción al ser esa clase de relatos que parecen estar poniendo en todo momento el dedo en la llaga, un film, que aparte de ser un demoledor y algo creepy relato de fantasmas interiores y utilizar el concepto de la Inteligencia Artificial casi como excusa argumental, en cierto modo pervierte a su manera dicho temario vistos en films como por ejemplo el A. I. Inteligencia Artificial de Steven Spielberg o la esplendida Air-Doll de Hirokazu Koreeda en la medida de exponer a través de la mirada de un androide a una sociedad que deviene como enferma. Como película que trasgrede el mito de Pinocho el tono expuesto por Sandra Wollner en este relato en donde la creación supuestamente es más perfecta que el creador por el simple hecho de carecer de las imperfecciones de este será tan oscuro y aséptico como gélido, una escenografía que si forzamos en algo las referencias por momentos parece colindar con los imaginarios propios surgidos por el gran Jonathan Glazer.

A tal respecto es muy evidente que en The Trouble with Being Born está muy presente Under the Skin, película que en España y en este atípico 2020 ha estado muy presente dado su estreno comercial siete años después de su realización, en relación a la observación del no humano a nuestra sociedad, si allí el alienígena terminaba por empatizar de alguna manera con la condición de las personas aquí la inteligencia artificial a diferencia de lo que suele ser habitual en muchas películas, en su gran mayoría de claro tono mainstream, no quiere volverse humana pues carece simplemente de dicha necesidad, el androide será y actuara en esta ocasión a modo de un espejo configurado a la medida de los recuerdos y deseos de sus ocasionales dueños, la culpa del pasado y la pedofilia serán aquí los principales males, desvirtuados y no aceptados, del ser humano, ambos atesoraran una dolorosa memoria para quien los han cometido, acentuada aquí por la mirada del artificial a modo de espejo recordatorio de pecados pretéritos en la medida de despertar unos sentimientos que parecían alienados hasta ese momento.

Valoración 0/5:3’5