Autores españoles en un D’A 2018 que se inaugurará con “Chesil Beach”

El D’A Film Festival Barcelona se inaugurará el día 26 de abril con el estreno de la película inglesa Chesil Beach, dirigida por el premiado dramaturgo y director teatral Dominic Cooke y basada en la novela homónima de Ian McEwan, que se responsabiliza también del guion de este film ambientado en la Inglaterra de los años sesenta protagonizado por Saoirse Ronan y un nuevo talento que habrá que seguir de cerca, Billy Howle.

Directores y directoras españoles en el D’A 2018

Fiel a su compromiso con el cine hecho aquí, el D’A 2018 retoma la sección Un impulso colectivo a la que se añade un programa de cortos sumando un total de 14 largometrajes y 13 cortometrajes, con gran variedad de temáticas, historias y voces.

A las películas ya anunciadas se unen la magnética Trinta Lumes de Diana Toucedo – montadora de Penèlope y A estación violenta, presentes también en esta edición del D’A–, película estrenada en la Berlinale, entre la ficción y el documental, ambientada en un pequeño pueblo gallego donde parece que los muertos andan entre los vivos. También se ambienta en Galicia Dhogs de Andrés Goteira, ganadora de diez premios de la Academia Galega do Audiovisual, una ópera prima sorprendente que es una rara avis del cine fantástico español.

Será un honor recibir en el D’A 2018 a algunos directores que pasaron por el festival con sus primeras películas: Sotabosc es el evocador título del nuevo film de David Gutiérrez Camps, director de la celebrada The Juan Bushwick Diaries, y No quiero perderte nunca de Alejo Levis, un drama sensorial sobre el miedo a envejecer y a morir. Tampoco podían faltar dos sospechosos habituales del festival -muy diferentes entre ellos- con sus nuevas películas. La nueva obra de Ramón Lluís Bande, Escoréu, 24 de avientu de 1937, que dialoga con sus trabajos anteriores, profundizando nuevamente en la reivindicación de la memoria histórica y los olvidados de la guerra civil; y Puta y amada, el nuevo film de Marc Ferrer, que continúa reivindicando su cine personalísimo y al margen de todo con una indagación sobre el fin de la juventud, cargada de elementos autobiográficos.

También habrá espacio para los documentales con la propuesta de Gerard Ortín Castellví que en Perrolobo (Lycisca) juega constantemente con la experimentación formal y la introspección sonora; el debut en la dirección de Íngrid Guardiola con el docu-ensayo Casa de ningú; y Ainhoa: yo no soy esa, segundo film de Carolina Astudillo que parte de una historia particular para mostrar un retrato global de la Barcelona de los 80. Completan los nombres de la sección Un impulso colectivo las obras de dos directoras debutantes, Yo la busco de Sara Gutiérrez, film que empieza como una comedia generacional para mutar en una experiencia más oscura y onírica, y Ver a una mujer de Mònica Rovira, una película visualmente extraordinaria que casi se convierte en un exorcismo autoafirmativo.

Fuera de la sección Un impulso colectivo y concursando en la sección Talents, encontramos también dos películas de talentos locales: A estación violenta de la joven directora Anxos Fazáns, basada libremente en el libro homónimo de Manuel Jabois, y con la colaboración en el guion de Ángel Santos (Las altas presiones); y Jean-François y el sentit de la vida, debut en la dirección de largometrajes del reconocido cortometrajista Sergi Portabella, con la odisea en que se embarca un adolescente decidido a ser existencialista.

Cierra la presencia de directores españoles en el D’A 2018, el estreno de El vent és això, experimento de Pere Vilà con varios alumnos del instituto Santiago Sobrequés de Girona, que empezó como un ejercicio didáctico para acabar tomando la forma de largometraje y que cuenta con Alex Brendemühl entre sus protagonistas.

Good Time en el D’A 2018

Proyección única en España y en pantalla dentro del D’A 2018 del éxito de los hermanos Safdie, Good Time. Una de las mejores películas presentada en Cannes 2017 y favorita de la crítica (aunque finalmente solo ganó merecidísimamente el premio a la mejor banda sonora de Daniel Lopatin), protagonizada por un sorprendente Robert Pattinson en fuga constante por el barrio de Queens de un Nueva York alucinado. Un ejercicio de género renovador que conecta con el Scorsese más frenético y que supone una experiencia totalmente apabullante.